𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐/𝒅𝒊́𝒂 𝒅𝒐𝒔 : 𝒄𝒐𝒎𝒊𝒅𝒂

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¿Esta ansioso? Si, ¿esta exagerando? Tal vez, ¿habra un cambio de planes? No lo cree.

Lü Bu jamás fue una persona ansiosa, ni de niño ni de adulto, él siempre mantenía la calma y jamás cedía a la presión, pero ahora, desde su relación con el dios del trueno más fuerte las cosas cambiaron, sus hermanos de armas le suelen decir que actúa como una colegiala enamorada cuando esta con Thor, no sabe que demonios significa esa palabra, pero ha de ser demasiado ridículo su significado por como se suele reír el loco de Nostradamus cuando lo mencionan.

Deja esos recuerdos pasados y se concentra en mirar a la lejanía la figura de Thor, espera ansioso ver la enorme figura de su pareja en el horizonte.

Y claramente tiene sus razones.

Estuvo esperando este día por mucho tiempo, por no decir meses, hoy finalmente podrá disfrutar de un almuerzo con su pareja, joder, después de tantos meses de trabajos exhaustivos tienen un momento a solas.

Golpeando incesantemente su pie contra el piso, Lü Bu, sigue esperando. No será difícil esperar, estuvo décadas así y solo por unos minutos no será la gran cosa para él, al fin, la enorme figura de Thor aparece en su campo de visión.

Con su largo cabello rojo mesiendose al compás del viento, el como los rayos del sol iluminan con elegancia la silueta de su pareja, se siente tan afortunado en que sea él quien reciba al imponente dios nórdico en aquella morada que se hizo su casa.

Thor sonríe al ver a Lü Bu, después de tantos meses sin poder verse por sus obligaciones verle parado en su hogar le llena de gozó, sin evitarlo, acelera su andar hasta llegar a la entrada de su hogar.

El chino sonrie mirando a su pareja, Thor levanta con una gran facilidad al moreno dándole un beso de bienvenida; sentir los suaves labios del titánico hombre contra los suyos es una de las recompensas más grandes del mundo, es casi como si ese beso le volviera a dar vida y eso le fascina de sobremanera. Thor desea con toda su alma y corazón hacerse uno, otra vez, con el general pero sus planes se ven opacados cuando siente al guerrero chino apartarse, confundido se aleja mirando a su novio que le sonrie algo apenado.

Jalando con algo de su fuerza al nórdico, Lü Bu lo lleva al comedor donde un enorme banquete lo recibe, el pelirrojo mira con asombró a su amado que escapa de la mirada contraria.
El general nunca en su vida supo cocinar, lo intentó una vez, fracaso terriblemente, por lo tanto Cheng era quien se encargaba de hacerle de comer en sus años en Midgard, no fue hasta este día en lo que aprendió a cocinar usando el llamado “Internet” y guiarse mediante “videos tutoriales” de cocina; se esforzó mucho por crear esas comidas a base de la gastronomía Noruega, se le quemaron dos o tres platos, pero de los errores se aprende.

Secretamente Radringz fue su catadora, la muchacha al ser su compañera de batalla y amiga le dira sin pelos en la lengua lo horrible que le quedaron algunos platillos, no piensa admitir que si le dolieron esos comentarios constructivos pero debían darse para que mejorará.

La valkiria fue de lo más dulce al decir sus opiniones, pero Lü Bu los sintió como navajas, tiene el corazón blando por eso.

Thor esperaba cualquier cosa que hiciera su general, realmente cualquier cosa, pero de todas menos ver a su amado haberse esforzado en cocinarle algo con sus propias manos. Sin poder evitarlo su corazón pálpito con una fuerza arrolladora, imaginarse a su moreno en una actividad tan banal le calentaba el corazón.

Tomando asiento, el dios degusto los platillos, manjares son iguales bañaron sus papilas gustativas se sentía en el cielo mismo, a su lado Lü Bu se veía nervioso es su primera vez en la cocina y teme haber hecho algo mal, aunque vea a Thor casi atragantarse por comerse los platos por su sazón.

─ ¿Te gusto?. ─Inquiere nervioso.

Thor traga lo que tenía en su boca. Le es gracioso como su amado pregunta lo obvió, Thor sabe que es la primera vez en la que cocina y aunque este nervioso, la comida le quedó excelente.

Sin dudas sobre sus palabras afirma a la pregunta. ─ Es lo más delicioso que he probado, gracias Bu.

El general adquiere un tono rojizo, pero sonrie ante sus palabras.

─ Espero lo hayas disfrutado, porque no creo poder volver a cocinar.

─ Entonces a la próxima, hagámoslo juntos.

Dictamina decidido, si cocinar hace que pasen tiempo juntos, lo hará.

¿Que importa si se les quema algo?, ellos pasarán tiempo juntos en un campo más peligroso.

Con esas palabras, la tarde es más acogedora.

Un ambiente familiar tan comodo donde Thor y Lü Bu se sienten uno solo.

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