Capitulo 2

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Narra Sadie Sink

—Sadie, ¿soy yo o los Vannucci nos están mirando? —Me preguntó Millie y yo mire a dirección de los mellizos.

—Amm, creo que si, Mills. —Dije y vi como Lea le dijo algo a Matteo y se puso sus audífonos. Yo por mi lado seguí escribiendo.

—Amm, ¿Sadie...? —Volvió hablar Millie.

—¿Si, Mills? —Le pregunte sin mirarla, ya que seguía escribiendo.

—Creo que Matteo viene hacia acá. —Dijo en shock.

—¿Ah? —Dije y mire como Matteo se sentaba al lado de nosotras.

—Hola, chicas. ¿Como están? —Nos preguntó Matteo.

—Hola, Matteo, estamos bien, ¿y tú? —Dijo Millie también respondiendo por mi.

—Bien. —Dijo y se quedó fijo mirando a Mills.— ¿Como se llaman? —Nos preguntó

—Yo soy Millie, y ella es mi mejor amiga, Sadie. —Respondió Mills. —¿Que te atrae por aquí, Vannucci? —Le preguntó Millie.

—Oh, solo vi con mi hermana unas bellas damas y le dije que porque no invitarlas este fin de semana a una fiesta que habrá en nuestra casa. —Dijo y a Millie le brillaron los ojos— Mis padres tienen que ir de urgencia a Italia y nos dejarán solos hasta el Martes. Entonces el viernes hay una gran fiesta y el domingo una junta, solo con amigos y amigas. Y por supuesto también están invitadas.

—¿Somos sus amigas? —Hable yo por fin.

—Obvio que si. Así que, están más que invitadas. Pónganse mas preciosas de lo que ya están. —Dijo y se levantó sin antes darnos un beso en cada mejilla a las dos. —Adiós chicas, nos vemos después. —Dijo y le guiño el ojo a Mills.

—¿Acabas de ver eso, Sadie Sink? —Me preguntó Mills aun en chock.

—Si, Mills —Le conteste mientras la miraba.

—Hay que ir. —Dijo sin pensarlo.

—¿Estás loca? es obvio que Matteo nos invitó para algo más que una simple fiesta. —Le dije seriamente.

—¿Viste bien como te miraba Lea? —Me preguntó.

—No Mills, de verdad no me interesa como me mire ella o quien sea. —Le dije y retomé lo que estaba escribiendo.

—De igual manera, tengo absolutamente todo el día de hoy y hasta mañana en la tarde para convencerte en ir conmigo. —Dijo y tocaron timbre para salir a receso.

¡¿En que puto momento paso tan rápido la hora?!

¿Ya tocaron timbre? —Pregunte ya que se me hacía raro, no sentí que hayan pasado más de 10 minutos.

—Pues si Sadie, la pasamos hablando toda la clase y ademas que vino Matteo, el profe solo escribe en todo el pizarrón y después se queda dormido. —Dijo Millie y vi como algunos compañeros le pintaban la cara al profesor.

—Dios, bueno. Al menos le sacaste foto al pizarrón? —Le pregunte.

—Está eso listo. —Me dijo y salimos del salón hacia un árbol donde hay mucha sombra como para relajarse y hablar.

Confortas Pero Dañas -Sadie Sink Where stories live. Discover now