Capítulo 19

172 2 0
                                    

Al día siguiente, Camille despertó con mucho dolor de cabeza y mareos. Tomó un analgésico y un vaso de agua con azúcar para estabilizar, al darse la vuelta hacia el sofá se encontró con lo que menos ella esperaba el día de hoy.

 Tomó un analgésico y un vaso de agua con azúcar para estabilizar, al darse la vuelta hacia el sofá se encontró con lo que menos ella esperaba el día de hoy

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Qué haces aquí?-preguntó Camille-¿Cómo entraste?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Qué haces aquí?-preguntó Camille-¿Cómo entraste?

-Buenos días para ti también preciosa-respondió Charles arrogante-Te ves divina, como para quitártelo y comerte entera.

-Te repito ¿Qué haces aquí? ¿Cómo entraste?

-Cálmate, te salen arrugas-respondió Charles pedante-Recuerda que tengo una llave, así como tú tiene una del mío-dijo dejando el desayuno sobre la mesa.

-Yo no tengo ninguna llave tuya-pero Charles señaló hacia el pedestal de llaves y Camille vio que Charles le había sacado una copia-Ok ¿Qué quieres?

-No quiero nada, te traje el desayuno-dijo dejando el envase sobre la mesa de la cocina-Son pancakes con chocolate y oreo, los amas.

-No gracias, no quiero nada tuyo...

-Camille anda, quiero que me entiendas.

-¿Así como tú me entendiste a mí? Claro, obvio-rodó los ojos.

-Cam, entiéndeme... soy muy joven y tu igual.

-Si, pero esa vez no te importó correrte dentro-expresó con ira-¿Qué hubiese pasado si ese bebé nacía?

-No lo sé, imagino que buscarías al padre.

-Si, pero si no te recordaba ¿Cómo?-hablo con firmeza-Ahora que estamos relativamente bien, tienes miedo... irónico.

-No es igual...

-Si lo es Charles, es eso no te preocupes no lo vamos a tener igual-mintió.

-¿Si te sientes bien?

-Solo un poco mareada, pero es normal.

-Me quedaré, evitaré que te ocurra algo.

-No gracias, me sé cuidar sola-dijo pero al dar un paso tambaleó resbalando para casi caer con la cabeza en el suelo, lo cual Charles evito.

DULCE PECADO (Charles Leclerc y Carlos Sainz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora