"Lucha sentimental pt2" ☎️

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Estuvimos por unos momentos más golpeándonos, los golpes por cierto, no eran muy fuertes porque al estar los dos borrachos, no estábamos muy conscientes de a donde o que golpeábamos, incluso algunas figuras y otros objetos cayeron al suelo, provocando que se rompieran, lo que hacía que Bradley se enojara aún más conmigo y siguiera golpeándome, aunque por supuesto, yo no me dejaba y le devolvía los golpes, o al menos así fue hasta que sentí mi labio sangrar.

— Carajo... ¡Brad, me rompiste el puto labio, idiota! ¿¡que mierda te pasa, eh!? ¿¡por que yo tengo que ser tu maldito saco de boxear?!

— ¿¡Que me pasa?! ¡¿quieres saber que me pasa realmente?! estoy harto de ti, estoy harto de que estés siempre molestándome, estoy harto de que siempre me escribas, estoy harto de tu risa estúpida, estoy harto de verte con tus tontos amigos, estoy harto de que estés siempre en mi mente! simplemente... quiero acabar con esto, quiero acabar contigo!

Mis ojos se abrieron debido a la sorpresa que sentí cuando escuché eso, se sentían como miles de cuchillas clavando mi corazón, me dolía, me dolía como el carajo, pero no iba a llorar ahora, si tendría que llorar lo haría después. Aunque jamás me imaginé que Brad me odiara tanto, pensé que habíamos avanzado, pensé que al menos éramos amigos, pero ni siquiera somos eso, somos enemigos aún o al menos así lo ve Bradley, por lo que veo.

— ¿Que? estas... estas bromeando ¿verdad? no puedes decirme todo esto enserio, no puedes decirme que no sientes nada, cuando veo como me miras cuando salimos de la universidad, cuando tus mejillas se ruborizan por mi, cuando tus ojos brillan por mi, no... ¡no me puedes decir que nada de eso fue real!

El se quedó completamente callado, queriendo negarse a lo que estaba a punto de decir, sabía que había algo en Bradley, sabía que había algo que le impedía ser sincero. Y cuando espere al menos una palabra positiva sobre mi, comenzó a reírse, y no era una risa de algo gracioso, era una risa burlona.

— Pfft- ¿enserio creíste que sentía algo por ti? si eres igual de estúpido que tu papá, se nota que a ambos les faltan neuronas.

Esta vez fui yo quien le soltó un golpe en la cara, mi papá podía ser estúpido, podía ser tonto y torpe, pero era el mejor papá que podían haberme dado, era amable conmigo, era atento, me preparaba el desayuno todas las mañanas, me mandaba mensajes y me llamaba para saber cómo estaba. Simplemente no dejaría que lo insultara nunca más.

— No vuelvas a decir eso de mi papá nunca más ¿entendiste? Mi papá puede ser torpe a veces, claro... eso no te lo niego, pero al menos mi papá si se preocupa por mi, si me quiere y si me respeta ¿que hay del tuyo? por lo que sé y por lo que tú me has dicho ¡lo único que hace tu padre es verte como un producto y venderte como tal!

(...)

Al escuchar aquellas palabras, deje que la ira me dominara y eleve mi puño para intentar golpearlo, pero me detuvo con una de sus manos, y el muy desgraciado me sostenía la mano con fuerza, me dolía bastante, pero no dudé en intentar usar mi otro puño para golpearlo, pero pasó exactamente lo mismo, así que estaba bloqueado, no sabía cómo golpearlo y ni siquiera me dio tiempo a pensar en que usar, pues, me acercó tanto a él, que nos miramos unos minutos directamente.

— ¿¡Que carajo estás haciendo ahora?! ¡Suéltame, mierda!

— No quiero hacerlo, Brad. Yo... Te necesito.

Finalmente, sus labios se estamparon contra los míos y mis manos dejaron de tener forma de puño, ahora estaban más relajadas, por lo que Max aprovechó esa instancia para entrelazar nuestros dedos. Al principio no correspondí su beso, pero después si, era un beso desordenado, sus labios tenían un ligero sabor a fierro, no pude evitar morderlos y sentir uno de sus piercings sobre mi boca, por alguna razón esa sensación me gustaba.

