☂️ ─── ❛ 𝐔𝐌𝐁𝐑𝐄𝐋𝐋𝐀 :: ❪ ryu sunjae. ❫
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─── "Eres un regalo del cielo, prometo protegerte para que nunca jamás tengas que sentirte solo, porque eres una persona preciosa para mí." . . .
╭────Ꮺ. 𝐄n donde Hyejin deberá hacer todo lo qu...
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Junio, 2008.
── ¡Sunjae, visitas! ──Avisó el padre de Sunjae desde el living, para después darse la vuelta para verme.── Puedes subir a su cuarto, puerta a la derecha.
En un acto impulsivo, había dejado solo a Taesung con una excusa bastante tonta para poder venir a la casa de Sunjae y arreglar las cosas con él. Quería verificar que la Hyejin de 19 no había hecho nada estúpido en esos días en los que no estuve, también estaba dispuesta a investigar si él había asistido a la audición.
── Nuevamente, muchas gracias Señor Ryu. ──Me incliné levemente de manera formal a modo de reverencia, para luego regalarle una sonrisa. Él imitó mi acción, caminando hacia la cocina.
Me armé de valor y tras soltar un suspiro, comencé a subir las escaleras, admirando el interior de la casa de Sunjae. Era más acogedora de lo que pensaba.
Me paré frente a la puerta que me había indicado su padre y la golpeé sutilmente, esperando una respuesta. Luego de unos segundos, Sunjae abrió la puerta, encontrándose con mis ojos arrepentidos.
Ambos nos quedamos en silencio, mirándonos sin emitir ni un sonido, como si el mundo se hubiera paralizado. Cualquier persona creería que ahora sería el momento donde me invitaría a pasar, pero para mi sorpresa, Sunjae cerró la puerta nuevamente frente a mi cara.
Suspiré pesadamente esperando alguna otra señal de que podía llegar a pasar, pero esa señal jamás llegó. En un acto atrevido, tomé el picaporte con los nervios hasta la cabeza y me adentré en la habitación, cerrando la puerta detrás mío.
Sunjae se encontraba sentado en la silla giratoria de su escritorio, mirándome seriamente. Me sentía mal, sabía que él no estaba esperándome a mí y había invadido su espacio personal.
── Siéntate ahí. ──Señaló su cama, yo asentí y obedecí.── No te atrevas a acercarte.
── Sí, claro. ──Respondí firmemente. Observé mis alrededores, notando que Sunjae había tomado uno de los libros que le había dejado a su padre para él, sonreí ante eso.── ¿Has empezado a leerlo?
