Los asistentes -COMPLETO-

Capítulo 12

"Hey, Daphne! Espera!"

Harry y Daphne ralentizaron su caminata por el corredor de Hogwarts y se dieron la vuelta para enfrentar la voz. Una niña más joven con el pelo largo y oscuro corría por el pasillo justo hacia ellos, claramente sin aliento. Al instante, Daphne se congeló junto a Harry. Él le dio una mirada preocupada, pero sus ojos estaban enfocados únicamente en la chica que se había detenido justo en frente de ellos.

"Astoria", dijo Daphne uniformemente mientras la niña más joven dejaba caer las manos sobre sus rodillas, luchando para recuperar el aliento.

Astoria, esa era la hermana de Daphne, recordó Harry. Hizo todo lo posible para no ofrecer una reacción externa, pero no esperaba que esta fuera una conversación agradable. Nunca había conocido a la chica antes, pero tanto Tracey como Daphne le habían dicho que Astoria no había tomado la noticia de que Daphne se convirtiera en un asistente bueno. Aparentemente, Astoria hizo todo lo posible para ignorar a su hermana mayor, o simplemente la llamó cosas hirientes y se fue.

Fue obvio por la reacción de Daphne al ver a su hermana que no estaba exactamente contenta. Se estaba recuperando de nuevo, tratando de evitar que se mostrara dolor en su rostro.

Astoria, todavía jadeando, logró mirar hacia arriba. "Puedo hablar contigo? En privado?" Agregó, echando un vistazo rápido en dirección a Harry.

Daphne no dudó. "Lo que quieras decirme lo puedes decir delante de mi maestro."

Si esta no fuera una situación tan grave, Harry se habría reído de las palabras de Daphne. Nunca en un millón de años pudo imaginar a Daphne refiriéndose a alguien como su maestro, simplemente no estaba en su personaje. Estaba claro que solo usaba ese término por el bien de Astoria, si la mirada pellizcada en la cara de Astoria era algo por lo que pasar. Daphne vio que Harry estaba tratando de contener una sonrisa y ella le dio un serio resplandor.

Astoria todavía parecía vacilante para decir algo. Sus ojos parpadearon hacia Harry por un breve momento antes de regresar a Daphne. De repente, la niña más joven se abalanzó sobre Daphne, envolviendo sus brazos firmemente alrededor de su hermana mayor.

Ahora Harry no podía contener una risita ante la mirada de pura sorpresa en la cara de Daphne. Por mucho que la mujer rubia intentara darle a Harry una mirada de desaprobación, no pudo evitar derretirse en el abrazo que su hermana le estaba dando. "Lo siento", murmuró Astoria contra las túnicas de Daphne. "Soy un imbécil."

"Lo eres", comentó Daphne a la ligera.

"Nunca debería haberte dicho esas cosas horribles", continuó Astoria mientras acariciaba el hombro de su hermana.

"No deberías haberlo hecho."

Astoria asintió. "Pero sólo quería que supieras que lo siento mucho. Nunca quise que las cosas se pusieran tan mal entre nosotros."

Daphne se mordió la lengua suavemente, contemplando cómo responder. "Por qué se puso tan mal?" Ella le preguntó a Astoria suavemente.

"No lo sé", Astoria sacudió la cabeza. "Solo . . . nos dejaste durante el verano, y luego te uniste al programa de asistentes. Eres demasiado inteligente y talentoso para estar en él."

"Hay muchas brujas y magos inteligentes y talentosos que eligen convertirse en asistentes", reprendió Daphne a su hermana a la ligera. "Muchas personas tienen razones muy diferentes para convertirse en asistentes."

"Nunca pensé que querrías ser básicamente una esclava sexual", se desdibujó Astoria.

Daphne se rió entre dientes. "No lo soy."