8. El expediente.

16 4 0
                                    

¡¡¡Que día tan agitado!!!

Esto es más difícil de lo que pensé.

Este chico simplemente no se inmuta.

¡¡Que frustrante!!

Furica voy a la sala de archivos, necesito el expediente de Dylan para poder analizar mejor el caso y buscar soluciones. Abro las puertas bruscamente y camino hacia el estante, Gabriel me ve y me sonríe.

— ¿Todo bien?

— Todo increíble — forzo una sonrisa y tomo el expediente de mi protegido.

— Te ves tensa — no sé si  es genuino pero  escucho el comentario sarcástico.

— Es un caso muy delicado y difícil, entiendela Gabriel — Nathaly aparece cargando una pila de carpetas — siéntate cielo y enfócate en tu trabajo — me señala el escritorio.

Inmediatamente hago lo que me ordenan  abriendo la carpeta tratando de conseguir algún tipo de pista indicios para saber por dónde comenzar.

Pero no hay nada.

Absolutamente nada.

Solo hay análisis de su ateísmo, su depresión, que trata de llenar vacíos con cosas vanales ...

Pero nada que describa su personalidad por completo. El intento escabullirme en su vida para  cambiarla a mejor no está funcionando, apenas lo he visto una vez y ya estoy totalmente estresada como para seguir con esto.

No voy a rendirme.

No puedo hacerlo.

No ahora que acepte y que sé que es un trabajo influyente, más allá de la condecoración, más allá del ascenso no puedo permitirme caer, no va acorde a mis principios.

— ¿Estás bien?

Key aparece en mi campo de visión está justo a mi lado viendo también la carpeta con la información de Dylan. Una mueca nace en sus labios de repente y yo recuerdo lo que me confesó el día anterior, el tema de que se sentía culpable creyendo que el aprendiz que había seleccionado era el mejor candidato para hacer esté trabajo, que se veía capacitado.

— Creí que podía funcionar, mi instinto me dijo que posiblemente el podría hacerlo por su desempeño, y ... Solamente cayó, flaqueó tan fácil que me sentí derrotado yo también, me sentí frustrado ... .

Aunque él no tenía la culpa de ese error, fue inevitable que no se sintiera decepcionado de si mismo, cualquiera diría que es cosa de orgullo pero viniendo de Key es cosa de responsabilidad.

— Estresada — suelto aire — pero puedo sobrellevarlo y ¿tú? ¿Bien? — lo miro preocupada.

— Aún tengo estabilidad y eso es lo que importa — arrastra una silla y se sienta a mi lado — ¿Te ayudo? No por nada escuché toda la historia de aquel aprendiz sobre Dylan, creo que hay algunos puntos los cuales nos pueden funcionar.

Asiento y me dejó ayudar por el chico a mi lado es increíble que siempre esté allí cada que necesito ayuda o alguna orientación.

— No te acostumbres

— ¿De qué hablas?

— A que siempre te esté salvando todo y de todos.

El recuerdo mínimo del día anterior me llega mientras veo el perfil de mi superior y casi puedo sonreír con ternura ya que está haciendo un puchero de concentración con sus abultados labios. Su cabello azabache le cae desordenado en la frente y su análisis mientras lee el expediente es impresionante.

||Celestials||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora