EN EL FILO. ( Seungho & Jaekyung )

capítulo especial

Especial: 2/2.
"Cómo nos conocimos"

Ya habían pasado dos semanas desde aquel pequeño "incidente" dónde Jaekyung había derribado a Seungho de un puñetazo. El afectado no hizo alboroto, al contrario, le pidió al entrenador que se calmara pues éste tenía intenciones de golpear a Jaekyung, cosas que al final no pasó.
Las reuniones acerca de la publicidad ya habían terminado, llegaron a un acuerdo justo y consideraron probabilidades. Estarían de nuevo en la cúspide de la fama, no tenían nada porqué preocuparse.

¿O sí?

Era un día normal en el gimnasio, con atletas por aquí y por allá entrenando. De hecho, era un magnífico día pues incluso los rumores de su alianza con aquella prestigiosa familia, habían atraído gente. Varios atletas de otros gimnasios estaban "de visita", observando el lugar y probándolo. Quizás con suerte lo escogerían para entrenar a menudo.

El pelinegro estaba orgulloso de ese logró, tanto que decidió caminar al ring para practicar un poco, pero una conversación logró acaparar su atención.

— ¿Sabes? Escuché que el contrato que tiene el Team Black con esas famosas empresas de la familia Yoon, se debe a qué le proporcionan chicos cómo prostitutas. De los más famosos que conozco, es ese actor rubio, el fisioterapeuta y el joven, ah...

Joo abrió los ojos, asustado y preocupado, cómo también enfurecido. No tuvo la intención de escuchar aquellas palabras de la conversación de uno de los atletas visitantes con otro, pero no pudo evitarlo. Y ahora agradecía hacerlo, pues necesitaba desmentirlo a toda costa. No dejaría que se metieran con gente de su gimnasio, le daba una pésima imagen.

Estaba totalmente decidido a golpear hasta el cansancio a ese hombre, pero quedó perplejo cuándo escuchó sus últimas palabras.

"Y todo ésto, lo he oído del mismísimo Yoon Seungho".

...

Yoon Seungho tenía una gran sonrisa plasmada en el rostro, y no era para menos: estaba recibiendo halagos de todos los miembros de la empresa y sobretodo de su padre por su gran desempeño como presidente recién ascendido. Era increíble, en menos de un año de ser nombrado la cabeza de la empresa y suceder a su padre, Seungho había logrado atrapar una asociación casi millonaria. La alianza con el Team Black fue magníficamente favorable, que aunque aún no se realizaba, provocaba interés en la prensa y en el público.

— Mi pequeño Seungho, mírate, todo un hombre de negocios. — Su madre limpiaba pequeñas lágrimas con un pañuelo mientras el giraba los ojos pero sin negarle el abrazo, dedicándole una pequeña sonrisa a su hermano, cosa que éste último le devolvió con una pequeña mueca por la reacción de su madre ante su primer triunfo laboral en el cargo supremo. Estaba llorando desconsolada hacía unos minutos y la amaba, sí, pero a veces era un tanto... Dramática.

Solo había logrado capturar un pez gordo en el Team Black. ¿O el era el pez gordo capturado?

Estuvo asistiendo a todas las citas de negociación respecto al trato puntualmente, incluso con unos minutos de anticipación, todo para verlo a él.
Su vista siempre se desviaba hasta ese pelinegro, por más que estuviera concentrado en las sugerencias que Namwook le hacía.

Era hermoso, arrogante y un cretino, pero ese era justo su encanto, lo que le volvía loco y le causaba curiosidad. ¿Quién era Joo Jaekyung? Quería conocerlo, olerlo, sentirlo...

Se mantuvo paciente durante todas las reuniones, esperando cualquier acercamiento por parte de Joo, al menos por curiosidad acerca de la campaña y los negocios que se realizaban con su gimnasio. Pero nunca hubo interés, así que se rindió parcialmente.