𝐒𝐊𝐀𝐈𝐑𝐈𝐏𝐀 | ❝ Se cuentan algunas leyendas, algunos se convierten en polvo o en oro, pero me recordarás ❞
𝙇𝙖 𝙘𝙤𝙨𝙚𝙘𝙝𝙖 se realiza cada año teniendo lugar en los 12 distritos de Panem. Se elige al azar el nombre de un hombre y una mujer...
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⚔️: ceremonia de inauguración ───────────────
Unas cuantas horas después Ontari estaba vestida con lo que podría ser el vestido más sensacional o el más impresionante de la ceremonia de inauguración.
Llevaba un corsé rojo con diamantes falsos con unos pantalones de cuero negro, con unas botas de piel sintética y del mismo color. Sin embargo, lo que define su vestuario es la sangre falsa salpicada en su rostro y piel descubierta, el maquillaje de sombra negra en su rostro, logrando resaltar sus ojos azules, y su cabello tenía una pequeña trenza del lado izquierdo dejando al resto suelto.
Arnas no se quedaba atrás. Él vestía una camisa roja oscura pegada a su cuerpo, una camisa negra desgastada y pantalones de cuero iguales a los de Ontari, así mismo las botas de piel sintética. Arnas compartía el maquillaje de Ontari, pero solo las dos líneas sobre las cejas, y salpicado de sangre.
Gabriel terminó por ponerles una soga delgada en el cuello a los dos, floja, y simbolizando la esclavitud que todos los tributos compartían frente al Capitolio. Aunque todos supondrían que es por la parte del ganado que los arrean.
—La cuerda fue diseñada a estar con el nudo por debajo de su cuello, no se ajustará o aflojará durante la pasarela. Estarán bien —asegura, pero los dos Tributos del Distrito 10 no terminaban por convencerse. Solo bastaba que se atorara con el carruaje o el viento fuera tan fuerte que terminarían muertos antes de los juegos—
—Se ve muy real —murmuró Arnas—
—Creo que esa es la idea —Gabriel sonrío ante el comentario correcto de la menor—
Ontari apenas y llevaba maquillaje, solo un rímel en las pestañas y un labial neutro sin que opacara el tema principal de su rostro.
Gabriel, Alissa y Clovin estaban nerviosos por la sensación que causarían Ontari y Arnas. El momento de la ceremonia daría pauta a ser vistos, que los patrocinadores los vieran entre el resto de los Tributos capaces de obtener su apoyo; es el escalón más difícil de todos los demás.
Llevaron a la pareja que concursaría en los juegos al nivel inferior del Centro de Renovación, lo que básicamente sería un estable gigantesco. La ceremonia estaba a punto de empezar y algunas parejas de tributos ya estaban subiendo a sus respectivos carruajes. Los caballos del Distrito 10 eran de un color café, tales animales son bien entrenados que ni siquiera necesitarían un jinete que los guiara.
Gabriel y Clovin los guiaron hasta su carruaje, quienes arreglaban con cuidado la postura del cuerpo y el acomodo de la ropa.
—¿Dónde está Devon? Quiero decirle que no creo cumplir la promesa de hacer exactamente lo que dicen —le susurró Ontari a Arnas—
—Con su interés y desinterés de si logramos causar una buen primera impresión, no creo que esté por aquí. Al menos hasta que termine
