➥ OO7.

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— ¿De verdad, Isa? No sé que haces ahí, amiga. Nunca me ha caído mal Antonio, pero no me parece lo que está haciendo. —la enojada voz de la mejor amiga de Isabella, se escuchaba por el otro lado de la línea. —Amiga no mereces esto. Es horrible que un día tan especial lo hayas pasado sola y de esa manera...

—Lo sé, Keyla, pero lo amo. —le respondió Isabella, al borde del llanto.

Keyla, era la mejor amiga de Isabella desde la adolescencia. A pesar de que se encontraban en distintas ciudades, ambas se frecuentaban siempre y estaban al tanto de lo que sucedía en sus vidas. Isabella no conocía a nadie en Los Ángeles, más que al círculo de amigos de Antonio.

Escuchó el suspiró de su amiga. —Se que es difícil amiga, pero lo que hizo no tiene justificación. Además, si no fue al estudio...¿en donde estuvo?

Isabella estaba por responder, cuando el ruido de la camioneta de Antonio, llamó su atención.


— ¡Es Antonio! Te llamó después. —dijo para colgar la llamada.



Desde la ventana, pudo notar como Antonio se bajaba del auto y con él, un enorme ramo de tulipanes. Aquella acción hubiera hecho sonreír a Isabella, sin embargo, la realidad era otra; comenzaba a darse cuenta que Antonio cada vez que le fallaba compraba enormes ramos, collares, anillos de lujo.

Jamás le había pasado por la mente aquello, porqué a pesar de que le encantaban los hermosos y enormes ramos que Antonio le regalaba, ella se conformaría hasta con una sola rosa de papel viniendo de él. Isabella se metió bajo las sábanas, fingiendo estar dormida.




—¿Isa? —escuchó su voz. Después, el ruido de sus zapatos al subir las escaleras.

Los suaves labios de Antonio hicieron contacto con la piel de su mejilla. —Se que estas fingiendo, conozco bien como se escucha tu respiración al dormir...

Si hubiera sido otro momento, probablemente una risa saldría de Isabella. Sin embargo, se sentía tan decepcionada de él, que lo único que salió de ella... fueron lágrimas.

—¿Porqué, Antonio?¿Porqué me mientes?

—¿Qué?¿De qué hablas? —se hizo el desentendido.

—¡No te hagas el que no sabes!¿En dónde estuviste ayer en la noche?

— Te dije que estaría en el estudio. Duarte me..— Isabella lo interrumpió.

—Antonio, hablé con Duarte y nunca estuviste en el estudio. ¡Ni siquiera te llamó!

— ¿Le hablaste a Duarte? ¡Que te sucede Isabella, te estás portando como una loca tóxica! —aquello hizo a Isabella sorprenderse. Antonio nunca le había faltado al respeto, mucho menos, llamándola loca.

¡Y tu eres un mentiroso!

—Sabes que Isabella, no seguiré peleando. Regreso luego...



Antonio tomó sus cosas y salió de la habitación, dejándo a Isabella con miles de dudas y decepcionada. Comenzaba a sentirse cansada del cómo se estaba tornando su relación amorosa: llena de peleas, mentiras y decepciones.









𝐌𝐄𝐓𝐀𝐍𝐎𝐈𝐀 ⚊ 𝓳𝓾𝓷𝓲𝓸𝓻 𝓱Donde viven las historias. Descúbrelo ahora