''𝐋𝐨𝐬 𝐃𝐫𝐚𝐠𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐋𝐞𝐬 𝐠𝐮𝐬𝐭𝐚 𝐚𝐜𝐮𝐦𝐮𝐥𝐚𝐫 𝐭𝐞𝐬𝐨𝐫𝐨𝐬 𝐲 𝐬𝐨𝐛𝐫𝐞𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐥𝐚𝐬 𝐣𝐨𝐲𝐚𝐬''
'Aemma en una noche no sólo perdió el ojo y ganó un dragón, también se ganó un esposo.
Pero nunca se espero que sería su Tío Daemon...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Se arrepiento completamente haber ido a la playa y aceptar el paseo de su tío.
Ya que lo único que consiguió fue joderse más el ojo derecho, según lo que escucho de el maestre su ojo se había infectado por la arena que se introdujo y ahora se encontraba en una cama con fiebre.
Y todo por ir donde Vhagar, y después aceptar un paseo con Daemon.
El Maestre sugirió que lo mejor para ella era no ir a Desembarco Del Rey y quedarse descansando, ya que si lo hacía quizás solo terminaría empeorando su ojo, pero su madre estaba muy histérica quizás por el daño que le hizo a Rhaenyra, que sin importarle las advertencias del Maestre se fueron.
La fiebre simplemente empeoró cuando viajo, tal como dijo el maestre, pero su madre le importo menos eso, ya se miraba tranquila cuando llegaron a Desembarco Del Rey, a pesar que su hija literalmente sufrió en todo el viaje.
Y ahora estaba en una cama sin nada que hacer solo acostada, solo con el maestre que venía a examinarla o a veces darle leche de amapola, cosa que ella rechazaba siempre así que solo a veces se lo daban.
No había nada que hacer, solo pensar, y dormir, cosa que no le iba bien por el dolor, pasaba varias noches sin dormir.
Su madre casi nunca la iba a visitar, los que más pasaban con ella eran sus hermanos y claro que el maestre.
Con Helaena hablaban de cualquier cosa, aunque era su hermana mayor que más hablaba mientras ella escuchaba pero le gustaba así, según Aemma la voz de su hermana es muy relajante de escuchar.
Con Aegon era diferente, cuando entraba a su habitación solo lo hacía para burlarse de ella llamándola "Tuerta", "Mi hermanita de un ojo", "Aemma la un ojo", etc. Cosa que ella simplemente ignoraba, hace mucho tiempo que ya no le importaba lo que dijera su hermano, aunque sabía que estaba preocupado por ella, aunque no lo demostrará.
Claro que Aemma le agradeció por haberle dicho eso a su padre, para que no se casara tan joven. La reacción de su hermano fue divertida de ver, estaba tan rojo que fácilmente podría ser del color de Caraxes.
