prólogo.

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i.

a jungkook nunca le gustó la idea de mudarse a seúl, ama busan con su vida pero había entendido que era para el bien de todos.

así que allí está, frente a un salón lleno de desconocidos que le miran curiosos.

—buenos días a todos, soy jeon jungkook, vengo de busan y tengo trece años—. se presenta haciendo una reverencia a todos sus, de ahora en adelante, compañeros.

—bien, ve a sentarte junto a... kim sejeong, es la vicepresidenta del curso, ella y taehyung te guiarán para que te acostumbres—. indica el maestro y una bonita castaña alza su mano.

se dirige a su lado y toma asiento.

—es un gusto, jungkook—. saluda la vicepresidenta estirando su mano, jungkook la toma y le sonríe.

—el gusto es mío, sejeong—. corresponde antes de sacar su cuaderno —¿qué clase es?—.

—matemáticas—. responde y con ello jungkook se dedica a prestar atención.

después de todo no podía ser tan malo.

luego de una hora y media de fórmulas, ejercicios, y demás, jungkook al fin deja su cerebro descansar con el primer receso.

sejeong le dice que tome su colación mientras recorren todo el lugar y el azabache obedece tomando su leche de banana más sus ricas galletas preparadas por él pero horneadas por su madre.

no nota cuando un bonito castaño se para junto a sejeong de manera tímida pero la chica golpea algo brusco su hombro y le saluda eufórica.

—¡taehyungie!, casi no dejabas hablar al profesor, trata de callarte para la próxima clase—. bromea la chica con una gran sonrisa y tono elevado.

el castaño simplemente ríe bajito, jungkook lo mira y siente como su mundo se detiene y empieza a reproducir todo en 0.5, el presidente de la clase acomoda su flequillo y sus ojos al fin se chocan.

entonces su rostro se prende en tonos rosados y su corazón palpita acelerado, su estómago cosquillea y sus manos sudan, por otro lado, el castaño no está distinto.

su respiración se estanca cuando puede apreciar los ojos de ciervo bajo su flequillo, sus mejillas rosa y que decir de sus incisivos centrales que sobresalen en sus labios entre abiertos, esos labios tan lindos.

eran rojizos y estaban humectados, un bonito lunar los decoraba con ternura.

sejeong carraspea divertida por la situación y algo emocionada por presenciar el amor a primera vista de su amado kim taehyung, el tierno y tímido presidente de la clase.

—¿quieres galletas?—.  pregunta jungkook cuando el recuerdo de su abuela llega a su mente.

"un hombre se conquista por su estómago", dice ella.

—uh sí, gracias—. acepta el castaño tomando una de las galletas para darle un mordisco.

el azabache espera expectante alguna reacción y se siente dichoso de ver las cejas alzadas, el asentimiento y el brillo en sus ojos.

—están muy ricas—. comenta dedicando una sonrisa entre risitas nerviosas.

entonces jungkook conoce la gloria allí y no se detendra hasta que aquella sonrisa sea solamente para él.

taehyung no sabía que le esperaba.

— koocinnamon.

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