౨ৎ⠀ׄ⠀. 𝐶𝑎𝑡𝑎𝑟𝑠𝑖𝑠 - 𝐷𝑎𝑚𝑖𝑎𝑛𝑦𝑎 𝐴𝑈

Secreto

Damian entró a la biblioteca sigilosamente, cuidando que Anya no se diera cuenta que la había seguido, al entrar la buscó con la mirada y notó su ahora brillante cabellera rosa caminando entre los estantes de la parte de atrás de la biblioteca, él se metió en un pasillo que se encontraba a lado del que ella había ido y, viendo entre los libros que los separaban observó cada uno de sus movimientos.

Se veía yan concentrada alternando su mirada entre el papel que le había entregado el profesor anteriormente y en los libros, buscando los que ella necesitaba, sin embargo no podía encontrar ninguno.

"Ella no sabe que debe sacar una ficha para los libros... ¿sería buena manera para acercarme a ella?" pensó Damian, pero antes de que actuara, notó como un estudiante ya se lo estaba diciendo.

"-Debes ir con la bibliotecaria para que te de una ficha, llenala con tus datos y ella te indicará dónde se encuentran.

-Oh, muchas gracias"

Damian vio como ella se iba nuevamente a la entrada ignorando que aquel chico que quería ayudarla se quedó como idiota murmurando unas palabras para invitarla a salir.

"-¡Rayos! he perdido mi oportunidad, es tan linda..."

Escuchó decir al chico mientras él se dirigía a la salida. 

"¿Linda?", Se quedó pensando un rato recordando a sus amigos unos minutos antes, peleando para salir con ella porque es... ¿linda?. Se quedó quieto en medio de aquel pasillo con la mirada gacha, recordó esa ocasión que la encontró en su cama, desde ahí le había parecido linda, a pesar de su aspecto descuidado, tenía su pelo con grandes rizos en las puntas y su color peculiar, no pudo observar bien su cara pero vagamente recordó sus ojos verdes, grandes y con la mirada de temor. "No está bien..." inmediatamente pensó al recordar que la chica estaba en un peso bajo y su piel algo maltratada, y aun así no le quitaba para nada lo bonita.

Regresó a la realidad cuando escuchó pasos acercándosa, era Anya otra vez, ahora con una ficha y lista para buscarlos, tomó dos libros, buscando el tercero se dio cuenta de que la altura en la que se encontraba era demasiado para ella. 

-Agh, demonios- se quejó mientras mirada enojada el libro, inútilmente se puso de puntitas y estiró lo más que pudo su brazo libre, sin poder conseguir nada.

Damian miraba la escena divertido, era realmente gracioso ver como sus raros sombreritos que llevaba en el pelo se alzaban con fuerza, y después ella empezó a dar brinquitos.

-Mgh... aah... - seguía quejandose- ngh... ya... casi....- jadeó mientras aún trataba de alcanzarlo.

Entonces Damian escuchó algunas risas un poco más delante de ellos, en la zona de las mesas, dos imbéciles riendo de los sonidos que hacía Anya y viendo como su falda se levantaba mientras saltaba. Damian gruñó y enfadado (sin pensar), pasó al otro pasillo para quedar junto a Anya.