Un suspiro lleno de dolor

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10:00 pm

Jungkook.

El corazón me palpitaba a más no poder, la corriente eléctrica en mi cuerpo al igual que la adrenalina estaban juntandose en mi debido a mi próxima movida. Todo estaba colgando en un muy delgado hilo... ¿O cabello? Posiblemente si.

Todo estaba controlado. El cambio de guardias sería nada mas y nada menos que a las 10:30 pm. Los guardias se irían a dónde están los que los cubrirían para dar aviso de su salida. Tenía exactamente tres minutos para salir de la mansión.

10:26 pm

Mire como uno de los guardias que me custodiaban bostezaba mientras la palma de su mano fue a dar a su boca demasiado abierta.

—Casi es la hora... —Susurre para mí mismo, tenía todo listo.

10:30

Tome con fuerza las sábanas que me ayudarían a bajar. No espere más, salí directamente de la ventana mientras los guardias iban a su cambio de turno. Apenas toque el suave césped comencé a correr con toda la fuerza que mis piernas me permitieron. Di una maravillosa barrida para poder salir junto con el auto de los mismos guardias que habían cambiado turno. Espere unos segundos a qué se fueran por completo para después sonreír de oreja a oreja.

—Lo logré... —Estaba más que feliz, coloque mi mochila perfectamente y comencé a correr. No me arriesgaría que alguien me viera.

Todo iba de maravilla, solo eran veinte minutos caminando de la mansión a casa. Pero claro, el señor desesperado había decidido cortar por un pequeño callejón... Obscuro... Tenebroso.

Las pisadas era lo único que se escuchaba con algunos grillos de antemano. Sin embargo, el escalofrío lograba sentirlo. Tenía un mal presentimiento.

—Valla, solo miren a quien tenemos aquí.

Una voz escalofriante me hizo detener. Me gire de inmediato logrando ver a un posible alfa vestido completamente de negro. En cada lado una persona más. Estaba aterrado. ¿Que pasaría si me quieren hacer algo? No sería justo tres contra uno.

—Es realmente lindo, solo míralo, es aún un niño. —Dijo uno de los cazadores.

—¡No soy un niño!... Estoy por pasar a la universidad... —Mentira.

—Jajaja, tienes cara de bebé.

El miedo poco a poco incrementaba, a medida que hablaban más se acercaban y yo retrocedía.

—Que tienes en la mochila. Espero que sea algo bueno para que sigas en este mundo.

—S-solo ropa...

—Jefe, el puede servir para muchas cosas —Dijo el beta logrando incomodar y asustar a Jungkook. Que al ver la intención de querer tomarlo no perdió tiempo para comenzar a correr. Claro que todos empezaron a ir tras el.

—¡QUIERO QUE LO CAPTUREN!

Sentía las lágrimas caer, mis piernas no daban para más. Estaba perdido, no debió salir, no debió si quiera pensar en escapar.

—¡¡NO!! ¡NOO! —Grité, uno de ellos me había tomado por la espalda gracias a un atajo, ellos tenían ventaja por conocer tal lugar. Me removia desesperado mientras sentía sus asquerosas manos tocar mi cuerpo, mis prendas desaparecían poco a poco. Mis gritos no ayudaban —¡SE LOS PIDO! ¡SUELTENME! ¡¡LES DARÉ MI DINERO!! ¡POR FAVOR!

—Carajo, solo miren, está carne se ve deliciosa.

Apreté mis labios cuando sentí la mano de ese cerdo en mi pecho. Lágrimas gruesas brotaban de mi cara.

—Claro que tomaremos el dinero... Pero también queremos a alguien con quién aliviar nuestro celo... Felicidades dulzura.

Lloraba a gritos cuando sus manos fueron a mi ropa interior quitando cada prenda por completo. Era imposible luchar, dos de ellos sujetaban mis brazos.

—No te asustes Omega... Lo vas a disfrutar.

Escuchar como se bajaba el cierre y abría mis glúteos me hizo temblar. No dejaba de moverme.

—Oigan...

Esa voz me hizo abrir los ojos de golpe, sonreí y mire de dónde provenía.

—¿Puede irse? No ves que estamos en medio de algo. Carajo... Tenga modales.

—Ese Omega... Es mío, no me gusta compartir mis cosas.

—¡Jajajajaj No sabe con quién se metió. ¡Ahora es mío!

Taehyung no hizo ninguna expresión, pero la vena sobresaliente de su frente era más que suficiente para demostrar que tan molesto estaba.

—Eso lo veremos.

Taehyung había sacado un arma de su abrigo apuntando a los tipos. No pudieron ni reaccionar cuando el alfa detonó el arma a la cabeza de cada uno de los idiotas que se habían atrevido a tocar su tesoro más preciado.

El Omega, termino en el piso, haciendo que suelte un jadeo de dolor. Impresionado, por tal escena tan caótica. Su vista fue lentamente a Taehyung, que caminaba con lentitud hasta el, haciendo resonar esos caros zapatos de tacón levemente bajo.

No podía emitir palabra alguna,  tenía tantos sentimientos encontrados en este momento que era imposible decidir cuál sentía más.

Estando Taehyung frente a mi, note su molestia, era claro que estaba condenado. Mi vista iba a el piso, dónde mi ropa estaba esparcida. Tenía que cubrir mi cuerpo desnudo.

Cuando menos lo espere, sentí como una prenda cálida abrazaba mi cuerpo. Taehyung me había puesto su saco encima, después me había tomado en brazos, logrando sentir ese aroma varonil que tanto me gusta. Era obvio que no quería que tomara mi ropa.

—Tae...

—Shh... Lo hablaremos más tarde. Pero esto, te va a pesar.

Asenti levemente, no me importa que tanto me haga, estaba vivo, sin marca alguna de un completo abuso sexual. Estando en sus brazos, nuevamente... Me sentía seguro.

𝙼𝚊𝚣𝚊𝚙á𝚗 🌹