Capítulo 8

212 26 0
                                    

Hay que ser Honestos

Keigo se encontraba en las afueras del almacén, abrazando a Hana con fuerza mientras los policías y héroes aseguraban la zona

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Keigo se encontraba en las afueras del almacén, abrazando a Hana con fuerza mientras los policías y héroes aseguraban la zona.

La adrenalina aún corría por sus venas, pero sentía un profundo alivio al tener a su hija a salvo.

De repente, un policía se acercó a él con una expresión seria.

—Señor Takami, hay alguien que quiere hablar con usted, —dijo el oficial, haciendo un gesto hacia una patrulla cercana.

Keigo frunció el ceño, pero asintió. Dejó a Hana bajo el cuidado de Aizawa y caminó hacia la patrulla. Al acercarse, su corazón dio un vuelco al ver a dos figuras conocidas;Misaki y Natsuo.

—Misaki... —susurró Keigo, sin poder creer lo que veía.

Misaki bajó del vehículo, su rostro lleno de emociones encontradas.

Natsuo se mantuvo a su lado, mirándolo con una mezcla de seriedad y comprensión.

—Hola, Keigo, —dijo Misaki con voz temblorosa.

—¿Cómo es posible? Nos dijeron que te habías suicidado, —dijo Keigo, su voz llena de incredulidad y confusión.

Misaki bajó la mirada, tomando una profunda respiración antes de hablar.

—No me suicidé. Esa noche, decidí huir. Natsuo me ayudó a escapar y fingir mi muerte para empezar de nuevo en otra ciudad. Sabía que no podía llevarme a Hana, así que la dejé contigo, pensando que estaría mejor.

Keigo sintió una mezcla de alivio y rabia.

—¿Por qué nunca me lo dijiste? ¿Por qué dejaste que todos creyeran que estabas muerta?

—Tenía miedo.. —confesó Misaki, sus ojos llenos de lágrimas. —Miedo de enfrentar mis problemas, miedo de lo que podría pasar si me quedaba. Pensé que fingir mi muerte sería la única manera de escapar.

Natsuo intervino, poniendo una mano reconfortante en el hombro de Misaki.

—Ella necesitaba empezar de nuevo, Keigo. Yo la ayudé porque creí que era lo mejor para ella en ese momento

Misaki asintió, mirando a Keigo con arrepentimiento.

—Lo siento mucho, Keigo. No sabía que mi padre haría algo así. No sabía el daño que causaría....

𝐓𝐡𝐞 𝐡𝐞𝐫𝐨'𝐬 𝐬𝐨𝐧 || 𝐊𝐞𝐢𝐠𝐨 𝐓𝐚𝐤𝐚𝐦𝐢 ᵇᵒᵒᵏ ᵗʷᵒ  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora