Susurros de amor en la brisa| SHIROHIGE Y TÚ.

9. LO SIENTO

a Mackeila la despertó el peso de un cuerpo sentándose en los pies de su cama, era el, el hombre que hace unas horas la había hecho llorar, estaba ahí la estaba mirando despertarse con su almuerzo en sus manos
- Te traje el almuerzo, niña-
¿Niña? que mierda era eso
-no tengo hambre- dijo de nuevo con sus ojos cristalizados, porque de repente estaba actuando como un imbécil, acaso ha sido así siempre?
-¿estas molesta? -
-¿deberia estarlo? -
- Bueno, creo que no te gusto el chiste que te hice en la mañana-
- no fue gracioso, Newgate, gracias por el almuerzo, pero no quiero, vete por favor, quiero dormir-
- pasaste una mala noche que quieres dormir tanto? apenas vi que estabas durmiendo te deje en la cama porque quería que duermieras bien-
- tal vez deberías dejar de fingir que yo te importó y ocuparte en cosas que te importen de verdad- dijo cubriéndose con la manta
-oye, de que mierda hablas? -
- ¿porque de repente actúas como un imbécil conmigo?, en unas horas no volverás a verme, Newgate, al menos pudiste haber fingido que yo te agradaba estas horas, estas siendo cruel-
- Mackeila, te deje dormir en mi cama y me quedé a dormir en la silla, te traje almuerzo, pelie con Román para salvarte a ti y a tu país, estamos camino a cumplir tu sueño, ¿de verdad eso es ser un imbécil para ti, cual es tu problema..? - estaba molesto, la pelinegra estaba avergonzada, el tenía razón, había hecho más por ella que nadie en su vida

- Newgate, yo... -

- tal vez tienes razón y lo siento, fue un chiste cruel, no debi haberlo hecho, pero espero que eso no borre todo lo demás, eres especial y prometí cuidarte y eso implica también tu corazón-

- te perdonó y espero que tu También me puedas perdonar, creeme que jamás olvidaré lo que has hecho por mi- el acerco su mano a la cara de Mack y le regalo una caricia tierna

decidieron hacer las pases, ambos fueron al comedor a comer con todos los demás.

pasaron la tarde juntos, haciendo bromas y hablando de la vida estaban felices de estar juntos, no sabían si volverían a verse, tampoco querían hablar acerca del tema porque ambos temían la respuesta de un "jamás" así que trataban de ignorar el hecho de que probablemente esa era su última interacción antes de llegar a Sabaody.

-Papá, ya veo Sabaody- dijo uno de los piratas de Shirohige, ambos quedaron en silencio y tensos, Shirohige miro a Mackeila y ella estaba mirando a un punto fijo en silencio
- es tarde ya, no creo que debamos ir a molestar a Rayleigh, quedemonos en el barco esta noche y mañana entramos al pueblo, avisale a tus hermanos- el hombre se fue y Mackeila le regalo una sonrisa alentadora, ella quería una noche a su lado y el la necesitaba.

habían pasado las horas y ya habían anclado al Moby Dick en el puerto, se quedarían ahí hasta la mañana y la familia tenía una sorpresa de despedida para la chica.

-¡Sorpresa! - dijeron los piratas cuando revelaron que habían preparado un banquete por el nuevo destino de Mackeila

-Dios mío!, no tenían que molestarse chicos- dijo Mackeila abrazando a Tatch y a los responsables de la comida del barco

- no es una molestia, es un honor, ahora celebremos! -

todos cenaron y bebieron sake juntos, ahora si que Mackeila era parte de esa familia también.

- puede concederme esta pieza, Morgan Mackeila? - dijo el viejo extendiendo su mano para bailar con la joven

- no hay nada que quiera más ahora, Edward Newgate- dijo ella tomando su mano

bailaron durante una hora, hasta que quedaron exhaustos, se sentaron de nuevo, reían de las bromas malas y chistes tontos del otro, ambos hacían su esfuerzo para hacer reír al otro, pero esa felicidad fue cortada de golpe

- y volveremos a verte, Mackeila? - pregunto Marco brindándole una Copa de vino y una sonrisa

la pregunta le cayó como un balde de agua fría no sólo a ella, sino también a Newgate

-yo... emm- ella miro al mayor que la veía con un poco angustia y tristeza - yo espero que si, espero volver a verlos, son mis piratas favoritos-

-espero que si, además hemos bebido Sake juntos, eso significa que ahora somos familia- dijo Jozu algo ebrio y sonriente

-yo también espero que si- dijo en voz baja Mackeila

ya habían pasado horas del banquete y todos estaban agotados así que ya era hora de dormir
Mackeila tenía que ayudar a Newgate con su tratamiento porque Marco ya estaba muy ebrio
estaba en su habitación ayudándolo con el tema, cuando había terminado el acarició la mejilla de la chica y esta lo miro finamente con sus ojos brillantes y dulces, la chica iba a matar de un infarto al viejo

- de verdad volveré a verte? - dijo el triste
- eso depende de ti, yo me quedaré aquí y tu eres el capitán, vas a venir a verme? -
-por mi ni siquiera te dejaría aquí- dijo el acercándose a la chica mirando sus labios
-entonces en donde me dejarías? - dijo ella acercándose también con una voz sensual
- Te haría mi mujer y jamás tendrías que irte de mi lado- y fue cuando la beso finalmente, sus labios eran dulces y suaves
el tacto de El era delicado y sutil, sus besos eran como tocar el cielo, sus lenguas chocaban y el la sento en sus piernas para que ella quedará a la altura del semental hombre, la atrapó entre sus brazos, la besaba con Pasión, hace mucho que quería saber cómo sabían los labios de la chica, y ella estaba loca por ser besada por el

ambos se separaron por la falta de aire, pero lo retomaron al poco tiempo, el le acariciaba la espalda y el cabello y ella tenia un brazo al rededor de su cuello y su mano acariciando la mejilla del hombre al que sabía que le pertenecería siempre a partir de ahora

- duerme conmigo hoy, por favor, no podría dormir sin ti a mi lado- dijo ella mirando al hombre a los ojos
- no quiero dormir sin ti, me moriría de pena princesa- el le sonrió y le. guiño el ojo, haciendo que ella mordiera su labio y lo besara de nuevo

durmieron juntos, el la abrazaba por la espalda y ella abrazaba sus brazos