CORONA DE CRISTAL

YA ME QUIERO IR

Quería seguir en la cama con Eloise, a pesar de que al principio despertar con ella a mi lado me tomo por sorpresa, fue algo consuso dado a que desde lo de mis padres no había podido conciliar el sueño con alguién a mi lado, preferia que las chicas se durmieran para luego irme o directamente pedir que las escolten fuera del lugar, eso sí, nunca en mi habitación, Eloise era la primera mujer en dormir en mi habitación, a decir verdad soy bastante desconfiado y no me gusta que la gente se acerque demasiado, que sea tan impulsiva, extraña, tan imprudente, en pocas palabras Eloise es todo lo que siempre dije que no me gustaba o no haria, pero en ella todas esas cosas me gustan y no se porque, no voy a decir que es divertido, lo detesto, de verdad lo hago, no es algo bonito el no saber como actuar por que lo que siento es extraño, quererla me está matando y digo quererla por que si no es eso no se que mas podría ser tan intenso y confuso, hay algo en ella que me hace sentir un poco mas vivo y menos perdido, quiero aferrarme a ello lo más posible antes de que esto se acabe

Después de que todos los flashbacks vinieran a mi mente de lo que paso en la noche entendí la situación, no iba a mentir, fue algo vergonzoso, un rey como yo comprometido en una cosa así, lo bueno es que aunque lo quisiera divulgar nadie le creeria, tengo una fama que me protege y aunque precisamente la fama muy buena no es, en situaciones como está es util que me respalde; si soy sincero no tengo arrepentimiento alguno sobre lo que sucedio, si me dijeras que pudiera cambiar un par de cosas, lo haría, el lugar, el momento, mi manera de reacionar, entre otras, pero entre que pasará lo que paso y que no pasará, elegiria que hubiera sucedido, todo esto ya que eso me permitió poder dormir a su lado, lo cual ya era sorprendente, ya que normalmente me cuesta conciliar el sueño, a pesar de que tomé alcohol no me es posible dormir con la tranquilidad con la que lo hice ayer, el dormir a su lado fue diferente, muy diferente, se sintió cálido, acogedor, sin pesadillas, ni preocupaciones que me agobiaran, tenía que volver a repetirlo, ¿ella querría si se lo propongo?

Pero en vez de estar en la cama con Eloise tenía que estar en un carruaje camino a Vanish, su reino lo cual resultaba algo irónico, los Soltarish llevaban meses intentar concretar una reunión conmigo, la verdad es que no soy muy fan de hacer presencia pública, soy un rey, mi lugar es estar en mi reino, no soy un payaso que tiene que estar dando un tour, aunque últimamente siento que por motivos sumamente políticos voy a tener que estar visitando Haizea de manera algo frecuente 

-Envía una caja importada de vino de Astraea a Haizea, también en la entrada deja un par de guardias- ordené una vez estuve a punto de cruzar la barrera de a Haizea, el reino apenas estaba surgiendo y sería blanco de ataques por parte de otros reinos, pero al saber que esta nación cuenta con mi apoyo, nadie se atrevería a tocarla, nadie excepto el ansioso de poder del rey Soltarish, por eso había aceptado su invitación

-¿está seguro su majestad?- dudo el guardia ante mi orden, el vino había sido algo que no había pasado hace años, era una medida desesperada, pero si todo sale como lo tengo planeado, servira de mucho y la reputación de Astraea no se vera dañada

-¿acaso pedí tu opinión?, di una orden, obedece- espeté molesto ante el cuestionamiento de mi guardia

En fin,el punto es que tenía que ir al reino de Vanish para resolver un par de asuntos, entre ellos lograr que Haizea sea invitada a la reunión de naciones

Después de un rato en el carruaje este se detuvo, mis guardias avisaron que ya habíamos llegado y nos encontrábamos en la entrada del castillo

-Buenos días, su majestad Venery, espero que el viaje haya sido cómodo- dijo el rey de Vanish mientras que yo salía del carruaje

Eloise y su padre eran casi idénticos, se notaban sus genes, la única diferencia era el color de cabello, Eloise poseía un color café bastante oscuro, al punto de que en lugares con poca luz se podía confundir con negro, pero en el sol su cabello parecía brillar dándote cuenta de que era un café con ciertas iluminaciones en algunas partes de su cabello, en cambio, su padre era rubio, la figura de su padre era bastante robusta y no muy alto lo cual compartia con Eloise la cual no poseía  una figura delgada, sino más bien fuerte y algo torneada lo cual terminaba en un deleite para la vista, al principio podrías dudar de sus habilidades dada su falta de altura, pero eso solo era una fachada la cual ella sabía aprovechar a la perfección, era obstinada y no le gustaba ser subestimada