UN INVIERNO CALUROSO [+21]

CAPÍTULO 34

Sophia

La Osteogénesis imperfecta tipo 2

Dormir hasta las nueve de la mañana es algo que nunca había hecho en el pasado. Pero eso cierto eso de que cuando estás agusto con la persona indicada las costumbres se derrumban.

Estar tendida sobre la cama con medio cuerpo sobre el del hombre debajo de mí me está incitando a dejar mis hábitos detrás y caer en la tentación hecha persona que tengo frente a mis ojos.

Tiene la mano sobre mi cintura y la otra sobre sus ojos. Sus labios están hinchados, recordándome todo lo que hicimos hasta esta madrugada.

Si No fuera por mi visita de hoy lo haríamos hecho hasta la mañana pero tenía que descansar para no despertar con bolsas de aguas bajo mis ojos.

Dejo unos besos sobre su pecho antes de subir a su boca y dejar pequeños besos ahí jugando con su barbilla.

__ Me estás haciendo cosquillas.

__ Buenos días amor

__ Hola cariño.

Cuando quiero dejar un beso inocente, me agarra por la nuca y me besa metiendo su lengua.

__ Creo que tu amiguito se ha despertado.

__ Y yo creo que no ha dormido en toda la noche.

Se mueve y lo siento en mi pierna como una piedra.

__ ¿Cómo así?

__ Como pretendes que duerma contigo desnuda sobre mí.

__ No sabía que tenía ese poder sobre ti.

__ Para que sepas entonces.

Entre risas se levanta dejando su espalda en la cabecera de la cama.

__ Ya es tarde y tenemos que ir por la cita del doctor.

__ Por cierto ¿Cómo te sientes?

__ Mejor ahora que te tengo conmigo__ dejo un beso sobre su frente__ no sabía que iba a tener esta sorpresa de ti.

__ Es que ayer me liberé temprano entonces aproveché.

__ Me alegra que lo hayas hecho.

Me levanto dejando la sabana de lado caminando como Dios me tragó al mundo para el cuarto de baño.

__ Lo estás haciendo no me está gustando para nada.

Me giro ante su voz.

__ Yo no estoy haciendo nada.

Baja sus ojos a mi panza y la cara sse le ilumina de la felicidad.

__ Ve a bañarte, quiero ver ya a mi hija.

__ Uy veo que ya no me van a hacer caso en esta casa cuando nazca la pequeña.

Dejo la puerta abierta pero cierro el vidrio del baño cuando me meto debajo del agua tibia.

No duró mucho bañándome, pero lo hago poniéndome la ropa.

Algo un poco raro en mi ya que siempre tengo la ropa lista para usarla, pero con todo lo de ayer no he tenido tiempo para todo esto.

El pequeño bolso de Damson lo deja sobre mi cama cuando sale del baño oliendo delicioso con la toalla enrollado alrededor de su pequeña cintura.

Me pilla mirándolo de más y en vez de hablar, su respuesta es inclinarse hacia mí y dejar sobre mi mejilla un costo beso.

Algo que me hace sacar una sonrisa llena de felicidad y paz.

Soy la primera en bajar y todos están la cocina tomando su desayuno.