CAPÍTULO 8

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Al terminar de responder las preguntas de los para-médicos me dediqué a mirar cada parte de su rostro y cada parte de sus manos, sin darme cuenta habíamos llegado al hospital, me bajé y ellos hicieron lo mismo con mi padre igual, lo llevaron corriendo, le estaba dando un infarto. Entre a ese lugar, que no me gusta para nada y a cada paso que daba era una punzada al pecho, me senté en unos de los asientos y me acomodé un poco y por fin solté las lágrimas que tanto aguante.

Mi pecho dolía demasiado, trate de relajarme pero me era imposible, sentí un peso en mi hombro y mire en dirección de donde venía la mano, y me encontré con el guarde espalda sonriendo apenado.

- No sé que haré sin él...Seung.- Dije su nombre dejando mi orgullo de lado.

- Se que es duro pero tienes que salir adelante.- Ahora me tomo de la mano y con la otra me acarició la mejilla, sonreí dejando caer lágrimas nuevamente. 

- Gracias...-Tome igual su mano y la  apreté para sentir más su calor.- De verdad gracias.

- ¿Familiares del paciente Kwon?.- Salió un doctor preguntando por mi apellido, yo me levanté mareado del asiento acercándome a él con las manos temblorosas.

- ¿Usted que es de él paciente?.- Me pregunto una vez que estuve delante de él.

- Su hijo.- Trague saliva con miedo, espero no sea algo malo.

- Yo en realidad lo siento, no pude salvarlo.

- ¿Qué? ¿Cómo dijo?.- Por alguna razón deje de sentir y escuchar, no podía con mi cuerpo quería salir a patear algo, gritar, correr, golpear, no se pero algo quería hacer.

- Disculpe.- Y sin más se retiró, volviendo a entrar dejándome sólo ahí mirando la puerta.

- Yo...-

- No digas nada, solo...- Me abrazo, no dejó que continuará hablando. Me acarició la espalda esperando a que me relajara y así poder llorar, cosa que sí hice, lloré como cuando mi madre falleció y ahora perdiendo a lo único que me quedaba en la vida, mi padre.

- Lo siento, en verdad.- Hizo más fuerte su abrazo y yo me apreté más a él.

No sabia que haría, no sabia que iba a pasar con la compañía de mi padre, no sabia que iba a pasar con las personas que trabajaban allí, no sabia que hacer con los empleados, no sabia que hacer con Seung.

- Disculpa, te ensucie.- Me separe de él para dejar de ensuciar su camisa.

- No sé preocupe, señorito.- "No me digas así, joder", pensé. "Dime por mi nombre, por favor", volví a pensar.

Sonreí forzado, y sentí de nuevo algo caliente tomar mi mano, mire hacia abajo en donde prevenía el calor y pude ver que estaba la mano de Seung tomando mi mano , otra vez. Volví a dirigir mi vista a él y tenia su mirada hacia delante donde había salido el doctor. 


Un nuevo comienzo ↭ gtop [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora