Era lunes por la mañana y como cualquier otra persona, Rubius odiaba los lunes. Dudaba si valía la pena levantarse para ir a la universidad pero su duda se desvaneció cuando vio que luzu le había mandado un mensaje sobre la exposición que tendrían ese día, con pesadez de levantó de su cama y tomó una ducha.
Las bolsas negras debajo de sus ojos le avisaba a la gente que el rubio no había dormido lo suficiente y era verdad, después de lo que había pasado ayer con samuel, su cabeza no dejaba de dar vueltas al asunto. "Te amo", realmente le había dicho eso, no habría causado nada en el pero no fue el caso, y eso fue lo que le causaba un conflicto. ¿Porque le afectaba tanto el haberle dicho eso?, la idea de que estaba enamorado del pelinegro era absurda...después de todo la forma en la que lo había tratado durante toda la relación. Y aun así, era una posibilidad el estar enamorado de Samuel de Luque.
Tomo su mochila y la puso sobre sus delgados hombros, empezando a caminar a la universidad, perdido en sus pensamientos intentando no encerrarse en ellos, sin embargo la mente es más fuerte. Los múltiples escenarios de lo que pudo haber pasado si no hubiera actuado así, los escenarios de si no hubiera empezado esa relación, ¿que hubiera pasado si hubieran iniciado de manera diferente?, sacudió su cabeza alejando los pensamientos de su mente, necesitaba dejar de pensar en ello pues pronto tendría que exponer y era obvio que no había estudiado, probablemente luzu le mataría si se entera de ello.
Camino por los pasillos de la universidad los cuales estaban llenos de gente, incomodo se paso entre la multitud hasta llegar a su salón y sentar en el último banco del salón, sacó su teléfono y se colocó los audífonos empezando a buscar en sus cuadernos el tema de su trabajo, leyendo varias veces la presentación que habían hecho, en la cual sorprendentemente rubius si había colaborado. Después de algunos minutos estuvo listo pero aún así siguió leyendo varias veces la información, el contexto y pensando en las posibles preguntas que haría su profesor, que estaba cien por ciento seguro que lo odiaba, no había clase donde el viejo no le preguntara algo a el intentando humillarlo, intentaba mantener un perfil bajo durante sus clases pero al parecer eso no era suficiente para su profesor.
Separo su vista del cuaderno cuando vio entrar a la melena castaña fe su amigo por el umbral de la puerta, inmediatamente escondiendo el cuaderno y sonriéndo. -No estudiaste, ¿cierto?- pregunto encarando una ceja el castaño, dejando su mochila sobre la silla qué estaba a un lado de su amigo, se sentó y vio como su amigo desviaba la vista y sonreía, río ante ello ya que era lo normal en el. -Ya estudie, te lo juro- sonrió y el castaño asintió, confiando en su amigo. Llego la hora de empezar la clase y como de costumbre el hombre mayor llegó exactamente a la hora, entrando con una sonría enorme y con su vista puesta en el rubio, "¿Qué mierda le pasa?" Pensó el rubio, frunciendo el ceño...definitivamente ese viejo tenía algo contra el. En una breve introducción la exposición del rubio y el castaño inicio, aunque al principio ningún alumno estuviera muy atento la característica personalidad del rubio les ayudo a llamar la atención de los demás, aunque su conocimiento del tema era decente con ayuda de su labia parecía que era un experto en el tema.
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Pasada la clase el rubio sonrió con satisfacción, recordando la cara de su profesor al ver que todo el salón les aplaudió ante su presentación. Sentados en la cafetería bebiendo un jugo de mango disfrutando del sabor, -¿Te molesta si viene quackity?- cuestionó el castaño, el rubio negó pues el pelinegro de ojos azules le caía bien y había disfrutado el día que salieron, sonrió ante el recuerdo hasta que entre esos momentos se encontró con el rostro y la mirada del pelinegro de ojos morados, su sonrisa se borró.
-Hola- pego un pequeño salto cuando sintió una voz en su cuello, volteando y encontrándose con los ojos azules de quackity, sonriendole e invitándolo a sentarse a un lado de el. -¿Qué tal haz estado rubius?- pregunto curioso el pelinegro y empezando asi una conversación de varios temas. Entre risas y burlas, el rubio encontró unos ojos morados que le observaban a lo lejos, después de unos segundos el rubio desvío su mirado eh hizo como que no pasaba nada.
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Se encontraba caminando hacia su casa, era un poco tarde y el sol se estaba poniendo. Después de que quackity llegara se fueron a comer a un restaurante de sushi, fueron a un parque y siguieron hablando un poco más, dándose cuenta que el sol se pondría pronto, camino por varias calles e intentaba acelerar el paso para llegar pronto a su hogar.
Se detuvo en seco cuando frente a sus ojos vio el carro negro de Vegetta...la ventana bajo un poco dejando ver el rostro del pelinegro, encontrándose durante varios segundos, intentando descifrar qué quería el uno del otro, en silencio, como si todo lo que quisieran decir fuera atravez de su mirada...
"Los ojos son las ventanas del alma "
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FRIENDS || [RUBEGETTA]
Fanfiction"En público somos amigos y en privado algo más". Original de @csnnly No adaptaciones sin permiso. LEER BAJO SU PROPIO RIESGO ⚠️Homosexualidad, personas reales, ficción, escenas +18.⚠️ ETIQUETAS; 23/07/2024 #6 RUBEGETTA