Capitulo 65

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Con Thanos y la mayor parte de la Orden Negra muertos, Ebony Maw solo podía tomar una acción sensata... y rápidamente ordenó la retirada total de todas sus tropas sobrevivientes. Las fuerzas asgardianas, wakandianas y de Kamar Taj masacraron a la fuerza alienígena hostil por cientos mientras intentaban retroceder hacia las pocas naves Q que quedaban. Thor y Pantera Negra lideraron el nuevo ataque, con algunos de los otros Vengadores brindando su ayuda también.

Pero Spider-Man no era uno de ellos, ya que las heridas en su torso estaban siendo curadas por su novia, la Bruja Escarlata.

—¿Cómo te sientes? —preguntó Wanda, mirándolo a los ojos color avellana.

Peter le dedicó una sonrisa cansada. "Adolorido como el demonio y hambriento, pero por lo demás bien. ¿Y tú?"

"Yo también tengo hambre, lo cual tiene sentido. Al parecer, no he comido nada en cuatro años".

Los dos Vengadores más jóvenes se rieron juntos antes de que ella continuara curando sus heridas. El área alrededor del edificio destruido se había convertido en un hospital de campaña improvisado. Había muchos asgardianos, wakandianos y estudiantes de las artes místicas que estaban recibiendo tratamiento por las diversas heridas que sufrieron en la batalla. Los curanderos de Nueva Asgard estaban ocupados distribuyendo pociones medicinales o vendando heridas sangrantes mientras algunos de los hechiceros de Kamar Taj lanzaban hechizos curativos para ayudar a aliviar las heridas de los blásters.

Hilde estaba atendiendo a María no muy lejos de allí. El último bombardeo orbital le había herido gravemente el brazo derecho. Si Hela no hubiera logrado alejarla del frente a tiempo... podría haber perdido el uso de su extremidad de forma permanente.

Pepper estaba al lado de su marido, ayudándolo a mantenerse firme mientras se levantaba lentamente. Tony sufrió mucho daño en la cabeza durante esta batalla y era probable que sufriera los efectos de una fuerte conmoción cerebral durante las próximas semanas.

Aún así, era mejor que él estuviera muerto... lo último que Peter quería era que Morgan perdiera a su padre a una edad tan joven.

Un poco más adelante en el campo estaba Bucky, ayudando a su amigo más antiguo a caminar hacia los médicos. El Capitán América había sufrido más heridas que Iron Man, pero eran un poco menos graves. Tanto su antebrazo izquierdo como algunas de sus costillas estaban gravemente fracturadas. Lo único que evitaba que los huesos de su antebrazo se desviaran demasiado de su lugar era la correa de cuero de su escudo destruido. Ese golpe que había recibido en el costado de la cara de Thanos casi le rompió la mandíbula también. Si bien, afortunadamente, no estaba rota, todavía le dolía mucho mover la boca.

—Listo, todo listo —dijo la Bruja Escarlata, y el resplandor rojo de energía en sus manos se desvaneció antes de que las retirara—. He curado las fracturas en tu pecho. Es posible que sientas algunos dolores durante los próximos días, pero estarás bien. Tómatelo con calma por ahora.

—No te preocupes, lo haré —murmuró Spidey mientras la rodeaba con el brazo—. Creo que nos hemos ganado un buen y largo descanso después de todo esto.

Wanda apoyó la cabeza sobre el hombro de Peter con una sonrisa, saboreando la comodidad de su cálida presencia. No pasó mucho tiempo antes de que Black Widow y Jessica se acercaran a ellos por un costado... llevando a Carol inconsciente en sus brazos.

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