Smalltown - Josuhan

8: After Hours

Josuke entró en su casa y nada más cerrar la puerta oyó el ruido de unos pasos que se acercaban a él.

"¡Josuke! ¿Por qué tan tarde? No puedes volver a estas horas, sobre todo si al día siguiente hay colegio", se quejó su madre mientras se acercaba a él. "¿Dónde estabas? ¿Y qué le has hecho a tu chaqueta? ¿Sabes lo caras que son? Si la has perdido, te vas a comprar una nueva".

Josuke podía jurar que ella ni siquiera hacía una pausa para respirar, así que en cuanto vio la oportunidad la interrumpió.

"¡Son las vacaciones de verano, mamá! Hace semanas que no tengo clases!", se quejó y trató de no hacer pausas también para que ella no lo regañara más, pero hizo una pausa y ella volvió a hablar.

"Nunca te quitas ese uniforme así que por supuesto creo que todavía tienes clases" dijo ella.

Él continuó.

"Perdón por llegar tarde. Estaba con un amigo y hacía frío fuera, así que me pidió prestada la chaqueta", explicó.

Tomoko seguía sin estar convencida.

"¿Qué amigo?", preguntó con los brazos cruzados.

"No lo conoces, no es de la escuela", se encogió de hombros. Eso significaba que el amigo no era Koichi ni Okuyasu, los dos únicos amigos con los que salía fuera de la escuela.

"Bueno, obviamente te gusta mucho ese amigo" se burló y esperó su reacción.

"¿Qué, por qué?" Josuke se hizo el desentendido pero esperaba no sonrojarse.

"Le prestaste tu chaqueta y adoras esa chaqueta. Te has enamorado de él, ¿verdad?", dijo aún burlona.

"¿Pero cómo lo sabes sólo con eso?" él la miró, realmente sin entender cómo.

"Soy tu madre, tonto" le señaló juguetonamente. "Claro que me daría cuenta" respiró hondo antes de continuar. "Sabes que puedes quedarte hasta tarde o salir, pero tienes que decírmelo, ¿sí? Podría preocuparme" dijo ella.

"¿Estabas preocupada?" preguntó él, dispuesto a disculparse.

"No. Sé que siempre estás bien. Pero la próxima vez avísame", dijo ella, más relajada.

"Sí, mamá", prometió él. "Lo siento".

"Ahora, ¿quién es?" preguntó ella y Josuke puso los ojos en blanco.

"No lo conoces" quería que el tema terminara y al mismo tiempo no.

"Por eso te lo pregunto" sonrió.

"Bueno, es un mangaka. Un poco molesto y engreído, pero en realidad es guapo cuando llegas a conocerlo" él también sonrió.

"¿Guapo?"

"Muy guapo", asintió. "Pero no sería tu tipo. Sé que prefieres a los tipos voluminosos"

"Bueno, él es tu tipo, no el mío" ella rió.

"Pero no creo que yo le guste de esa manera" dijo un poco triste.

"Bueno, si no es así es un absoluto idiota. Y apuesto a que ni siquiera es tan guapo" dijo ella. Él sonrió agradecido. "Vete a dormir, Josuke. Tenemos que hacer algunas tareas mañana"

"No arruines mis vacaciones con tareas domésticas" gritó él.

"Es mi deber como madre arruinarte la vida" ella sonrió y le besó la mejilla mientras él seguía quejándose dramáticamente. "Te quiero mucho, Josuke"

"Ugh" suspiró por la idea de limpiar la casa. "Yo también te quiero, mamá"

Al día siguiente, las tareas de la casa no fueron tan terribles como se había imaginado. Tenía mucho tiempo después para reunirse con sus amigos, así que él, Okuyasu y Koichi se reunieron en un parque y se sentaron bajo un árbol para hablar y comer. Era una especie de picnic improvisado que consistía sobre todo en comida basura, unas cuantas aceitunas y dos manzanas. Okuyasu se divertía lanzando los huesos de aceitunas a Koichi, que intentaba atraparlos y devolvérselos. Josuke estaba apoyado en el tronco del árbol y se sentía algo incómodo, sobre todo porque no llevaba la chaqueta.