—¿Sabes que a sucedido? —interrogó
Un solloso lastimero salió de la boca del alfa, estaba magullado, adolorido, y sobre todo humillado.
—Taehyung acaba de dejarme —menciono melancólico —Y sabes por qué —cuestiono
Todo lo que se escuchaba en la habitación era el llanto del pobre alfa abusado.
—RESPONDE —grito
—F..fue mi culpa... —hablo como pudo, la imagen del imponente y apuesto alfa Alessandro Ferretti ya no existía, sus ojos habían perdido su brillo, su piel estaba maltratada llena de moretones y cortadas, su cuello portaba una marca gris y sin vida, producto de uno de los deltas de la manada. No existía nada de Alessandro, no era ni la cuarta parte de lo que se conocía de el.
—RESPUESTA CORRECTA —gritó —Creí en lo más profundo de mi corazón que ya había terminado todo, digo tu estás aquí a mi merced, tu madre y Alfonso estan muertos y tú padre esperando su triste destino. Sabes espere tantos años, para devolverle el favor a tu padre. Porque es muy cruel matar a la luna de alguien y aún así dejarlo agonizar.
Alessandro, tenía si vista perdida. Estaba tan dañado tanto física, como emocionalmente y todo por sus estupideces. Desde muy joven había cometido estupidez, tras estupidez y siempre su hermanito menor se veía implicado, fue un golpe muy bajo escuchar que el ya no estaba y no lo estaría nunca más.
Por si avaricia y completa estupidez había perdido a su familia, no eran una familia muy unida, pero siempre estaban los unos a los otros. —¿Q-ue sucedió con el? —pregunto
—Recuerda muy bien Alessandro, que sangre se paga con sangre y por tus idioteces el tenía que pagar —menciono frío —Si te consuela, no sufrió. Su muerte fue rápida y sin dolor. —Jeon estaba disfrutando la mirada de dolor de Alessandro, las carcajadas salían de su garganta sin ninguna dificultad, quería que sufriera y cargará con ese dolor.
—Eres un maldito asqueroso —grito el alfa menor
—Tu solito buscaste tu destino, preferiste perderlo todo por un capricho estúpido —el mayor deseaba a moler a golpes al alfa más chico, pero quería que sufriera así como el estaba sufriendo.
—Ese omega también es un capricho para ti —aclaro
—Shhh —siseo Jeon —El y yo estábamos destinados a estar juntos y discúlpame, pero yo nunca lo obligue a nada. —comento el mayor, dejando caer un golpe en la cara del menor.
Los golpes estaban dirigidos a distintas partes del cuerpo del alfa, dejando a este magullado de la cara y con más de un hueso roto. La sangre brotaba por su nariz y varios dientes fueron desprendidos por la fuerza de los golpes de Jeon.
—ME QUITASTE A LO QUE MAS AMABA —grito Jeon, sin pensarlo dos veces el mayor desató al mejor dejándolo libre, pero no significaba que eso iba a salvarlo.
Cegado de la ira tomo uno de los cuchillos de su arsenal, camino directamente hacia el cuerpo tembloroso de Alessandro, lanzando cuchilladas contra el cuerpo del mismo. Treinta y dos puñadalas bastaron, para que el alfa diera su último aliento.
Jeon solo pudo tirarse al suelo y llorar, llorar porque Taehyung había tomado esa decisión, llorar por la perdida de su cachorro, llorar por absolutamente todo lo que no había llorado en su tiempo.
Su cabeza era un caos y su mundo se estaba viniendo abajo, no sabía que haría sin la presencia de su niño, sin escuchar su risa, sin verlo o tocarlo y sin poder escuchar esos chistes malos o sus datos curiosos que siempre resultaban completamente falsos. Los últimos meses, su vida giro entorno a su bello angel, lo que hacía lo hacía por el y todo estaba bien porque el estaba ahí, pero ya no tenía nada.
