the saddest part of me - Bkdk [Finalizada]

06

Katsuki regresó a la sala común con determinación, pero sintió una sensación amarga en el estómago. Le explicó a Aizawa su plan, aunque él no parecía muy convencido. Los amigos de Bakugo lo recibieron y lo abrumaron con preguntas; el rubio trató de explicar lo mejor posible la situación en la que se encontraba.

—Hermano, es imposible que Izuku desee que te vayas —dijo Kirishima con una mueca.

—Lo sé.

—¿Tienes alguna idea? ¿Algún plan? —preguntó Denki.

—Quizás si le dices a Izuku podría... —comenzó Mina, pero Kirishima negó automáticamente con la cabeza.

—Podria ser muy buena opción, Pero hay posibilidades de que no salga muy bien... —asintió Katsuki.

—Yo pienso lo mismo. Si sabe que existe la posibilidad de que me quede si lo desea, nunca se va a revertir el quirk —Katsuki suspiró—. No me malinterpreten, ustedes son mis amigos y compañeros, este universo es igual al mío. Pero... quiero regresar a donde pertenezco.

Todos asintieron, un poco desanimados. —Es cierto que, si te vas, volveremos a no verte... Y eso es triste —dijo Mina.

—Pero al menos tuvimos la suerte de tenerte un poco más con nosotros —añadió Kirishima, con los ojos llorosos—. Al menos esta vez, quizás podamos despedirnos como es debido.

—¡Mierda, Kirishima, no digas esas cosas! —Denki intentó no llorar, tapándose los ojos con las manos.

—Bien, bien, no se pongan sentimentales. Todavía hay tiempo... Primero tengo que hacer que Izuku me odie...

—¿Que Izuku te qué? —preguntó Mina, secándose unas lágrimas.

—Hermano, eso es imposible.

Katsuki apretó las manos nervioso mientras subía y bajaba la pierna rápidamente. —Creo que tengo que tratarlo mal otra vez —dijo preocupado—. ¿Creen que si lo ignoro y lo trato mal como en el primer año él... me odie?

—No lo sé, hermano... Él... nunca pareció odiarte antes —hizo una mueca Kaminari.

—Creo que eso lastimaría más a Izuku... —advirtió Kirishima.

—Lo sé... —apoyó sus codos sobre sus rodillas y se inclinó hacia delante, agotado—. Pero si logra odiarme, quizás sea más fácil para él olvidarse tanto de mí como del otro yo...

—Baku... —intentó hablar Kirishima, pero fue interrumpido por Izuku, que llegaba a la ronda con un plato de galletas.

—¡Kacchan! Ya hice las galletas —dijo sonriendo, extendiendo el plato con ambas manos, esperando que el rubio las probara.

Katsuki sintió malestar de inmediato. Sus puños se apretaron con fuerza e intentó que su voz sonara fría y distante. —No las quiero —dijo.

—¿Eh? Pero... Me dijiste que te trajera... —se notaba más desanimado y lentamente bajó el plato.

—Sí, pero ya no las quiero —ahogó las ganas que tenía de tirar a la basura su plan de mierda.

—Bueno... está bien —dio una sonrisa forzada—. ¡Puedes comerlas más tarde! Las voy a poner en una bolsa y...

—No las voy a comer, Deku —los ojos de Izuku se abrieron y sus nudillos se pusieron blancos por lo fuerte que agarraba el plato en sus manos.

—Ah... —fue lo único que pudo decir.

Los amigos de Bakugou miraron la interacción incómodos.

—¡Yo quiero galletas! —dijo Kaminari alzando la mano.