El beso comenzó a subir de intensidad hasta el punto en el que nuestras lenguas comenzaban a mezclarse, la lengua de Max tenía un piercing que era como una bolita, también de alguna manera me estimulaba, pues de vez en cuando el lamia mis labios y yo sé los mordía, lo que más me gustaba de mordérselos, es que él gemía cada vez que se los mordía y a pesar de que aún sangraba un poco, no nos deteníamos, y el sabor del alcohol mezclado con la sangre era algo desagradable, pero no le di importancia.

Deje de besarlo para luego tomar los bordes de su camisa, la roja con bordes negros; la que siempre usaba.

— ¿Que tan caro es esto? —pregunté, mientras que sostenía su camisa entre mis manos, amenazando con estirarla.

— A-Ah... ¿que? supongo que no es tan cara ¿por que me preguntas eso? —

Sonreí victorioso, y volví a tomar la camisa para poder romperla, dejando ver su pecho descubierto. — Te compraré otra mejor, no tienes de que preocuparte. —aunque grande fue mi sorpresa al darme cuenta de que Max, también tenía piercings en una parte específica de su pecho. Reí un poco por esto y también por su expresión de sorpresa y luego me acerque hasta este, deje una lamida en uno de sus pezones deleitándome por el sonido que dejo escapar después de hacer eso.

— Cada vez me sorprendes más, Goof. También tienes piercings aquí... realmente estás todo perforado.

— Pfft- bueno... ya sabes que me gustan los piercings, además, creo que se ven lindos ahí. ¿No lo crees, Brad?

Normalmente le hubiese dicho que se callara, porque odio ese apodo, pero en el tono en el que me había llamado así, simplemente no podía negar que me había gustado escucharlo, así que simplemente asentí, mientras que aún estimulaba sus pezones, los cuales por los que podía ver, eran muy sensibles, pues uno de los que estaba chupando y lamiendo, ya se había puesto rosado e hinchado, apetecible, a mi gusto.

— M-Mierda... supongo que si te gusta excitarme ¿te encargarás de mi erección después, verdad?

Al escuchar aquello, simplemente sonreí, me estaba dejando llevar por completo, y es que no estaba en mis cinco sentidos, de vez en cuando todo me daba vueltas, la música de la fiesta se escuchaba aún más fuerte en mis oídos, combinada con los gemidos de Max, que me distraían por completo de la música. Como pude, lo tomé de la cintura y lo cargué hasta tirarlo en mi cama, él ni siquiera se quejó, simplemente comenzó a reírse, pero su risa no duró demasiado pues, cuando yo me senté en la cama, lo senté en arriba mío.

Tomé su mentón con una de mis manos y le robé un beso, luego mis dedos se deslizaron con delicadeza por su cuello, ejerciendo un poco de presión.

— Móntame, niño lindo. —ordené.

Me miró durante unos segundos, sus mejillas estaban completamente sonrojadas, porque seguramente esto era nuevo para el, aunque quizás no tanto, porque lo mismo me había hecho la primera vez que se restregó tan descaradamente contra mi miembro.

Finalmente, y después de pensarlo durante unos minutos, colocó sus brazos alrededor de mi cuello y comenzó a saltar encima de mi entrepierna, aunque claro, esto no era sexo como tal, porque estábamos haciendo todo con la ropa inferior puesta, aunque desearía que no fuera así, pues tenía que admitirlo, lo que más quería en este momento era cogérmelo hasta el amanecer, hasta que no diéramos más, hasta que nuestros cuerpos estuvieran sudorosos y su culo estuviera lleno de mis fluidos, que toda la puta fiesta escuchara cómo hacía mío a Maximilian Goof.

Pero eso... era demasiado pedir para dos tipos, que jamás habían tenido relaciones con una persona de su mismo sexo, que tenían poca o nula experiencia en ese rubro y que traían más de 6 botellas de alcohol ingeridas y quien sabe que otros tragos cada uno en su sistema.

𖦆⊹ 🐶 ˙ ɞ

¡Hola! ¿Como han estado? espero que bien.
Debo admitir que este es uno de mis capítulos favoritos, que tenía planeado escribir desde que se me ocurrió la idea de escribir este fanfic.

A propósito, para escribir este cap, tuve que escuchar varias canciones de reggueaton antiguo, para ambientarme con el ambiente de la fiesta y fue muy divertido, me dieron ganas de carretear JQJSJS.

¿Les está gustando el rumbo de esta historia? Los leo, chiquilines. 👀

¡Wrong Number!; AU maxley Donde viven las historias. Descúbrelo ahora