Estaba solo y eso le dolía, tal vez y la decisión era definitiva o tal vez tenía chance de estar con el, pero tenía que darle tiempo, tiempo para que regrese a el, tiempo para que vuelva a amarlo.
Tres mes después.....
Pov Taehyung
Había pasado exactamente tres meses desde que vi a Jungkook por ultima vez, mi lobo y yo extrañabamos su presencia, ni el, ni yo habíamos parado de llorar por su ausencia. Desde ese día, mi cuerpo había cambiado, mi piel estaba pálida, había adelgazado a un punto crítico, la ausencia de mi celo era evidente.
Según Jin era completamente normal, mi cuerpo se estaba adaptando a la perdida de un bebé y eran las secuelas normales de un omega tan fértil como yo. Necesitaba a mi alfa, pero según Cristof nunca estaba en casa, se la pasaba en las oficinas principales, pasaba de un humor que nadie soportaba.
A propias palabras de Cris había vuelto a ser el de antes y que en todo ese tiempo no había tocado a ningún omega y mucho menos beta, eso me tranquilizaba, pero sabía perfectamente que no era de mi incumbencia el y yo, ya no éramos nada.
—Cris —llame —Se que te he pedido mucho últimamente, pero quería saber si puedes hacerme un favor. —pregunte
—Claro señorito Kim —afirmo —En que puedo servirle.
—Mmm bueno, no quiero sonar paranoico, pero.. —calle —Ultimamente siento como que alguien estuviera entrando a mi habitación, nunca lo he visto y mucho menos he sentido su aroma, pero si siento una presencia en mitad de la noche. Y quería que.... Mmm pusieras a alguien cuidando mi puerta o tú no importa si no eres tu... yo... Ya sabes... —tartamudee como un estúpido, sigo sin entender porque me pongo nervioso al pedirle algo a Cristof, el había sido mi compañero en estos últimos tres meses, ya no era solamente mi guardia era mi amigo y fiel compañero.
—Tae —calmó —Hoy mismo tendrás a un guardia resguardando tu puerta y a un séquito completo cuidando todo esta ala de la casa.
Le regale la sonrisa más melancólica que tenía a Cris, yo sabía que se trataba de el irrumpiendo en mi habitación en medio de la noche o al menos eso quería creer. Aún tenía mis dudas, nunca había sentido su aroma, pero ciertamente mi lobo se sentía con cierta familiaridad con dicha presencia.
Los primeros días, el dolor emocional era insoportable mi vida giraba entorno a Jungkook, a su presencia, su aroma, sus regalos exóticos, su cuerpo y su excelente sexo. Todo el mundo que conocía cambio en cuestión de meses por su culpa y ahora había vuelto a cambiar, ya no despertaba con el todas las mañanas, ya no lo oía cantar alguna canción sobre mí y lo bonito que era o simplemente ya no sentía la calidez de su cuerpo.
Lo amaba y extrañaba tanto, tal vez tome una decisión precipitada en el hospital, pero no podía hacer que el amor de mí vida cargará con alguien tan dañado como yo, nunca más podría darle un heredero, mi cuerpo quedó lastimado, simplemente yo ya no era alguien bonito y digno para Jeon Jungkook.
Las lágrimas rodaron por mis mejillas, había prometido no llorar más, pero esos tres meses me estaban doliendo como el mismísimo infierno. Solo me queda pedirle a la madre luna, que me permita estar una vez más con el, solo quiero verlo y sentir su aroma para poder seguir con mi vida.
—Por favor Jungkook —chillo —Permiteme enamorarte una vez más — el menor seco sus lágrimas en el momento que escucho pasos al otro lado de la puerta, su mente había sobrepensado todos los escenarios posibles, pero antes de darse cuenta el silencio reino en toda la habitación.
Nota de la autora
Holii, lo prometido es deuda aquí tienen otro capítulo.
Besos en la cola💋

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365 Days
Fiksi PenggemarUn joven y hermoso omega cae manos del jefe de la mafia italiana, quien lo secuestra y le da un año para que se enamore de el. Adaptación🫶🏻