𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 2: 𝑨𝒓𝒎𝒂𝒔

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Habían perdido estrepitosamente el primer partido, ya que no fueron capaces de convertir ese cero en un uno. Barou había sido tan generoso que incluso le dio a Isagi su opinión sobre él, su forma de jugar y su forma de ser delantero. Por supuesto, Isagi se lo había tomado muy personal. Eso tenía sentido, ya que podía ver de dónde venía Barou, pero eso no significaba que no le doliera un poco.

"No escuches demasiado a ese Pine Guy" Bachira trató de tranquilizarlo mientras se duchaba: "Todavía fuiste seleccionado para Blue Lock, así que eso significa que no eres tan malo como Barou quiere que creas".

"Soy el penúltimo de 275 personas," replicó Isagi, esperando estar hablando lo suficientemente bajo, "esa no es realmente una buena posición."

"Mi punto sigue en pie" Bachira apareció de repente en la ducha, "no deberías menospreciarte demasiado".

Isagi estaba demasiado sorprendido por su apariencia para responder, reprimió un grito y se arrojó lo antes posible, su rostro ardía de vergüenza, incluso si estaba seguro de que Bachira ya lo había visto desnudo.

No quería pensar en eso.

—Joder, Isagi, vístete —le gritó Raichi—.

—Ah, joder, lo siento... —se tambaleó hasta su lugar en el banco y se cubrió rápidamente—.

Los escuchó quejarse del partido y de él, y él, en cambio, fue capaz de explicarles lo que significaba convertir un cero en un uno.

Ego confirmó y continuó durante tres minutos sobre las estrategias de fútbol y el hecho de que Japón era bueno en el béisbol y las armas que todos los delanteros tenían, algo que los hacía capaces de brillar entre los demás jugadores.

Todos ellos se quedaron con mucho en qué pensar.

*

"Y tú, Isagi, ¿cuál es tu arma?"

Se habían estado contando mutuamente su arma para poder pensar en una estrategia que los hubiera hecho útiles y que los hubiera hecho ganar el próximo partido. No podían permitirse el lujo de perder, y el Equipo Y tampoco podía, así que iba a ser una batalla dura.

—¿Eh? Isagi trató de pensarlo y no se le ocurrió nada. "Honestamente, no lo sé".

—¿Tal vez tu habilidad con los lanzamientos?

"Sí, pero eso no es útil para un delantero".

"Bueno, si no lo sabes, eso solo significa que eres un inútil", comentó Raichi.

"¿Puedo abofetear a ese tipo?"

Isagi hizo una mueca, escupió un No y rápidamente se dio cuenta de que todos lo estaban mirando.

"¿No qué? ¡¿Tienes algo que decir?!" Raichi debería aprender a ser un poco más tranquilo.

"No te preocupes, Isagi," sonrió Kuon, "cuando pienses en algo, solo házmelo saber, ahora, a la última..."

Después de que Kuon inventara con éxito una estrategia (con un nombre que hizo reír a Bachira), entrenaron durante un tiempo para poder usarla durante el próximo partido.

Isagi era consciente de que apenas eran un equipo, lo único que les impedía luchar entre sí era el conocimiento de que si perdían, básicamente habrían sido eliminados.

Esperaba que esa fuera una razón suficientemente fuerte.

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tú con los rizos oscurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora