Son 3 amigas. Las 3 con vidas muy parecidas y a la vez totalmente distintas. La vida de fiesta, sexo, drogas, lujos, excesos y amores varios; las unen en este relato lleno de anécdotas donde por sobre todo las pega el amor que se tienen la una hacia...
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Ya han pasado 3 horas desde que Mariana motivo literalmente a todos los que estábamos dentro del recinto. Incluso gente que no era invitada y estaban al otro lado del bar, ahora se encontraban en la fiesta sumamente "privada y exclusiva" de mi amiga.
Por mi parte ya estoy muy entonada, el alcohol llego rápido a mi sistema porque siempre llego sin nada en mi estomago. Como siempre ando vestida dejando poco a la imaginación, por lo mismo consumo una comida al día porque sino me siento inflamada y gorda. Lo sé lo sé, es una relación sumamente tóxica con los alimentos, pero bueno, es la única manera que sé relacionarme con las cosas que amo y por eso adoro tanto a estas dos weonas.
Porque son mis dos vínculos afectivos que son sanos, sin presiones, ni expectativas, sin miedo de que ellas me dejen de amar por ser yo o que cambien su manera de tratarme de un día para otro. ¿Pareciera que estoy hablando de un hombre, no? Pero es que es esa la realidad. Amar a una persona es como estar en una relación amorosa con ella; donde tienes que cumplir un reglamento para que todo marche bien y yo de eso no sé nada.
Mis relaciones afectivas han sido todas fallidas, abusivas, tóxicas y admito que tengo una falta de amor propio que me hace depender de ellos, hasta que los canso y se vuelve un espiral dañino para ambos.
Por esa misma razón solo he tenido tres pololos. Todo el resto han sido amores fugaces de 1 mes o de 2 semanas, más que eso NO. No porque ellos no me sigan buscando, porque sí lo hacen. Obvio. Quedan locos por mí. ¿Y cómo no? la Vea no enamorada es una mujer divertida, adicta al sexo, resuelta y sin miedo a nada. Porque sí, esa soy yo en realidad; pero algo sucede en mi cerebro que hace un corte circuito cuando amo realmente a un hombre. Me convierto en un ser que desconozco; temeroza, llorona, ansiosa, preocupada por cualquier cosa que me haga menos atractiva, pendiente de cumplir sus estándares, realizar todas sus ordenes al pie de la letra y estar ahí para él cuando quiera.
Y obvio ¿hay algo que le guste menos a los hombres que una mujer disponible 24/7?
Porque sí, así somos los seres humanos. Nos gusta lo que no tenemos, lo difícil, que con lleve un reto y así cuando se logra, sentirnos validados en nuestro ego.
Así que bueno, apenas siento un pequeño destello de amor hacia un ser que posea un pene, me voy. Me alejo rápidamente, antes que el amor aflore y así ha sido mi vida amorosa. Una montaña rusa de emociones buenas y malas, casi todas nefastas pero hay algo en que no me puedo quejar; el magnífico sexo con todos esos individuos que ya ni recuerdo sus nombres.
Tener citas, salir a comer, llegar a que te consientan con rico sexo, orgasmos, masajes y regalos. Luego llegar a tu casa tranquilamente, sin ningún compromiso con esa persona. No tener que llamarlo al día siguiente, ni saber como estuvo su día y menos saber sus sentimientos y pesares. Uuuff lo recomiendo totalmente.
Si fue un buen polvo, se porto bien, tiene un rico cuerpo, un bonito pene, te trato como una princesa, te sentiste una diosa, te hizo llegar más de una vez, te dio un buen regalo como un pasaje de avión, un perfume caro o una cartera de marca importante... bueno, lo vuelves a ver. No dejes ir a ese hombre. Son sumamente difíciles de encontrar. Hombres que te solventen monetariamente. Pero más que eso: NO. Solo los vuelves a ver cuando tu andes caliente, necesites dinero o ellos te seduzcan con algún presente que no puedes dejar pasar.
