XII;Gustav.

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Cuando salí,me dirigí a la comisaría.

Entré y saludé a Georg,que supongo que apenas salía de atender a Bill.

Subí las escaleras y lo vi. Estaba acostado de costado,tapado,durmiendo.

Parecía un pequeño ángel,se veía tan tierno,dormía como un bebé.

Saqué las llaves e intenté hacer el menor ruido posible,pero apenas hice unos pasos abrió los ojos como platos,lo cual me asustó un poco.

—¿Chantelle?— Dijo con su voz ronca —Te dije que no volvieras— No dije más,solamente me acerqué y lo besé.

Fue un beso tierno y bastante largo.

Cuando nos separamos,me miró a los ojos,sin poder decir nada.

(...)

Bill no entendía absolutamente nada. Apenas se levantaba y lo reciben con un beso en los labios,No de cualquier persona, Eran los de Chantelle.

—Joder...Apenas despierto...No entiendo nada— Se levantó. Siquiera le importó y besó a Chantelle una vez más. —Mierda Chantelle ¿Cuanto mides? Debo...No se,¿Arrodillarme?—

—Mido...un metro sesenta y uno— Se sonrojó un poco. Era demasiado baja para tener veintidós años —Y...Cambiando de tema. Tengo una respuesta mucho mejor a lo que dije la última vez—

—Mm,¿Y cual es tu respuesta?— Habló mirandola a los ojos

—Mi respuesta...Si. Acepto ser tu novia—

—Sabía que caerías. Nadie se resiste a mi—

—Si sigues así te voy a rechazar de nuevo—

—Era una broma— Dijo con una sonrisita leve y la besó otra vez. —¿Sabes? Hacía ya mucho tiempo de que no me sentía tan feliz como ahora— Dijo

—Han pasado cosas tristes esta semana,pero esta ocasión es una razón para sonreir— Dijo también con una sonrisa dibujada en su rostro

—Julie quiere que seas feliz— Había recordado su nombre.

—¿Lo recordaste?—

—Recuerdo todo lo que me dices,
Chantelle— Esas palabras sonrojaron a la chica. Le gustaba la idea de que recordase todo lo que ella le dice.

Ambos se sentaron en la cama.

—Sabes,hoy a venido una paciente nueva—

—¿Enserió? ¿Que es lo que tiene?—  Preguntó

—No tiene nada...Soy su psicóloga...Pero ¿Sabes? Veo a Julie en sus ojos—

—Entiendo...Pero ¿Es su mirar que te hace recordar...o es otra cosa?—

—No lo se...Su esencia tal vez,quizá sea su mirar—

—¿Como es que se llama?—

—Diana Schäfer—

—Interesante—

Ninguno de los dos dijo nada más. Chantelle se acostó en los brazos de Bill y el la acariciaba.

—Debes tomar siempre los medicamentos,Bill,pasé lo que pase—

—No tomo a veces porque es demasiado,Chantelle,no puedo ni pararme—

—Eso también es cierto. Si te empiezas a tranquilizar más aún,volveremos la semana que viene con tu anterior medicamento ¿okey?—

—Por favor. No soporto esa pastilla,sabe horrible—

Locura en la celda 30 /BILL KAULITZ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora