El Princeso mimado [MiTake]

Oda

Halleluajah
-Rufus Wainwringht.

La melodiosa sonata acompaña dulcemente a todos los invitados, como un arrullo nocturno; el vino al compás de las luces. Se vislumbra en la oscuridad de la noche una creciente amenaza entre las sombras, se obvia la tétrica aura ya que es encandilada por la fabulosa comida con el ambiente idóneo.

Con una tranquilidad y firmeza propios de la realeza, con pasos acrecentados se acerca el invitado de honor.

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-En la noche de hoy, nos encontramos en la casa de la familia Matsuno, él cual se rumorea que se compromete en la fiesta de hoy, con nada más y nada menos que él, ¡príncipe! Manjiro IV Sano. Por el momento no tenemos declaraciones oficiales pero, que opinan los invitados- camina la reportera. -Hola Chef, ¿cómo se encuentra el día de hoy?, ¿acaso no le parece encantadora la velada?, ¿sabe algo sobre el posible compromiso?.

Antes de que el joven alfa pudiera comprender la información la reportera corriendo entre una melena fuego se aleja para obtener un poco del príncipe.

-Allí tenemos a nuestra estrella, acerquémonos para grabar el primer contacto de la joven y encantadora pareja de Nueva Orleans.

Para desafortunado de primogénito Matsuno, no se percató de la presencia de su futuro omega. La joven alteza con grandes zancadas toma por la cintura al alfa, para plantar un beso y susurrar en su oído. -Hola cariño, he llegado.- Las personas a su alrededor enloquecen, pero para Chifuyu su peor pesadilla realizada comienza, él alfa trata de separarse; eso desencadenó una especie de señal para los músicos, ya que comenzaron a tocar una sonata romántica, Fuyo como una sombra siente a su padre que lo anima a continuar.

El alfa toma al omega del brazo para guiarlo en un baile en lo estricto de la palabra, evitando engrandecer el problema y con todo el impulso de alejarse del chico, su presencia, el contacto con el príncipe le quemaba en mal sentido de la palabra.

Siendo honesto en lo que hace girar al chico entre sus brazos, siempre pensó ingenuamente que se casaría por amor, aunque su padre lo colocó sobre el pavimento con las siguientes palabras que arden como dinamita sobre su interior. -Chifuyu, la gente tonta y pobre se casa por amor, el amor con el tiempo surge, si eso no te convence busca que lo haga, ya que no permitiré que mi único hijo sea un desperdicio de la sociedad-. El primogénito de la casa le da una reverencia y se aleja con la promesa de llevarle de comer lo más delicioso del mundo.

Corre entre las personas que lo felicitan, para buscar consuelo en su mejor amigo.

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-Takemichi, ayuda, no se que hacer, siento que en cualquier momento vomitaré, odio la sensación de mentir.- Volteo a ver a mi hermano no sanguíneo y siento ganas de llorar con él. -¿Qué te pasó compañero?- Vislumbro como inhala con el labio tembloroso evitando soltar hipidos con sus lágrimas. -Digamos que Koko tiene una mejor oferta, fue tonto de mi parte pensar que por primera vez algo seria increíble en mi vida.- Antes de que se desmorone le doy un gran abrazo llevándolo a mi habitación.

.-Se que esto no lo soluciona todo Take, no obstante tendrás ropa y continúa con la comida, estoy seguro que alguno de los invitados estirados te contrataran, con ello tendrás dinero, veras que todo se solucionara.

En lo que Takemichi se cambia Chifuyu se acerca a la ventana, observa el cielo, la estrella que antes le generaba paz, mira hacia él alfa, con ese brillo burlón de libertad. Él muchacho cierra los ojos, mientras una lágrima se desliza sobre su mejilla y le susurra, -puedes, por favor, salvarme por hoy-. Él alfa de cabello oscuro lo mira con lástima y se acerca. -Estoy para ti compañero-. Se abrazan hasta que alguien del servicio los interrumpe.

-Joven Matsuno, su padre lo requiere, para que se despida de su pareja, ya que él príncipe se retira para descansar a sus aposentos. El alfa de la casa sonríe, agradece mentalmente y contesta. -Ya voy un momento.

-Te ves encantador Take, me retiro, tengo que despedir a ese muchacho, nos vemos abajo-. Sale por la puerta mil veces más feliz de como entró a sus aposentos.

En la soledad de la magnífica extensión de su rubio amigo, Takemichi suspira y desea poder al menos cumplir su sueño de tener ese restaurante, medita de su vida hasta que algo lo saca de concentración un particular sonido de rana.

-Y dime tú cumplirás mis sueños-. Él alfa se ríe ante su mera ocurrencia. -Solo si tu me ayudas con esto-. La rana señala su cuerpo. De manera inesperada el chico de pelo castaño se desmaya.

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-Vaya que extraño sueño, hablar con una rana.

-Buenas noches príncipe, soy él encantador príncipe de Mónaco y cumpliré cualquier sueño a cambio de un favor.

-Suponiendo que esto es real y usted es él príncipe, ¿con quien estuvo bailando mi mejor amigo?

-Digamos que un hechicero malvado me convirtió en esto, en lo que usted estaba dormido inspeccione la recamara, espero que no le importe, pero encontré la solución para mi problema, observe el libro-. Le señala la parte donde el sapo se convierte de sapo a príncipe, tras un beso. -¿Solo un beso y usted me concederá lo que desee?- Pregunta inseguro el alfa. -Por supuesto, al menos que desee más besos, yo no me opondré.

Takemichi se pone a pensar en sus opciones, reconsidera si vale la pena su sueño. -Déjeme pensarlo por un momento.

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Holo, una disculpa por la demora.

¿Ustedes aceptarían besar una rana príncipe para cumplir sus sueños?

¿Creen que Chifuyu se revele contra su padre y encuentre el amor?

¿Qué opinan de lo que llevamos de historia?