6. Conviviendo

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Prometeo se movía de manera normal por la carretera. En el mando estaba Varian, leyendo el diario de su madre. En la caravana se encontraban Yong y Hugo, cada uno en rincones distintos alejados uno del otro.

Yong aún no le tenía demasiada confianza a Hugo y Hugo no le interesaba socializar con nadie amenos que sea para algo importante.

Yong estaba con sus cohetes en su esquina y Hugo estaba echado en su cama, con los brazos bajo su cabeza.

Habían pasado 5 días desde que dejaron Bayangor y durante ese lapso de tiempo ninguno de el dúo radical interactuaban demasiado con Hugo y viceversa.

El sol estaba bien alto en el cielo, luciendo su resplandor por todo el camino.

A Varian se le hizo algo extraño, ya que se supone que el invierno ya debería de haber llegado, hasta que se acordó que las estaciones no son solo una misma en todo el mundo. En un reino puede hacer frio y en otro calor, depende de su estación.

Este pensamiento le dio un pequeño escalofrío a Varian, ¿Su padre estaría bien? Ya que si sus cálculos eran correctos el invierno en Corona ya había comenzado hace semanas atrás, y este iba a golpear algo fuerte al reino los primeros días, es por eso que antes de irse de su hogar dejo los calderos de agua caliente en su mejor versión y con un mantenimiento estable el cual el rey Frederick o su mismo padre pueden brindarle.

Descubrir que el padre de Rapunzel estudio algo de ingeniería cuando su hija estaba perdida le sorprendió un poco, pero al menos el rey podría darle mantenimiento a las calderas bajo el castillo para que pueda darse una buena ducha caliente.

Que el día este tan brillante le alentó un poco. Tal vez en Corona el invierno ya bajo, ya que en esta época no es de ser de mucho frio la verdad, es más parecido al otoño más que nada.

El frío más extremo que experimento el reino fue la tormenta de nieve de hace 4 años...

Ok. Dejemos de pensar en eso Varian, centrate en el diario.

Comenzó a hojearlo más rápido, para distraer su mente de todo lo que acababa de pensar.

Galcrest estaba a 2 semanas de distancia, y ya casi habían recorrido una. Era bastante incomodo no hablar con Hugo en lo que llevaban de viaje.

No es que no le tenga confianza, pero no le tiene confianza para nada.

Osea, le salvo la vida, por supuesto, pero primeramente los espió y estudió y luego los dejo a su suerte en la prueba de fuego.

Aunque más quisiera ignorarlo todo el viaje, era imposible, si iban a hacer esto juntos debían llevarse bien.

El rubio había estado tener un poco de socialización en el grupo, pero pocas veces le hacían caso y el único que lo hacia era Yong.

Yong no estuvo muy de acuerdo en dejar que Hugo se les una, ya que no confiaba en él,pero en quien si confiaba era en Varian, así que acepto su decisión sin queja alguna(al menos no en la cara de Varian).

Siguió su camino normalmente hasta que sintió que alguien se sentaba a su lado, tambaleando la caravana a un lado por un pequeño momento por el repentino movimiento.

---Hola gafas ¿Cómo va todo por ahí?---preguntó señalando el cuaderno.

Varian se molesto por la interrupción en su concentración y el apodo que Hugo le dió.

---Primero, tengo un nombre, ¿sabes? Es Varian si no te recuerdas.

---Lo recuerdo muy bien mechas, simplemente me gusta jugar contigo.---Varian rodó los ojos.

Varian Y Los Siete Reinos(portada Temporal)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora