Noble Intentions/ L.S [Traducción] (ABO)

Capítulo 10

—¿Cómo voy a saber si tú y yo vamos a funcionar? —se pregunta Louis.— Hasta que me dejes... —se detiene y arquea una ceja antes de decirlo.— Probar un poco.

Harry necesita un minuto.

Solo se da cuenta de que está apoyado contra una pared cuando Louis se ríe de él, con las piernas un poco débiles mientras hace un esfuerzo por mantenerse derecho.

Ese tipo de lenguaje sugerente hace más difícil pensar.

Se aclara la garganta un par de veces y le devuelve la sonrisa complacida a Louis.

—Recibirás más que una pequeña probada.— dice finalmente.

Los ojos de Louis inmediatamente brillan con esperanza y sorpresa.

Nunca pensó que sería tan fácil.

—¿En serio?— susurra, acercándose para encontrar el toque de Harry.

—En serio —responde Harry, dejando que Louis presione sus cuerpos juntos y se estire para besarlo.— En nuestra noche de bodas —añade, logrando besarle los labios antes de que Louis lo entienda.

Al final lo hace.

—Eres lo peor.— incluso gruñe, con una sonrisa incrédula torciendo su linda boca.

—Lo sé —Harry hace pucheros, sin dejarlo escapar de su agarre.

Eso le permite a Louis morderse el labio inferior, fuerte y malvadamente, hasta que la ira es inevitablemente reemplazada por más necesidad.

Harry sabía que esto iba a pasar.

Ya ha memorizado los patrones de Louis.

Se vuelve frío y distante para atraerlo. Luego suave y ansioso de atención.

Después de eso, su lado racional vuelve a aparecer. Es entonces cuando empieza a desafiarlo, incluso a alejarlo, rogando en secreto por una certeza. Entonces Harry lo tranquiliza, le recuerda cuánto lo ama, que está más que dispuesto a dar un vuelco a su vida para estar con él.

Eso hace que Louis se sienta un poco más seguro, tal vez un poco más imprudente.

Así que normalmente vuelve a...

—Solo quiero que me pongas las manos encima —cruzar la línea.— No me hagas rogarte —lloriquea, cerrando los ojos mientras busca otro beso.— Porque lo haré.

Claro, Harry sabe cómo cambian las estaciones, pero eso no hace que sea más fácil resistirse a él.

—Louis —siseó, envolviendo su mano alrededor de la mandíbula del Príncipe antes de que sus bocas pudieran conectarse.— No te atrevas.

La forma en que Louis se ríe, enfurecido pero dulce, hace que Harry lo abrace más cerca.

—Será mejor que empieces a tomarme en serio —le informa el Príncipe, con una voz demasiado dulce para esas amenazas.— Porque podría caer de rodillas cualquier día.

Harry apenas logra reprimir su gruñido.

—No harás eso.— afirma, usando ambas manos para agarrar la cara de Louis ahora.

El Príncipe parpadea lentamente y abre los ojos, entrecerrándolos inmediatamente con ira.

—Pero lo haré.— argumenta.

El pecho de Harry se agita y la sangre fluye hacia lugares equivocados.

—No me mires así —advierte, perdiendo el hilo de la conversación en medio de la cálida mirada de Louis.— Cállate.