Exterminio por tu corazón

2

Mi respiración se estaba volviendo agitada y mi corazón latía rápidamente.

Quería voltear pero el miedo me estaba matando.  El olor que emanaba de aquella cosa me estaba causando ganas de vomitar. Alguien por favor, salveme; esas palabras no paraban de rondar por mi mente, estaba entrando en pánico.

Lágrimas brotaban de mis ojos, solo creía que era mi fin. Aquella cosa soltó un chillido que me causo leve dolor de tímpanos. Retrocedió un poco y fue mi momento de alejarme. Cuando iba a hacerlo, gire mi cabeza, y  alguien me devolvió esperanzas en tan solo unos segundos. Aquel sujeto era un encapuchado, traía consigo dos filosos cuchillos. En un instante corrió rápidamente y se abalanzó contra aquel ser. Sus cuchillos entraban y salían por sus cuencas. Cuyas brotaban y brotaban sangre.

Se veía tan tranquilo, tan experimentado que era poco creíble pensar que era un humano. No sé si tengo miedo de lo que ya está muerto, o de esa persona. Retrocedí de manera tonta y corrí. No tuve que correr mucho para llegar a mi casa, pero por aquel pánico, no fui capaz de abrir la puerta.

Mis manos temblorosas hicieron que se me cayesen las llaves.

Gire mi cuerpo, aquella persona estaba de pie ante mi, era alguien alto y se veía un tanto fuerte. Su ropa estaba completamente ensangrentada, y su mirada, capto mi atención por completo. El miedo me invadía, eso no puedo negarlo. Pero esos ojos, ojos de diferente color. Eran preciosos. La luz hacia que brillaran de una forma encantadora, cualquiera quedaría impresionado.

Me quedé observándolos estática. Creí que vendría por mi o que me haría daño. Cosa que si hizo, poso uno de sus cuchillos manchados de sangre en mi cuello, haciendo que elevará la cabeza, y  lo clavo de una forma suave, evitando enterrarlo lo suficiente en la piel. Aunque eso basto para hacerme soltar un grito ahogado, ardía como un infierno y el lo sabia. Pude escuchar una risa burlona de su parte, quito aquel cuchillo y me observo durante un instante, opte por pensar en que me dirigiría la palabra o algo, pero, solo se largo. Camino muy rápido y se esfumó entre calles lejanas. Era de esperarse.

Me derrumbe en el suelo, cubierta por aquella penumbre oscuridad acompañada de silencio, con la piel de gallina y con mi cuerpo temblando. Cómo es posible que estén pasando tantas cosas en poco tiempo. ¡¿Por qué carajo no han advertido de aquellos monstruos?! No piensan en lo peligroso que pueden ser.

Mi cuerpo inmóvil no reaccionaba. No podía mover ninguna articulación por más que lo intentará. 

Mi visión se estaba tornando borrosa, me dificultaba poder mantenerme estable. Solo sentí que se me vino un enorme peso encima y caí rendida, mi cuerpo chocando fuertemente contra el cemento, desprotegida. Mis ojos se cerraban lentamente. Pero se que eso no era sueño. 

Cuando por fin pude abrir los ojos, observe mi alrededor, el cual era...mi habitación. No dude en pensar en Ethan, quizás se percato de mi ausencia o algo similar. Agite mi cabeza hacia ambos lados y me levante rápido en vez de buscar respuestas, no pude sentir un mayor escalofrió al ver mi cuerpo con un pijama. Estoy completamente segura de que nada fue un sueño. Me balancee un poco al haberme parado tan rápido, teniendo en cuenta que no he comido, pero, logre afirmarme. 

-Dios santo, siento como si la cabeza me fuera a estallar, ¡¿Que cojones esta sucediendo y porque tenia que pasarme a mi?! -Me jale el cabello fuertemente en un acto de desesperación, lo mejor sera ir a comer o en verdad terminare postrada en una cama de hospital con puros extraños. 

Camine hacia las escaleras y baje como si tuviera un montón de peso encima, agradezco no tener que ir a trabajar hoy, observe mi entorno, que por arte de magia, se encontraba ordenado, no recuerdo haber limpiado ni nada, esto ya es el colmo. Agarre una escoba, solo por las dudas e inspeccione cada rincón, parece ser todo parte de mi imaginación, no hay lugar menos habitado que este. Abandone la escoba en un extremo de la mesa y observe como había un papel en aquel lugar. Dude pero no hice mas que apresurarme para tomarlo entre mis manos. La letra estaba algo muy desordenada pero logre entender.