Seven - Jung Kook (feat.aespa)

♡︎ Sunday

Jadeaba cansada, pero no podía rendirse, tenía que llegar.

¿Cómo había acabado en esa situación? Ni ella lo sabía, simplemente sentía la necesidad de correr antes de que fuera demasiado tarde.

Chocaba contra las personas, nerviosa, gritando “¡perdón!” recibiendo malas miradas de la gente que recibía los choques. Pero no le importaba, lo único relevante en ese momento era llegar y buscarla.

Cada vez estaba más cerca, aunque sus piernas pedían un descanso, ella no paró, hasta que llegó a su destino.

Parada entre la multitud, buscó con la mirada a aquella persona, pero no la encontraba.

Empezó a agobiarse, ¿qué haría? Se sentía mareada, pero hizo un último esfuerzo y siguió recorriendo el lugar, pero como siempre, chocó contra alguien.

– ¡Perdone! ¿Está bien, señor? – El hombre asintió levemente mientras se levantaba con ayuda de la chica.

– No se preocupe, señorita, estoy bien. – Respondió tranquilo. – Pero usted no lo parece, está muy pálida, ¿quiere un poco de agua?

– ¿Eh? ¡No, gracias! Solo necesito saber donde puedo ver la tabla en la que aparecen los vuelos.

– ¡Oh! Se encuentra girando esta esquina. – Dijo, señalando la mencionada. – Después, solo suba las escaleras mecánicas y verá la pantalla donde se proyecta esa tabla.

– ¡Muchísimas gracias! ¡Buen día! – Agradeció, mientras corría hacia la dirección que el buen hombre le había indicado.

“Los jóvenes de hoy en día…” Pensó, con una sonrisa en su rostro.

Siguió el camino que el señor le explicó y miró con rapidez la gran pantalla. Encontró la información que necesitaba.

Volvió a correr, esta vez en otra dirección. Llegó, buscó y pudo reconocer a alguien, la persona que estaba buscando todo este tiempo.

ʚ♡ɞ

30 minutos antes

– Y entonces me dijo “De todos modos tampoco eras tan guapa”, ¿cómo se atreve? ¡Todos los tíos son iguales! – Narraba Giselle irritada. – ¿No crees, Ning?

Esta simplemente asintió desinteresada, prestando más atención a su celular.

– No te preocupes, hay muchos más peces en el mar. – Dijo Winter, en un intento de consolar a su amiga.

Estaban las tres juntas desayunando en una cafetería. Habían acordado ayudar a Winter a hacer un plan para confesarse después de comer.

– Tú lo tienes fácil, no te gustan los hombres… – Winter nunca había sentido atracción por el sexo opuesto, así que no comprendía las complicaciones de Aeri.

– Chicas, tengo malas noticias. – Habló Ningning, interrumpiendo la conversación. – Es un mensaje de Karina. – Winter sintió un escalofrío al escuchar su nombre junto con las palabras “malas noticias”.

– ¿Qué dice? – Preguntó Giselle curiosa.

– “Ningning, mi familia y yo nos mudamos a Japón. Siento no habéroslo dicho antes, mis padres me explicaron ayer y estuve muy ocupada como para contaros. Te lo digo a tí, que sé que reaccionarás con más calma. Ahora mismo estoy llegando al aeropuerto para irme. Me hubiera gustado despedirme de otra manera, pero ya conoces a mis padres. Dile a Giselle y a Winter que os echaré de menos a las tres, pero al menos podemos hablar por mensaje.” – Leyó, haciendo una pequeña pausa. – “Os quiero mucho, y por favor, no dejes que las otras dos hagan alguna locura.”