T̶e̶n̶í̶a̶s̶ q̶u̶e̶ s̶e̶r̶ t̶ú̶.̶

𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐/𝒅𝒊́𝒂 𝒕𝒓𝒆𝒔 : 𝒆𝒏𝒇𝒆𝒓𝒎𝒆𝒅𝒂𝒅.

La depresión es más que tan solo sentirse triste o tener un mal día. Cuando la tristeza dura bastante tiempo e interfiere con las actividades normales diarias, usted podría estar deprimido. Los síntomas de la depresión incluyen los siguientes:

Sentirse triste o ansioso con frecuencia o todo el tiempo.

No querer realizar actividades que antes eran divertidas.

Sentirse irritable, frustrado con facilidad o intranquilo.

Tener dificultad para dormirse o seguir durmiendo.

Levantarse muy temprano o dormir demasiado.

Comer más o menos de lo usual o no tener apetito.

Tener malestar, dolores, dolores de cabeza o problemas estomacales que no se mejoran con tratamiento.

Tener dificultad para concentrarse, recordar detalles o tomar decisiones.

Sentirse cansado, aun después de dormir bien.

Sentirte culpable, que no vale nada o desamparado.

Pensar en el suicidio o en hacerse daño.

Esos eran los síntomas que más sufría Thor, desde aquel día, todo se volvió gris.

La tristeza que lo acompañaba es demasiado palpable, tanto que muchos lo veían como si solo fuera un cascarón vacío. Ya no salía a correr, no iba a clases de boxeo, todo el tiempo se la pasaba en su habitación escuchando la hermosa risa de la única persona que en verdad amo.

Si bien el pelirrojo tenía un carácter algo explosivo, ahora todo es peor, se irrita con más frecuencia llegando al punto de matar a golpes a una persona que se atreva a hablarle.

Ya casi no duerme y sus ojeras se ven más pronunciadas, su voraz apetito a parado, casi no come y si lo hace es solo por obligación de su tutor.

Llora todas las noches sintiéndose culpable de lo que pasó, aun cuando así debieron ser las cosas.

Thor tenía depresión, y esta solo aumentó cuando él desapareció de su vida.

Lü Bu Housen, un joven estudiante de veterinaria fue su mayor amor, ambos se conocieron en un cementerio, pues, el morocho había ido a dejarle flores a la tumba de su padre, ambos congeniaron bien, se hicieron amigos y después sus sentimientos por el otro crecieron a algo más que una amistad.

Lü Bu fue su rayo de sol, fue su todo para lograr salir de la depresión que lo consumía.

Pasarón increíbles aventuras juntos, desarrollaron un fuerte lazo inquebrantable, nadie más que ellos existía en su pequeña burbuja.

Hasta que ocurrió ese día.

─ Fue mi culpa. Debí luchar más por tí. ─Ahoga un grito abrazando su almohada con fuerza.

El 31 de agosto a las 2:17 de la tarde estando en su trabajo de medio tiempo le llegó una llamada del Hospital, su amado Lü Bu fue hospitalizado en el mismo tras haber sufrido un ataque fuerte de tos.

No debió ser preocupante, pero escuchar como esa tos contenía sangre lo preocupó.

Sus piernas le habían dolido por todo lo que corrió, la enfermera le explicó que su pareja había sido detectado con cáncer pulmonar y que al parecer este estaba muy avanzado.

Estas noticias lo dejaron devastado, ver a su amado Lü Bu, a su universo postrado en esa cama conectado a tantos aparatos le rompían el corazón.

Trabajo arduamente para conseguir el dinero necesario para el tratamiento, pasaron días, semanas y meses pero no le alcanzaba.

No fue hasta volver a hablar con su amado que todo su mundo se desmoronó.

─ Lamento mucho esto ─con voz ronca le habló─ Thor, te pido que dejes de hacer esto.. No quiero ser egoísta pero ya estoy cansado.. Perdóneme por ser una carga.

Thor niega con velocidad, eso no es así, ¿por que piensa que es una carga?.

─ No, no eres una carga. ─Le afirma con un hilo de voz, le era irreal que su pequeño dragón pensara eso─ nunca lo fuistes, por favor no me dejes, no me hagas renunciar a tí.. Eres mi mundo, no, eres mi universo enteró por favor no te vallas.

Súplica con la voz rota, de sus ojos dorados salen una gran cantidad de lágrimas amargas, tiembla ante la idea de perder a su único gran amor.

No quiere eso, no quiere un mundo gris, no quiere un mundo sin Lü Bu.

─ Siempre estaré contigo, aunque no me veas, aquí estaré cuidandote. Te amo.

Fue el 1 de agosto a las 3:17 de la tarde en la que su amado chino lo abandonó.

Por mucho tiempo supo que no podría seguir sin él.

La depresión volvió y con ella el deseo de morir para estar con su amado crecía, pero debía seguir adelante, debía luchar por realizar los viajes y aventuras que tenía hechos para él y Lü Bu.

Aun debía vivir un poco más de tiempo para después morir con él.

─ Solo esperame, pronto mejorare, realizaré esos viajes y después me reuniré contigo.. Te amo Lü Bu.

Suspiro al aire recibiendo un suave toque del mismo, era casi una especie de caricia que le indicaba que su amado por seguía cuidando como le prometió.

•┈┈┈•┈┈┈•┈┈┈

Ayer no publique porque se fue la luz, igual espero les haya gustado bye.