•Capitulo 4•

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El sonido de los caballos alterados resonaron en los odios de Leah
Después de la explosión, ella estaba en el suelo, totalmente empapada y sucia, su hombro le dolió al apoyarse

—Tranquila..

César la atendió al instante, y poco a poco se levantó junto a él

—No puedes quedarte quieto verdad?

Leah se paró junto a él mirando la compuerta, llevó su mano a su cabello para poder moverlo detrás de su oreja para estar más cómoda
César quería ayudarlos, ella no se iba a negar a eso y siguió a los simios que él había mandado para ayudarlos

Bajaron y vieron que el chico y su madre estaban afuera del túnel que había colapsado
Los demás estaban encerrados entre los escombros

—Porfavor ayúdenos! ..

El chico se levanto con la mujer, y Leah los auxilio rápidamente, llevándolos a la superficie, mientras que los simios hacían el trabajo pesado

Cuando salieron César buscaba a su amiga, y se alivio cuando se hizo visible ante el
Ojos azules permaneció en silencio en su caballo, con cornelius ahí, no podía hacer mucho

Leah miró a ojos azules, y asintió informando que estaba bien
El suspiro, estaba preocupado por lo sucedido

Al igual que Maurice, buscaba señales de ella, para saber si  estaba lastimada, a lo que ella le aclaro lo contrario con una sonrisa

—Muchas gracias, nos salvaron la vida...— Malcom se acercó a César, quien estaba a un lado de su caballo

No dijo nada, no necesitba decir nada

—Pero si pueden ayudarnos un poco más con los escombros, le deberíamos todo, porfavor..—Mientras el hombre suplicaba ayuda, Cornelius
salto de los brazos de su hermano mayor, y corrió a las espaldas de la mujer, con ojos azules persiguiendolo

Sus ojos curiosos se posaron en el cabello de ella, tocandolo con despreocupación e inocencia
Trepo su hombro y cayó entre ellos mirando el dedo de la mujer, quien miró a su hermano mayor buscando señal de aprobación para luego acercarse con delicadeza

Bajo juguetón de ahí y se dirigió a las botas del joven, tocando con curiosidad

—Ya terminaste?...— El morocho estaba irritado, no quería saber nada de los simios

Y para colmarle la paciencia, cornelius se había metido en uno de los maletines, tomó desprevenido a Carver
Este con total furia se levantó ignorando sus heridas y le quito el pañuelo que cubría el contenido del maletín al pequeño simio

—Ey! Deja eso!

Gritó con más intensidad

Ojos azules no dudo en correr a proteger a su hermano, comenzó a gritarles a los que estaban cerca, tratando de  ahuyentarlos

Leah por otro lado, sostuvo a cornelius, quien estaba aterrado por el suceso

—Ey te voy a matar maldito! ...—Carver saco un arma del maletín y apunto hacia ojos azules

A Leah se le congelo la sangre, tuvo un nudo en la garganta, deseaba que no haga lo que el tenía pensado hacer
Quedo paralizada, hasta que escucho pasos acelerados a su lado

César tumbo con un solo brazo a Carver, estaba muy enojado, al quitarle el arma quiso golpearlo con la misma

—César, no! No lo hagas..— Malcom intento acercarse para detener a César

Definitivamente iba a arruinarle la cara si lo golpeaba y Leah agradecio internamente que no haya disparado

—Dije..sin...armas— Él bufo y agarro el arma del otro extremo para uego tirarla unos metros de distancia

I would die for you 【Caesar X Reader】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora