Confundir a Un Magnate con un gigoló

Capitulo 32

Inmediatamente, Charlotte sacó su teléfono y trató de buscar el contacto “Gigolo endeudado”. Sin embargo, se dio cuenta de que había borrado su número.

Ella revisó sus mensajes de texto, pero cuando finalmente encontró el número, el auto que estaba a su lado ya había comenzado a toda velocidad.

Soltó un suspiro y solo pudo consolarse. Olvídalo. Cortamos nuestros lazos, así que ¿por qué me importa?

Esa noche, soñó con muchas cosas. En un momento, soñaba con Zachary y, al siguiente, soñaba con el “Gigoló endeudado”. Luego, comenzó a soñar con el joven…

Ella no tenía idea de quién era quién.

Tal vez porque estaba cansada, durmió demasiado. Solo se despertó cuando la señora Berry la insistió: —Tus hijos ya se subieron al autobús escolar. Si no te levantas, llegarás tarde.

Al instante, Charlotte se levantó de la cama y se cepilló los dientes. Sin lavarse la cara, salió corriendo de su habitación.

Cuando llegó a la puerta, se dio la vuelta y le entregó el dinero de su bolso a la señora Berry. —Señora Berry, este es el dinero que gané anoche.

—¿Cómo ganó tanto dinero anoche? Señorita, ¿por qué corre? Desayune antes de irse…— gritó preocupada la señora Berry mientras perseguía a Charlotte con una bola de arroz en la mano. Sin embargo, esta última ya había entrado en el ascensor.

Al mirar el dinero en su palma, la señora Berry se preocupó.

Unos momentos después, Charlotte intentó por todos los medios meterse en el tren. Cuando por fin llegó a su parada, corrió como loca a su oficina.

Cuando llegó a su nivel, estaba cubierta de sudor.

—¿Qué te pasa? Al señor Nacht no le gustan los empleados que no cuidan su imagen. —la reprendió Lucy. —Ve rápido al baño y lávate.

-Esta bien. —Charlotte fue al baño a lavarse la cara y arreglarse. Estaba a punto de irse cuando escuchó a dos compañeras susurrar.

—¿Sabías que alguien llamada Charlotte trabajaba en el nivel 68? Escuché que ella movió algunos hilos.

—¿Quién la respalda?

—No estoy segura, pero alguien del nivel 13 me dijo que algo le había pasado en un bar y que el señor Nacht la había salvado. Creo que tiene una relación especial con él.

—¿Cómo es posible? El señor Nacht tiene un estatus tan alto, ¿qué ve en una simple empleada como ella?

—Bueno, nunca se sabe…

—No importa, no sigamos. Si el señor Nacht se entera, nos despedirá.

Al oír pasos, Charlotte huyó inmediatamente del baño. Estaba desconcertada por lo que oyó. ¿Fiona, del departamento de administración, lo vio mal? ¿Fue Zachary quien me salvó?

Mientras reflexionaba sobre el asunto, sintió un aura fuerte que venía del lado opuesto.

Levantó la cabeza y vio a Zachary caminando frente a ella con las cejas fruncidas. Tenía una expresión oscura en el rostro.

Instintivamente, bajó la cabeza y se quedó parada en un rincón.

Sin hacer contacto visual, Zachary pasó junto a ella.

Sólo después de oír que la puerta se abrió y se cerró, dejó escapar un suspiro de alivio al saber que había entrado en la oficina del presidente. Discretamente, regresó a su mesa.

—El señor Nacht está de mal humor hoy. Ten cuidado y no cometas errores —le recordó Lucy en voz baja.

—Por supuesto. —señaló Charlotte.