Soñar sólo conmigo | maxley

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—¿para qué me querías, brad?—su voz resonó detrás mío. estábamos solos en el estacionamiento del hospital; después de la discusión con esa señora lo más que quería era sentir su olor cerca de mí.

—te llamaba para invitarte a cenar, ¿quieres?—vi como se iba sonrojando de apoco, su rostro se veía tan resplandeciente hoy. a lo lejos pude escuchar las voces de unas enfermeras, las identifiqué como mary y elizabeth. ellas dos parecían perras detrás de mi max.

—me encantaría.

—vayamos entonces—lo invité a entrar a mi auto y en cuanto vi la figura de esas dos arranqué el carro—. bien, ¿y qué te gusta comer? para saber qué pedir en el restaurante.

el se quedó pensando un momento—me gusta todo, la verdad, a excepción de los mariscos—pude escuchar una risa tímida salir de él. este hombre no puede ser más perfecto.

cuando llegamos al lugar, pedí la reservación y nos fuimos a sentar. fue una noche cómoda, pudimos conectar más y sentí como mi corazón aceleraba todas las veces que él hablaba.

este sentimiento nunca lo pude sentir antes. era algo... posesivo y lindo. por eso no me gusta enamorarme, porque me encapricho con tener a esa persona solamente para mí y era lo que estaba empezando a sentir con max.

apretaba los puños cada vez que veía a una de esas zorras poner una de sus manos encima de él, cuando le preguntaban si se veían bonitas y, principalmente, cada vez que hablaban mal de mí con él. son unas completas estúpidas, no les importa que él sea cercano conmigo, aún así siguen contándole mierda y rumores falsos para alejarlo de mí.

al llegar la hora de irnos, le dije que lo iba a ir a dejar y él aceptó. en el camino, seguíamos hablando de cosas triviales, sin mucha importancia mientras me enseñaba la dirección de su hogar. al llegar a nuestro destino, pude observar que su casa se veía cómoda y hogareña, tenía muchas plantas en la entrada y estaba pintada de un color beige relajante.

—hasta mañana, bonito.

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