ஜ Look My Way ஜ [STOLITZO]

CAP 4: Trato

–El rojo te queda bien.  -- susurró alguien a mi oído. Mi cuerpo inmediatamente se alejo del dueño de aquella voz girando para encararlo. -- Es uno de mis colores favoritos, me preguntó cuánto tardaría tu pequeño cuerpo en tomar ese color. -- dijo, dando largos pasos hasta quedar frente a mi.

-- Escucha, me importa una mierda tus fetiches,  si vas a matarme que sea ahora. -- dije para ganar tiempo mientras pensaba en alguna forma de escapar, lanzarme a uno de los árboles se volvía cada vez la mejor opción.

--Sabes, hay otras formas menos aburridas de pagar por lo que hiciste. -- Dijo, abotonando su traje mientras veía alrededor. Lo mire confundido.

¿Otras formas? Es que acaso no estaba enojado por el atentado de volarle los sesos?.

-- Claro que lo estoy, y es por eso mismo que me encargaré de que recibas tu castigo. --El De ojos Camín volvió a clavar su mirada en mi. Brillando como dos rubíes. 

-- Como? -- Sentí mis facciones cambiar involuntariamente, el terror se apoderó de cada parte mi cuerpo al igual que la inseguridad al sentirme expuesto, había leído mis pensamos? Siempre lo hizo? Mi cabeza dolía cada vez más.

-- Trataste de asesinarme y ni siquiera te tomaste el tiempo de investigar sobre mi?-- Pregunto irónico para luego reír suavemente.-- Ya veo como terminaste en esta situación.

-- Para tu información me pagan por matar personas, no para volverme amigo de aristócratas fetichistas y egocéntricos. -- Solté molesto. Me sentía extrañamente ofendido por su comentario, pero tenía razón, de haber indagado y pensado mejor las cosas no estaría en esa bochornosa situación.

-- Pues creo que ya es tiempo de cambiar de planes, ya que el primero no funcionó, quizás la segunda opción sea más eficaz. -- Comentó con una sonrisa burlona de oreja a oreja acercándose mas y mas, obligándome a retroceder, y con tan solo dar unos cuantos pasos con sus largas piernas ya se encontraba frente mi. Era tan alto que mi cara casi chocaba contra su abdomen.

-- ¡Aléjate! Maldita sea!- Grite nervioso al no saber sus intenciones. Pero el no reaccionó, solo se me quedó viendo con esos ojos Camín que atravesaban mi ser, tratando de encontrar algo que no entendía.

-- Tienes una hija. -- susurro suavemente. Con una expresión neutra en su rostro. Me paralice enseguida, estaba hurgando en mis recuerdos? Me sentía tan expuesto e instintivamente tape mi frente como si eso pudiera evitar que siguiera leyendo.

--Loona, Una infernal y muy valiente. -- añadió con una pequeña sonrisa en sus labios. En ese momento recordé lo que Striker había dicho y deje el temor a un lado, no importaba cuánto me esforzará el se metería a mi cabeza una y otra vez.

-- Ella no tiene nada que ver en esto. --Hable fuerte apretando los puños. No dejaría que dañaran a mi hija, aún si tuviera que dar la vida por ello. -- Así que no pienses en siquiera tocarla. Por qué de ser así créeme que soy capaz de revivir solo para llevarte conmigo al infierno.-- Amenace con rabia, la cuál se esfumó al escuchar la sonora y sofisticada risa del Hombre quien solo se dio media vuelta dándome la espalda.

-- Un padre sobreprotector, me gusta.-- Dijo, dando dos pasos hacia adelante, dejando solo su espalda ancha y capa mojada por la lluvia. - Como padre de una hermosa y encantadora princesa, te compadezco, es por eso que te propongo un trato. -- El demonio se giró sobre sus talones, inclinándose hasta quedar a la altura de mi cara, que fue donde pude apreciar su tersa y pálida piel.

-- Te escucho-- Su sonrisa apareció nuevamente, dejando ver sus largos y filosos colmillos, que dejaban bien en claro que con solo un mordisco podía arrancarme medio cuello.

-- Últimamente, sujetos como tú, mercenarios, han tratado de colarse entre mis negocios solo por unas cuantas monedas, pero como dije, han tratado.-- Enunciado eso último con reproché. Acercando aún más su rostro hacia mi cara.

-- Y aunque, me cueste aceptarlo  de alguna u otra forma ganan. Violan la seguridad, se escabullen, sabotean y destruyen, A veces pienso, que quieren algo más específico que simplemente atravesarme la cabeza. --Dijo con fingida preocupación. Yo solo desvíe la mirada al tenerlo tan cerca, con las ganas contenidas de huir.

-- A qué te refieres-- pregunté nervioso.

-- Por qué no hacerlo cualquier otro día? Por qué siempre en luna llena? Cómo es que saben sobre eso?, algo tan confidencial e imperceptible  al mismo tiempo. ¿Sabes quién mando a tu queridísimo y leal compañero? -- pregunto. Y enseguida captó mi atención, estaba hablando de Striker?

-- Que fue lo que le hiciste. -- Exigí mirándolo expectante. No era como si me importará, ese infeliz se lo merecía, pero tenía curiosidad.

-- Es mejor que no sepas. -- Dijo serio. --  Fue la misma persona que envío a los últimos Tres, y esto ya me está comenzando a angustiar. Inclusive han tratado de herir a mi familia, y eso no es perdonable, es por eso que trabajarás para mí.  -- Dijo cómo si nada, dándose la vuelta de nuevo. Tarde unos segundos en procesar.

-- Fue por eso que no acabaste conmigo? Estuve a punto de matarte, si alguien con una oferta el triple de buena que la tuya me pide que te mate otra vez lo haré sin pensarlo. -- Dije sin pensarlo como si fuera lo más obvio del mundo, el mas tarado. El detuvo su paso y en un parpadeo tomo mi cuello firmemente, inclinando mi cuerpo por el borde del balcón.

-- Te creí más astuto. -- Susurro casi contra mis labios, con su gélida mirada sobre la mía. ¿En qué momento me tomo por el cuello? -- Escucha humano, desde hoy trabajarás para mí, solamente para mí,  ahora me perteneces y eso significa que acatarás todas mis órdenes cuando yo quiera y me seguirás hasta donde yo vaya si así mismo se tratase del mismísimo infierno, deberás seguirme ciegamente.-- Sentencio. Aflojando el agarre.

-- No puedes, hacer eso, va en contra de mis derechos humanos. -- Dije una vez en el suelo, tosiendo sin parar tratando de respirar.

-- Legalmente si puedo, te recuerdo que las leyes cambiaron? Y de no ser así, me debes la vida, por lo tanto considerarlo tu paga  por haber tratado de asesinarme. --

Su mirada no mostraba ningún atisbo de duda, lo que decía era en serio y aunque quisiera no tendría oportunidad de escapar o herirlo, mi cerebro lo asimiló tan rápido, esto me pasaba por desesperado e irresponsable, sabia que no me traería nada bueno, pero es difícil dejar el orgullo de lado, es tan malo querer lo mejor para tu familia?

-- Al menos, podré ver a mi familia por última vez? -- El terror de no volver a verlos me consumió, ¿Cómo había llegado hasta ahí? Mi familia. No podía dejar que todo terminará así.

-- Pero si ellos ya están aquí. -- Dijo abriendo las grandes puertas sin siquiera tocarlas.

¿Que?

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Aquí capitulo 4, lamento la tardanza, pero como ya han comenzado las clases nuevamente no e tenido tiempo ni de vivir 😭

¡PERO BUALAA! ya está publicado, espero les guste ♥️♥️♥️