Dejar que las cosas fluyeran nunca había sido lo suyo. Constantemente pecaba obsesionándose con las personas, especialmente cuando no recibía algo a cambio.
Su corazón, más grande que su propio cuerpo, se retorcía de ansiedad al pensar en recibir una respuestas.
Sus emociones se alborotaban al recibir cualquier estímulo, hasta el más insignificante.
¿No te recuerda a alguien?
Jake paseaba tranquilamente por el bosque. Había decidido tomar una caminata mañanera para despejar su mente, algo que siempre le funcionaba cuando era adolescente.
Oh... su adolescencia. Recuerda haber hecho tantas estupideces en ese tiempo, tantos cambios. Seguro tenía alguna foto por ahí, una que se haya salvado de la papelera.
Recuerda haber cambiado el color de su cabello millones de veces, pasando de colores exóticos a más comunes constantemente, con la excusa de encontrarse a sí mismo en alguno de esos colores.
Recuerda la desaprobación de sus padres y las burlas de su hermano, los regaños por gastar su dinero en tantos tintes distintos para terminar cambiándolo a la semana por mero aburrimiento. Pero eso, de alguna forma, marcó su vida.
Jake había sido una persona de muchos cambios, tanto físicos como personales. Especialmente físicos, pues era algo que él tenía bajo completo control, ¿no?
Estaba tan perdido en sus pensamientos, tantas cosas en las que nunca se había puesto realmente a pensar. ¿Tan desordenada estaba su mente?
Sus pensamientos pararon abruptamente cuando dejó de reconocer el lugar en el que estaba. Nunca se había internado tan profundamente en el bosque. Se veía extraño, con un aire de paz que era hasta sofocante.
Tenía que volver al campamento para desayunar junto a Lake y Tom, por lo que, sin enredarse más, decidió volver sobre sus pasos. Después tendría tiempo de resolver sus propios misterios.
Sentados juntos en unos troncos mientras desayunaban en una profunda paz, Jake se encontraba en medio de ambos, sin una sola sospecha de lo que pasaría en aquel desafío.
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•| enredo decadente |•
Cerita PendekLas mentiras, aunque puedan proporcionar un alivio temporal, carecen de la solidez necesaria para perdurar. Tarde o temprano, la verdad sale a la luz, ya sea por incongruencias, errores o la simple revelación de la cruda verdad.❗❗ Las mentiras son d...