AMANTES

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LÍA ❤️‍🔥

el día de hoy Seokjin y yo cumplíamos 3 meses de ser amantes, y no estábamos arrepentidos de eso.

Después de escuchar a mi querido esposo o mejor dicho, después de tenerlo en un mar de lágrimas de cocodrilo y suplicandome perdón, decidí junto a Seokjin seguirle el juego por un tiempo, aunque si les soy sincera, esto no me gusta, algo que siempre decía mi querida abuela era, que las mentiras nunca te llevan a nada bueno, y yo definitivamente vivía una mentira junto a una traición.

Además los padres de Seokjin seguían pidiendo un nieto, y era más que obvio que esto no pasaría, ni ahora ni nunca y menos con mi esposo.

Cada vez que me encontraba con Seokjin le repetía una y otra vez que lo mejor era desenmascarar a ambos, a su hermano y mi cuñada, y que dejemos este juego, sin embargo el decía que no era tan fácil como yo creía, me daba una buena explicación junto a una ronda de sexo que me dejaba sin ánimos de pensar y la vagina goteando de mis fluidos.

Parecíamos recién casados, buscábamos cualquier oportunidad para comernos la boca del otro sin contemplaciones, sin pensar en que podrían atraparnos en el acto.

Me he convertido en una sinvergüenza, al principio me negué a sus descaradas caricias a escondidas de sus padres y mi esposo, incluso de su mujer, yo no quería ser como ella, una perra roba maridos, o bueno eso pensé al principio.

Nadie le roba el amor o el cariño a otra persona, el tomo su decisión, ella no es la única culpable en esto.

Aún así, mis mejillas se coloreaban de rojo, no solo era por el calor que Seokjin me daba, también por estar frente a mi cuñada y toda la familia.

Y es que los dedos de Seokjin son largos y escurridizos.

El se sentaba al final del comedor, de su lado izquierdo su esposa, y su madre, del lado derecho, yo y mi esposo, en medio su padre.

Así que me tenía aún lado, la primera vez que lo hizo casi me desmayo, mi corazón latía desbocado, por la excitación y el miedo a qué notarán que Seokjin tenía sus dedos acariciando mi clítoris con su pulgar, hundiendolo una y otra vez en mi vagina mojada.

- Te felicito mamá, el pescado quedó exquisito. - la voz de Jiho me hizo girar a verlo, pensé que nos había descubierto.

- Muchas gracias querido, pero el mérito es de Lía, ella hizo el pescado, Jenny la sopa y el postre... Fue hecho por mí. - la madre de mi esposo esbozo una sonrisa sincera hacia mi, y a Jenny la tomo de la mano con calidez.

- Pues para mí.... Esto está muy seco, ¿Tu que opinas cuñadita? - Seokjin me hizo girar el rostro cuando presiono con un poco más de fuerza en mi punto de placer, lo que me hizo soltar un jadeo.

No sabía que decir, ahí estaba su sonrisa que superficial mente era de burla, pero yo sabía que era de autosuficiencia al verme así de excitada por el y sus dedos gloriosos.

- ¡¡Yo... Yo!!... - no podía articular palabra, y para colmo Seokjin enterró aún más su pulgar en mi cavidad.

- Ya deja de molestar a mi esposa, no le hagas caso mi amor, vuelvo a repetir, esto está excelente. - quiso acariciar mi mano, más yo la quite al ver sus intensiones, justo ahora me sentirá mal si eso sucediera.

- Gracias por tus palabras, no te preocupes yo no le hago caso a tu pesado hermano. - dije con toda la contención que me dio la vida, quise sonar segura y creo que lo logré.

Saco su dedo de mi y suspiré aliviada por unos segundos, esto estaba mal, entonces.... ¿Porque movía mis caderas para sentirlo más?, ¿Porque estaba habierta de piernas para el?.

MI CUÑADO KIM SEOKJIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora