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Había quedado con Haerin de ir al parque de diversiones, a las tres de la tarde.

Y Hyein, con ansiedad, terminó levantándose a las cuatro de la mañana, sin poder seguir durmiendo normalmente. Se quedó el resto de la mañana viendo fotos del Instagram de la linda castaña con ojos de gatito, repasando cada detalle de su rostro, sus sonrisas y momentos felices compartidos en su perfil. Cada foto alimentaba su emoción y sus nervios, mientras esperaba ansiosamente el momento de ver a Haerin en persona.

Llegaron las dos de la tarde y Hyein seguía buscando qué ropa ponerse.

Su cabello ya se había secado y ahora tenía la toalla envuelta en su cadera porque la misma se había caído de su pecho.

Miraba nerviosamente el reloj mientras revisaba su guardarropa, buscando algo que la hiciera sentir segura y cómoda, pero también quería verse especial para Haerin.

Finalmente, escogió unos jeans negros anchos desgastados, una camiseta mangas cortas de un color gris oscuro igualmente ancha. Unos botines de cuero cinético, algunos anillos y una chaqueta de mezclilla.

Pasó sus manos por su cabello corto y azabache, desordenandolo ligeramente. Se miró en el espejo, deseando ver por fin a la linda líder del club de jardinería. A la chica que solía dejarle notas anónimas, esa adorable chica que se robó su corazón sin siquiera darse cuenta.

Hyein se sentía nerviosa pero emocionada mientras se preparaba para encontrarse con Haerin en el parque de diversiones. Cada detalle de su atuendo había sido cuidadosamente elegido para causar una buena impresión, pero sobre todo, para sentirse cómoda consigo misma. A pesar de la ansiedad que la consumía, una sensación de anticipación y emoción llenaba su corazón.

Finalmente lista, Hyein salió de su casa y se dirigió al parque. El sol brillaba en el cielo, iluminando el día con una cálida luz que reflejaba su estado de ánimo. Mientras caminaba por las calles hacia su destino, no podía evitar sonreír pensando en la tarde que tenía por delante.

Al llegar al parque de diversiones, Hyein buscó con la mirada a Haerin entre la multitud. Su corazón latía con fuerza en su pecho mientras se preguntaba si Haerin estaría allí esperándola. Y entonces, la vio.

Su corazón saltó feliz en su pecho al ver a la linda chica de ojitos de gato. Estaba parada mientras miraba distraídamente los juegos. Usaba una falda corta de color rosa suave, combinado con un tierno suéter -bastante delgado- de color blanco.

Hyein se acercó con paso decidido hacia Haerin, su corazón latiendo con fuerza en su pecho. La emoción se apoderaba de ella mientras se acercaba más y más a la encantadora chica de ojos de gato que había ocupado sus pensamientos durante tanto tiempo.

Haerin levantó la mirada justo en el momento en que Hyein se acercaba, y una sonrisa brillante se formó en sus labios al verla. Sus ojos se iluminaron con alegría al reconocer a Hyein entre la multitud.

Dos pares de ojos. Marrón y avellana viéndose fijamente, brillando, reflejando la emoción y el anhelo que sentían en ese momento.
Un silencio cómplice pareció envolverlas mientras se encontraban cara a cara, como si el mundo entero se detuviera por un instante para permitirles disfrutar de ese momento especial.

Miró fugazmente los labios color rosa de Haerin, sintiendo una oleada de calor recorrer su cuerpo. Deseó acercarse, besarlos y morderlos hasta dejarlos rojos e hinchados.
Probar el sabor de su gloss y escuchar los tiernos y agudos gimoteos que escaparían de los labios de Haerin al hacerlo.

Tomar su cintura fina y diminuta entre sus grandes manos, y acercarla suavemente hacia sí misma, clavar sus colmillos en su cuello y encajar una tierna mordida, permitiendo que un suspiro de placer escapara de los labios de Haerin. Hyein imaginaba el dulce sabor de su piel, el calor que emanaba de su cuerpo mientras se fundían en un abrazo lleno de pasión y deseo.

Secret Graden - Maknaez.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora