From Study To Love - [Son Gohan]

Cap. 4.- Un Malentendido

*¡Bip, Bip, Bip!*
El molesto ruido del despertador, como cada día tengo que levantarme temprano. Me levante, me bañe, me vesti, desayuné y me fui a la escuela. Tal vez esto ya pueda ser costumbre en un mes, espero.
En fin, parecía que este día era bastante normal todo tranquilo por las calles, pues estaban muy vacías, tal vez sea porque voy temprano, bueno, mejor para mi.
Llegué a la escuela sin ningún inconveniente, obviamente entrando a mi salón ya estaban otros compañeros, pero eran pocos en comparación con el total. Me fui directo a mi asiento a esperar que las clases del día de hoy dieran inicio. Después de un rato comenzó a llegar el resto de mis compañeros, uno de ellos fue Kyotaro, que después de dejar sus cosas en su asiento fue directo conmigo a hablar.

- Muy buenos días, Kyotaro. -
Lo saludé con una sonrisa, me alegra que no tenga que pasar todo el tiempo solo.

- Buenos días, Gohan. Parece que hoy llegaste más temprano que yo. -
Bromeó mientras soltaba una burla.

- Así parece. -
Respondí mientras rascaba mi cabeza, estaba un poco apenado, pues tenía razón, normalmente llegaba un poco tarde o después de él, aunque no es mi culpa... Algunas veces.

- Ayer estuviste increíble, tu y Nakano nos hicieron morder el polvo. No sabía que eras tan atlético. -

- Bueno, es que practicó desde muy pequeño. -
Solté una pequeña risa nerviosa.

- Ya veo, ¿Es por eso que tienes esa cicatriz en tu brazo izquierdo? -
Cambio un poco su actitud al preguntar eso, parecía que no sabía si continuar o no.
- Ayer no me atreví a preguntar por si era algún tema serio, ¡pero la curiosidad me mata! -
Admitió regresando a sus actitud habitual.
Realmente nunca me puse a pensar en la cicatriz que me dejó Cell, de hecho, olvidé completamente esa cicatriz. Me quedé en silencio por unos segundos, pues estaba pensando en una excusa, no quería decirle que una cucaracha humana color verde me hizo esto, además, eso tampoco suena creíble.

- Si, por accidente resbale y caí sobre una roca puntiaguda. -
Dije nervioso, esperando que se lo creyera. Afortunadamente me creyó, pero se echó a reír cuando lo proceso con más detalle.

- Yo pensé que ibas a algún gimnasio o algo así. - Dijo mientras se calmaba un poco.

Después de eso seguimos hablando un poco más hasta que Ichika llegó y me saludo, y yo le devolví el saludo.
Esto le llamo la atención a Kyotaro pues comenzó a mirarme con una cara algo extraña mientras levantaba sus cejas seguidamente.

- ¿Qué sucede? -
Pregunté confundido por su reacción.

- Oh, vamos. Sé que tienes algo con Nakano, fue la primera en ofrecerte el asiento, además también escuché que te vieron hablar con ella en varias ocasiones. -
Explicó, supongo que se refiere a las veces en las que hablé con sus hermanas, y como todas tienen el mismo apellido era normal llamarlas Nakano a todas.

- Te equivocas, eran sus hermanas con las que hablaba -
Trate de explicarle, pero se lo tomo menos en serio, pues parece que entendió mal.

- Oh, ya veo. Así que también estás tras sus hermanas, ¿no? -

- Ya te dije que no es eso -

Seguimos así unos poco minutos, pues el profesor llegó al poco tiempo obligando a todos a tomar asiento.

[ . . . ]

El tiempo de descanso para el almuerzo dió comienzo, y como siempre espere a ser el ultimo en salir.
Estando afuera volví a buscar aquel lugar solitario y tranquilo de aquella vez, lamentablemente está vez fue ocupado por algunos compañeros de otras clases, así que me dedique a buscar otro lugar.
Afortunadamente logré encontrar uno, pero este no era tan vacío como el otro, por lo que de vez en cuando escuchaba a la gente que pasaba hablar sobre mi, me incomodaba mucho, pues la mayoría de veces no logré escuchar lo que decían, y las pocas veces eran de mi gran apetito.
En fin.