8. Donde las palabras sobran

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Oficialmente eran pareja y disfrutaban tanto de la compañía del otro que acordaron verse los fines de semana, ya que ambos estudiaban en la universidad con horarios contrarios, Louis por la mañana y Harry por la tarde.

- Hazza, ¿Mañana a qué hora nos veremos?- retomaron sus videollamadas nocturnas

- Paso por ti como a las 3, ¿Te parece bien?- ambos habían planeado ir a casa de Harry para ver películas

- Si, me parece bien, no puedo esperar a verte, te extraño mucho amor- y no exageraba, el tiempo sin ver a Harry le dejaba un gran vacío en el corazón

- Yo también te extraño mucho precioso, pero mañana nos veremos y te prometo que va a valer la pena el tiempo de espera.

Después de unos minutos, se despidieron entre palabras cariñosas y románticas. Era hora de dormir y esperar el ansiado día.

Louis estaba emocionado; había pasado un mes desde que comenzaron su relación y quería hacerlo especial. Le escribió una hermosa carta en forma de corazón, hecha con hojas verdes y azules, acompañada de un girasol. Siempre fue atento y detallista, especialmente con quienes consideraba parte de él. Hasta ahora, esa faceta la conocían solo su familia y su mejor amigo Zayn, pero ahora tenía a alguien más. Alguien que alegraba cada uno de sus días con su sola existencia, alguien que hacía latir su corazón tan fuerte que parecía querer salirse del pecho, alguien con quien podía ser él mismo sin temor a los prejuicios.

Al día siguiente, Louis se despertó temprano para realizar algunas actividades domésticas y escolares antes de encontrarse con Harry. Sus padres conocían su relación y se alegraban de verlo tan feliz con su nuevo novio, aunque también le imponían ciertas restricciones por precaución, para evitar que repitiera lo que vivió en su relación pasada.

- Deberías salir con Harry más seguido- bromeó su hermana Phoebe

- ¿Por qué lo dices, pequeña engreída?- le respondió Louis mientras apresuraba la limpieza del baño

- Porque solo cuando sales con él te levantas temprano- Louis sabía que era cierto; antes de conocer a Harry, solía levantarse tarde cuando no tenía clases.

- Déjame en paz y ve a molestar a alguien más

Su hermana salió corriendo cuando Louis le lanzó agua, indicando que quería concentrarse y terminar rápidamente sus deberes. Louis siempre buscaba tener control, estableciendo tiempos para cada actividad; a menudo se frustraba si las cosas no salían como esperaba, aunque solía felicitarse por completarlas en su tiempo estimado.

Después de un rato, ya había terminado sus deberes en casa y adelantado sus tareas, estaba bañado y bien vestido para encontrarse con su amado. Sin embargo, Harry seguía lidiando con su problema de impuntualidad, algo a lo que Louis ya estaba un poco acostumbrado, aunque había días en los que le molestaba mucho. Habían discutido el tema varias veces, pero parecía que Harry no cambiaba.

- Louis, cariño, Harry ha llegado por ti-, gritó Johannah desde la sala, donde leía una revista.

Louis recogió sus cosas y se despidió de su madre, prometiéndole que estaría de vuelta para la cena. Ella le sonrió y le deseó que se divirtiera y pasara un buen rato.

-Hola precioso- saludó Harry, dando un beso en los labios a Louis.

- Hola corazón, ¿por qué llegaste tarde? ¿Todo bien?-, preguntó Louis después del beso.

- Todo bien, solo que me levanté muy tarde y luego me llevó mucho tiempo limpiar la casa. Disculpa- respondió Harry.

Louis simplemente dejaba pasar el retraso de Harry, lo importante era que había llegado. A veces recordaba cómo su pareja anterior solía cancelar planes a último momento, lo cual lo afectaba tanto emocional como mentalmente. Por eso, intentaba no molestarse cuando Harry llegaba tarde, eso era preferible a recibir una cancelación.

Al llegar a casa de Harry, Louis se sentía nervioso con su pequeño regalo. El girasol cabía perfectamente en su mochila.

- ¿Estás bien, Lou?, Te veo un poco nervioso-, dijo Harry al notar que Louis no podía dejar de mover el pie.

-Sí, solo que... bueno...- Las mejillas de Louis se sonrojaron. -Te traje algo, por nuestro primer mes juntos

- ¿En serio?, yo también tengo algo para ti, dame un segundo- Louis quedó sorprendido, ya que Harry era lo contrario a él, no era una persona detallista y decía que el romance no era lo suyo, simplemente se enfocaba en ser él mismo y ya.

Harry volvió con una pequeña caja en las manos, sonriendo a Louis.

-Ok, tú primero-, dijo Harry.

-Es algo pequeño, pero lo hice con todo mi amor. Espero que te guste-, Louis sacó el pequeño pero hermoso girasol de su mochila junto con la carta que había escrito.

La mirada que Harry le dio dejó claro que apreciaba el gesto.

-A veces no soy muy bueno con las palabras en persona, pero sí escribiendo. Podría dedicarte las mejores líneas llenas de amor, solo para que me permitas quedarme en tu vida y resguardarme en tu corazón.

Harry lucía sonrojado y parecía sin palabras, nunca antes le habían regalado algo así. No estaba acostumbrado a ello, pero con Louis sentía que lo necesitaba.

-No tengo palabras, Lou. Es el detalle más bonito que alguien me haya dado. Jamás me habían regalado una carta tan bonita y mucho menos un girasol. Eres increíble. Te quiero tanto- Harry abrazó a Louis con fuerza.

-Te mereces solo cosas bonitas, y voy a esforzarme por dártelas todas. Te quiero-, dijo Louis, dándole un tierno beso.

- Ahora me toca a mí. Ábrelo, sé que te va a gustar- Harry le extendió la pequeña caja que había sacado de su habitación.

Louis la abrió y se quedó sorprendido al ver un hermoso collar, una media luna con un pequeño lente en el centro, donde estaba grabado "te quiero" en varios idiomas. Louis se emocionó tanto que empezó a llorar.

Harry, en un intento de consolar a su amado, limpió con sus dedos pulgares las lágrimas que caían sobre las mejillas de Louis, depositando tiernos besos en toda su cara. Cuando Louis finalmente dejó de llorar los besos se intensificaron a gran medida, haciendo que Harry tomara por la cintura a Louis y lo pusiera encima de él.

Los brazos de Louis rodearon el cuello de Harry, permitiéndole pegarse más a su pecho, sintiendo su respiración agitada y su corazón latiendo al máximo, pronto su ropa comenzó a estorbar. Harry se quitó la playera que llevaba puesta, mientras que Louis se desabotonaba su camisa, ambos torsos estaban desnudos, piel con piel, nada más, solo ellos con su amor desenfrenado.

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Gracias por leer, los tqm 🍂

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