Llegaron a la academia y Noe estaba en la puerta abrazando a todos los que entraban.
— Julait — dijo mientras abrazaba a Ava y le daba un beso en la mejilla.
Todos fueron a la cocina en busca de comida y un buen café, algunos más animados que otros.
A pesar de que había mucha comida, la castaña no tenía mucha hambre. Podía ver a los demás disfrutar y alagar la comida.
— ¿Ya no vas a comer más? — preguntó Ruslana, y Ava negó. — ¿Quieres tú? — ofreció acercándole un pedazo de pan.
— Tía, casi no has comido — respondió preocupada la pelirroja. La francesa intentó tranquilizarla diciendo que los nervios de la gala le habían quitado el hambre. No muy convencida, Ruslana aceptó.
La castaña buscó con la mirada al uruguayo, pero no lo encontró por ningún lado.
— ¿Y Lucas? — preguntó a todos mientras seguía buscándolo con la mirada.
— Ni idea, tía — respondieron algunos que no se habían dado cuenta de su ausencia.
— Iré a buscarlo — mencionó, dejando la cocina. Antes de irse, Paul se acercó a ella. — Te acompaño — le dijo.
Llegaron a los vestidores y encontraron a Lucas llorando. Ava y Paul se sentaron a cada lado de él y lo abrazaron.
— Ya lo verás, Lucas. Esta semana lo vas a demostrar todo — animó Paul mientras lo abrazaba.
— Eres increíble, tío. Siempre va a haber semanas difíciles, pero tú y tu voz sois increíbles — Aseguró la castaña tratando de animarlo.
— Por esto, por la academia en general, por todo lo que estoy aprendiendo, sé que puedo mejorar y no quiero que se acabe — respondió Lucas desanimado, tratando de secarse las lágrimas.
— Pero no se ha acabado, ni se va a acabar. Demuestra lo que tienes y, lo más importante, disfrútalo, Wachi — insistió la francesa, con Paul asintiendo.
— Exacto, tío. Te quedes o te vayas, pase lo que pase, disfrútalo — añadió Paul.
— Gracias, y felicitaciones a los dos. Estoy muy contento por ustedes — Felicitó el de pelo largo, abrazándolos y sonriendo.
— Estoy orgullosa de ti, Loki. No te desanimes — le dijo Ava volviendo a abrazarlo y besando su cabeza.
Se levantaron y fueron al comedor, dejando un poco de espacio para Lucas.
— ¡Vivan los expresos! — gritó Juanjo mientras esperaba que sirvieran el suyo.
— Yo también quiero uno — gritaron Ruslana y Ava, corriendo hacia donde estaba el maño.
— Lo han hecho increíble vosotros dos — Declaró la castaña mientras los abrazaba.
— Tía, tú no te quedas atrás — respondió el maño con afirmaciones de la pelirroja.
— Cuando vosotros pasaron, tuve un bi pánic horrible — confesó la francesa haciendo reír a los otros dos y acercándose de manera coqueta a ellos. Los tres rieron y siguieron la broma. la pelirroja se acercó haciendo caras raras, provocando la risas descontroladas entre la castaña y el moreno. Fueron interrumpidos por la voz de los demás y la de Noemí, quienes estaban apoyando a Lucas y a Suzete.
— Bienvenidos a Operación Triunfo. Ahora sí que sí. Y pensad en algo, no quiero ser aguafiestas, pero el próximo lunes será peor, porque uno de vosotros ya no estará aquí, y teneis que prepararse — mencionó Noé mientras todos se abrazaban.