CAPITULO 7: Besos

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Observo atenta a Heil así como había decidido llamarlo porque su nombre y apellido eran muy largos para recodarlo además de que era complicado aunque el decía que le gustaba ser original pero estaba seguro que sus padres simplemente le habían puesto ese nombre y solo lo decía para ser original

—Tu nombre es muy largo y complicado Heil

—Puedo decir que el tuyo es muy largo chica Emo—tomo otro trago incorporándome ¿Por qué me decía así? No lo era— ¿Por qué solo las puntas de rojo? Seria genial que lo hicieras con todo el cabello y corto estaría mas cool ahí si te verías como una chica Emo—veo mi cabello, había dejado de cortarlo porque quería parecer más femenina ante Edward

—No lo sé y mi nombre no es tan largo así que no me digas así

—Pues te diré como quiera chica Emo—era irritante ni siquiera que bebiera tres botellas más dejaría de pensar así de el

—Eres muy irritante ¿Sabias? Me recuerdas a como solía llevarme con un amigo

— ¿Tienes amigos? Siempre estas sola en la universidad

—Lo mismo puedo decir de ti pero no te presto atención pero si los tengo

—No pareces esa clase de chica—me quita la botella tomando otro trago, estaba a punto de acabarse y era la segunda que me bebía—Se supone que las Emo no las tienen al menos que sean emos como tu ¿Qué hacen las emos cuando se reúnen?

—No son Emo solo me gusta la ropa, el mundo suele señalar a las personas por su etiquetas y formas, puedo decir que eres un chico rebelde que no le importa nada además de molestar a chicas solitarias en un cementerio—escucho que ríe

—Que especifica, no creo que las personas hagan eso pero si entiendo lo que dices, entonces eres chica no Emo ¿mejor? —Sonrió ante el tonto sobrenombre—Dejaste de llorar—veo que le da una última calada a su cigarrillo para dejarlo en el suelo y pisarlo—No me gusta deber nada, dejaste de llorar y yo de fumar ¿A mano? —rio ante lo tonto de la explicación

—Que ocurrencias tienes—le doy un último trago a la botella, me sentía tan relajada, no me importaba que estuviera oscuro ya— ¿A quién visitabas?

—A mi amante—rio ante la mala excusa, lo veo que baja la vista—Siempre vengo los fines de semana, prometí que no se sentiría solo—ve la tumba— ¿Tus padres?

— ¿Por qué lo supones? ¿Por qué le dije papa cuando llegaste o porque llevan mi apellido? —veo que sonreí ante mi comentario

—Te dije que me gusta señalar las cosas obvias de la vida, todo el mundo lo hace

—Pero suelen hacerlo inconscientemente tu solo lo haces por irritar

—Es más divertido ¿Por qué lo hace? Es tan típico de las personas

—Creo que necesitare otra botella—bostezo al sentirme algo cansado

—No necesitas una cama amiga y yo una ducha probablemente—comienzo a jugar con la botella algo aburrida aunque le gustaba hablar con Heil— ¿Me prestas tu celular? —sin preguntar se lo paso, no me importaba igual no sabía ni siquiera que era lo que iba hacer, ni siquiera sabía porque estaba ahí

— ¿Por qué no te agradan los de la clase? Sé que son idiotas como la mayor parte de la población en el mundo pero aparte de ser personas normales no veo porque no te agradan—lo veo—para ti es sencillo entablar una conversación

—Preguntando se llega a China, es lo que  he escuchado—noto que teclea algo en mi celular—ya viene por mí—me lo entrega después de unos minutos

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