Un nuevo comienzo ↭ gtop [PAUSADA]

CAPÍTULO 15

POV GD.

En un mes todo puede cambiar, cualquier cosa puede suceder.

Pero no puedo creer que él este saliendo con el feo de Dae...Inaceptable.

Maldito, como lo odio, él puede tener a Seung en sus brazos y yo no, todo por que me iré a casar. Cada vez llamaba su atención pero no lograba que me viera, trataba mal a Dae a propósito para que él fuera a mi habitación o a mi oficina a reclamarme pero no llegaba. 

Estaba perdido, todo lo que pasó con Seung estaba perdido....

POV TOP.

Estaba todo bien con Dae, ahora era más protector que antes, era más celoso, más mimoso, más tierno, era todo con Dae y eso me gustaba.

No estaba enamorado pero sentía algo por Dae, eso lo sé. 

Cada vez que veía a Dae triste, le preguntaba que le pasaba siempre obtenía la mismas respuestas, que era el jefe quien lo trataba mal o que lo hacía trabajar horas de más...

Ji se estaba pasando, pero no le iría a reclamar, eso era darle el gusto. 

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Estaba comenzando mi recorrido cuando escucho un llanto proveniente del pasillo, me comencé a acercar para ver quien era y me di cuenta de que era Ji con Dae, quien estaba aguantándose las ganas de llorar, mientras Ji estaba mirándolo cruzados de brazos viendo su entrecejo demostrando que estaba enojado. 

- Eres un inútil, no puedes hacer nada bien.- Le decía bruscamente.

- Lo...lo siento señor, no sucederá de nuevo.- Dijo Dae mientras trataba de regular su voz por el llanto que tenía oculto, mirando hacía el piso. 

- Nada de lo siento, inútil.- Fue eso que rebalso la copa, fue eso que me hizo ir y tomar de la mano a Dae y poniéndome frente a Ji mirándolo directo a sus ojos con el ceño fruncido retándolo a que me mirase de la misma forma. 

- ¿Que le decías, Ji?.- Pregunté enfadado, y apretando la mano libre que tenia.

- Le...le decía que era un inútil.- Me respondió nervioso, aún sin desviar la mirada.

- ¿Porqué?.- Sentencié.

- Por que...por que...- Su respuesta quedo en el aire, ya qué lo interrumpí.

- Eres un maldito imbécil.- Dije haciendo que me mirara sorprendido y  algo rara. No pude descifrar esa mirada.  

-  Cómo te atreves a llamarme así.- Hablo una vez ya pasada su sorpresa.

- Soy su novio y tengo el derecho.- Ahora lo enfrente acercándome aún mirando directo a sus ojos, esos hermosos ojos que tanto sigo amando. 

- Lo sé, lo sé perfectamente.- Él también se acerco y me miró a la ojos reflejando ahora dolor en ellos. 

- Si lo sabes deja de molestarlo.- Le dije a lo que me miro apenado, sentí un dolor en mi pecho por esa mirada.

- ajam.- Escuche carraspear a alguien, era Dae. 

- ¿Que pasa, cariño?.- Pregunté mientras volteé a mirarlo con una sonrisa. 

- Vayámonos, no quiero que tengas problemas.- Dijo con sus mejillas sonrojadas debido a como lo había llamado.- Y no me llames así delante del jefe...

- Bueno, eso es todo.- Dije una vez  que hable con Dae para mirar a Ji quien tenia la mirada de odio hacía Dae.

Bobo. Pensé.

- Sí.- Dijo mirando ahora hacía el piso.

Le dí la espalda a Ji comenzando a caminar aún tomado de la mano con la de Dae. No volteé a verlo sabía que estaría mirándonos.

Seguí caminando hasta llegar a un punto donde no era posible que nos vieran y lo abrace siendo correspondido de inmediato, me aleje un poco de él logrando rozar nuestros labios para después juntar nuestras bocas en un beso lento y tierno.

No podía ser malo con Dae algo no me lo permitía, me separé de él ahora mirando sus ojos, tan profundos y delicados.

Solté su mano sonriendo y él me miró también sonriendo, le quiero mucho, lo aprecio mucho, pero como amigo, se que lo que hago esta mal, pero es que tengo que olvidar.

- Deberías de volver al trabajo.- Le susurre tomando sus manos y besándolas.

- Pero quiero estar contigo.- Hizo un puchero adorable, me reí suavemente a cambio recibí un tierno golpe en mi brazo derecho.

- Tonto, vuelve al trabajo.- Ordene un tanto suave para no sonar brusco.

- Bueno.- De nuevo ese puchero adorable, volví a reírme pero ahora el me acompañó.

- Te amo.- Dijo él mirándome a los ojos, en los cuales vi sinceridad y amor puro, pero no le podía  corresponder.

- Dae...-  Lo mire con un poco de pena.

- Lo siento, no volveré a decirlo.- Continuo hablando.

- No lo hagas, sigue diciéndome cuanto me amas.- Le dije acercándome a su cara para quedar un tanto cerca.

- En serio?.- Me pregunto sonrojado. 

- Sí, no dejes de hacerlo.- Respondí dejando ya de lado los sentimientos que siento o sentía hacia Ji.

- Mejor voy a continuar mi trabajo.- Dicho esto se fue sonrojado hacía la cocina. 

- Sera mejor que continué con mi trabajo igual.- Comente para mi mismo, dejando botar simples suspiros de cansancio.

POV GD.

El maldito de Seung defendiendo a su novio me llena de asco, repulsión, dolor de estomago y otras cosas asquerosas. Cómo osa de tratarme así, enfrente de ese espanta cuco, lo odio con todo mi ser.

- Mejor voy a salir.- Me fui a mi cuarto a pasos fuertes y decididos, llegue a ésta comenzando a escoger ropa dejándola en la cama, una vez escogida la mejor prenda, me fui al baño para darme una ducha. Me saque la ropa metiéndome dentro de la ducha abriendo la regadera dejando que el agua cayera sobre mi cuerpo. En el momento en que el agua toca mi cuerpo olvido todos los problemas que tenía en mi cabeza, olvido la empresa, olvido mi matrimonio, olvido a todo lo que me estorba, pero lo que no puedo olvidar es a Seung. 

Maldito, ¿Qué haz hecho conmigo?. Pensé molesto pero a la vez con mi corazón agitado.

Termine mi ducha y salí de ahí enrollando una toalla en mi delgada cintura, camine hasta llegar a los pies de mi cama y comencé a ponerme la ropa que escogí para salir. Una vez que termine, me fui a ver a un espejo grande que tengo y me vi en el, sonreí de lado ahora recogiendo mi celular y mis llaves del auto. 

Baje tratando de no hacer tanto ruido para no llamar la atención de mis empleados. Al llegar al garaje apreté el botón que tiene mi llave y dejó escuchar una bocina, camine hasta la puerta central del garaje y apreté un botón para que esté se abriera,luego volví al auto abriendo la puerta del piloto sentándome cómodo en éste. 

- Bien, vamos a pasarla bien esta noche.- Dije decidido tomando con una mano el volante del auto.