Severus Snape

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Bot: 🏫| Teacher's pet

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Severus pov:

Bernadette Sallow, mi maldita perdición.
Llevo casado más de cuatro años con mi esposa, pero dejé de amarla hace años. Desde que esa hermosa estudiante se cruzó por mi camino.

Siempre fue destacable, no era únicamente en mis clases. Eso la hacía tener mis respetos, y no es fácil ganarlos.

Siempre pensé que era algo infame y asqueroso las relaciones con diferencia de edad, pero con esa chica. Esas dos décadas parecían nada.

No pensé en conquistarla ni mucho menos, estoy casado. No es que me importe arruinar mi matrimonio, simplemente no pensé que llegaría a tanto.

Siempre se sentaba frente a mí, tenía esa mirada altanera, como si creyera que era mejor que todos en el salón, lo cual no puedo decir que es mentira, pero al principio me resultaba repulsivo, pero con el tiempo comencé a adorar esa mirada gélida con aires de superioridad.

Varias veces la encontré mirándome, pero no de esa manera que un estudiante vería a un maestro.

A veces llegaba con faldas realmente cortas a mi clase, varios chicos la miraban, y era evidente que ella disfrutaba esa atención. Pero sus ojos sólo estaban en una persona, en mí.

Llegaba un punto en el que no podía soportarlo. Pero mi punto de quiebre fue ese día miércoles, ese miércoles que no se si bendecir o maldecir.

Llegó a mi clase con esas faldas cortas, pero ésta vez también llevaba una blusa apretada, casi transparente, lo que me hace intuir que era una vieja.

Cuando llegó estaba cubierta con su túnica, pero apenas se sentó frente a mí pude verla. Nunca se sentaba con nadie más, no habló con nadie más, sólo me miraba a mí.

Fue patético y humillante que con mis 36 años haya tenido que dar una clase con una erección que me causó la vista cubierta de unos pechos, ya no soy un adolescente. Y eso ya no pasaba con mi esposa, lo que me hacía saber que estaba más en la mierda.

No sé si alguien lo notó, pero se que ella si lo hizo. No me puse de pie en ningún momento, di la clase desde mi escritorio.

Cuando acabé la eterna clase esperé a que todos se fueran para arreglar mi problema. Pero en lugar de eso, todos salieron menos ella.

Se quitó su túnica, y se acercó a mi de manera arrogante. Desde ese día comenzó mi martirio y salvación.

Comencé una relación clandestina con ella. Sabía que era asqueroso, sabía que era inmoral, sabía que era ilegal. Pero no pude detenerme.

Cumplidos los seis meses comenzaron las molestias. Ella sabía perfectamente de mi matrimonio, y le desagradaba eso. No le gustaba no poder pasar la noche con ella, pues tenía que ir a mi 'hogar', pero desde que comencé a salir con ella, mi único hogar era entre sus pechos.

Tal vez suene como que la uso por su cuerpo. Y no puedo negar que me hubiera fascinado que sólo fuera por eso, pero no. Esa mocosa me tenía a sus pies.

Le dije varias veces que estábamos comenzando los trámites de divorcio, que sólo tenía que esperar. Han pasado cuatro meses desde que le dije eso, y puedo llegar a entender que se sienta impaciente.

Hoy estaba en mi oficina, terminando con unos pergaminos cuando mi puerta sonó.

- Pasa. -

Sabía perfectamente que era ella, tenía esa forma peculiar de tocar la puerta que reconozco desde la primera vez que tocó a mi puerta.

Bernadette se veía nada más que molesta y desilusionada, sabía que estaba aquí por una detención. Pero supuse que no era nada grave, no era la primera vez que tomaba un castigo sólo para verme.

- Severus... - Llamó a mi nombre con ese bello acento suyo, que me hacía querer despertarme todos los días con ella hablando con su hipnotizante voz.

- Dime, Bernadette. -

- Llevo esperando ya cuatro meses, y no hay ningún avance con tu supuesto divorcio. Ya estoy cansada. -

Cruzó sus brazos por sobre su pecho, y soltó un suspiro desilusionado.

- Por favor, querida.. Ya hemos hablado de ésto, estoy esperando los papeles. Pero ya están tramitados, sólo tienes que esperar un poco. -

La tomé por la muñeca, y la atraje a mi regazo. Pasé mis manos por su cintura, y apoyé su cabeza en mi pecho.

- Eso me lo dijiste ya, no quiero seguir esperando. En dos semanas cumplo mis diecisiete, ya seré mayor de edad. -

Y soltó un nuevo suspiro, y se acomodó en mi pecho como un pequeño gato.

- Lo sé, lo sé. Ya serás mayor de edad, y quieres que tengamos una relación más normal. Ya me lo has dicho, querida. Sólo esperame, ¿Si? -

Ella asintió un poco, aunque sabía que no estaba segura de ésto. Pasé mi mano libre por su mejilla, y besé su frente.

- Está bien, seguiré esperando. -

Hizo un enfoque en el 'seguiré', y sólo puse los ojos en blanco ante su infantilidad.

- Eres mi maldita perdición, Bernadette. Te prometo que pronto seré sólo tuyo, esperame un tiempo más y lo verás. -

Sus pálidas mejillas pasaron a un color rosa cuando terminé de hablar, y ella besó mi mejilla.

- Yo ya soy tuya, sólo tengo que esperarte... Está bien, lo haré. -

- Te amo, Bernadette. -

- Te amo, Severus. -

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Me digne a subir ésto, por fin.
Disfruten 🐻‍❄️🪴

Datitos sobre mi niña: Bernadette Sallow

Es hija única, pero nunca tuvo unas figuras paternas reales, por eso no le gustan los niños pero se puede llegar a comportar de manera maternal. Es sangre pura de una familia extremadamente fanática de Voldemort. Es capitana del equipo de Quidditch de Ravenclaw. Es conocida por ser una fuckgirl, por decirlo de alguna manera, pero sólo con mujeres, pues tiene un gusto muy particular en hombres. MUY particular (mayores, amargados, de pelo sucio y que no la tratan bien pero tampoco mal)

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⏰ Última actualización: Jul 16 ⏰

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