Pov ____
Cuando Morgan tenia ocho meses recibí una llamada.
___: ¿Diga?
¿?: Hola ____, soy Madeline ¿me recuerdas?
___: Para ser honestos no, disculpe.
¿?: Soy la abogada de tu hermana, veras necesito verte para afinar detalles de su testamento.
___: Lo siento Madeline, pero no estoy en el país.
Madeline: Si, veras tu hermana dejo instrucciones de localizarte a toda costa.Mire a Morgan que jugaba en su cuna debatiéndome si acceder o no.
___: ¿Dijo algo sobre mi madre?
Madeline: Lily dejo en claro que su madre debe quedar fuera de todo esto.
___: Bien, llegare en dos días.Ambos colgamos y el llevar a Morgan conmigo no era opción.
Me aseguré de que Morgan estuviera bien y fui al departamento de Yeji.
Toque un par de veces antes de que me abriera.Yeji: Hola ____.
___: Hola ¿Desayunaste ya?
Yeji: Ahora que lo mencionas... no.
___: ¿Quieres desayunar?
Yeji: Claro, gracias.Ambos volvimos a mi departamento.
Morgan al verla comenzó a dar pequeños brincos en su cuna.Yeji: Hola Morgan.
Mientras Yeji jugueteaba un poco con Morgan comencé a preparar el desayuno.
___: Yeji, necesito pedirte un favor.
Yeji: Claro, dime.
___: Tengo que salir del país por unos días para resolver unos asuntos relacionados con el testamento de mi hermana. Necesito a alguien de confianza que cuide de Morgan mientras estoy fuera. ¿Podrías hacerlo?
Yeji: Por supuesto, ____. Estaré encantada de cuidar de Morgan. No te preocupes por nada.
___: No sé cómo agradecerte esto, Yeji. Significa mucho para mí.
Yeji: No tienes que agradecerme. Morgan es adorable, y estaremos bien. Solo asegúrate de traerme un souvenir.
___: Lo haré. Gracias de nuevo.Mientras desayunábamos, me sentí aliviado sabiendo que Morgan estaría en buenas manos. Yeji y yo conversamos sobre los detalles de mi viaje y sobre lo que Morgan necesitaría durante mi ausencia. La conexión y confianza entre nosotros se fortalecían con cada momento compartido, y me sentí agradecido por tener a alguien como Yeji en nuestras vidas.
[...]
Yeji: Tranquilo, ____, esta señorita y yo nos divertiremos mucho.
___: De nuevo, muchas gracias por esto, Yeji. Volveré lo más pronto que pueda.Dos días después, estaba viajando a mi país y, tras varias horas de descanso, me encontraba en la oficina de la abogada.
___: De acuerdo, Madeline. ¿Para qué me llamó?
Madeline: Según el testamento de Lily, ella dejó todos sus bienes a tu nombre y esta caja.Madeline puso una caja sobre el escritorio.
"____, posiblemente para cuando recibas esto, yo estaré muerta. Como sabes, mamá toda la vida nos preparó para cosas grandes, pero sus exigencias se volvieron tóxicas. Resolví el problema..."
A mi mente volvieron aquellos días en que Lily era presionada con problemas complejos de física y álgebra, a tal punto de hacerla llorar.
"Resolví el problema y mi vida dejó de tener sentido... Te pediré un favor: publica mi último trabajo post mortem... pero no mi muerte, ____."
Seguí leyendo, sintiendo una mezcla de tristeza y comprensión por las palabras de Lily.
"Quiero que mi trabajo sea reconocido por lo que es, una contribución a la ciencia, no una nota trágica en la historia. Guarda la caja, contiene mis notas y todo lo necesario. Confío en ti para que mi trabajo vea la luz."
Cerré los ojos por un momento, tratando de asimilar lo que Lily me pedía. Sabía que cumplir su último deseo no sería fácil, pero era algo que debía hacer.
Madeline: ____, entiendo que esto es mucho para procesar. Si necesitas ayuda para llevar a cabo sus deseos, estoy aquí para asistirte.
___: Gracias, Madeline. Aprecio tu apoyo.
Madeline: Por supuesto. También hay algunos documentos legales que necesitas firmar para transferir los bienes a tu nombre.Firmé los documentos necesarios, sintiendo el peso de la responsabilidad sobre mis hombros. Sabía que cumplir el último deseo de Lily sería un camino largo y arduo, pero estaba decidido a hacerlo.
___: Gracias por todo, Madeline. Me pondré en contacto contigo si necesito más ayuda.
Madeline: Estaré aquí para lo que necesites. Cuida de ti y de Morgan.Salí de la oficina con la caja en mis manos, dispuesto a honrar la memoria de mi hermana. Mientras regresaba al lugar donde me hospedaba, pensaba en cómo organizar todo para cumplir con su último deseo. Sabía que, con el apoyo de Yeji y las personas de confianza que había encontrado, podría lograrlo.
