05 stop

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Yunho y Yeosang no tuvieron suerte buscando el chupete de Mingi. Buscaron por todas partes y revolvieron hasta el armario, pero la habitación estaba vacía. Yunho estaba preocupado, el chupete no pudo haber desaparecido simplemente, la única opción era que lo habían perdido en otra parte. Y si alguien más lo encontraba, estarían perdidos.

(...)

Mingi estaba apilando todos los peluches que encontró en la casa en una pequeña torre, algunos eran de Seonghwa y otros eran de San, pero no pasaba nada, a nadie le interesaba si algún peluche desaparecía por un rato.

―¿Princesa? ¿Qué estás haciendo?

Mingi pegó un pequeño salto y volteó a ver a Yunho, quien entraba silenciosamente a su habitación. Mingi se había llevado una mano al pecho del susto.

―Lo siento, no quería asustarte.

Mingi ladeó ligeramente la cabeza y estiró los brazos para que Yunho se acercara a él y lo abrazara. Mingi había planeado saltar sobre su pila de peluches, pero fue interrumpido y ahora solo quería abrazos y besos.

Becho ―murmuró Mingi estirando los labios y cerrando los ojos.

Yunho se rió bajito y finalmente se acercó al menor, rodeó su cintura con los antebrazos y repartió besos por toda su cara.

―¿Qué estabas haciendo con todos estos peluches?

Mingi sonrió en grande.

―¡Salto! ―gritó separándose de Yunho―. ¡Así!

Mingi pegó un pequeño brinco y aterrizó sobre la pila de peluches, algunos se corrieron de lugar y partes del brazo izquierdo de Mingi golpearon el suelo. Mingi soltó un sonido adolorido y Yunho corrió a agacharse a su lado.

―¡Bebé! No puedes hacer eso ―le murmuró suavemente, acariciando el brazo lastimado de Mingi con pequeños frotes―. ¿Puedes moverlo por mí?

Los ojos de Mingi se habían llenado de lágrimas. Adolorido, asintió y comenzó a mover su brazo, doblando el codo.

Nanai ―murmuró Mingi con un enorme puchero.

―Así es, tienes una nana ―dijo Yunho soplando el codo de Mingi donde el menor tocaba con insistencia.

―¿Quieres hielo? ―preguntó Yunho―. Esperemos que no se inflame.

Mingi asintió aunque no sabía qué hacer con el hielo o para qué Yunho se lo estaba ofreciendo, pero estaba cansado y quería recostarse un ratito. Jugar mucho era agotador.

(...)

―¿Ya no duele?

Yunho se quedó viendo el brazo delgado de Mingi.

―No, solo fue un golpe. Minki exageró un poco ―dijo Mingi abultando su labio inferior.

―No digas eso, los bebés lloran si algo les duele ―se rió Yunho suavemente.

Mingi asintió cerrando los ojos.

―¿Oye, y qué te tenía preocupado antes?

Mingi se acomodó en el regazo de Yunho y abultó los labios otra vez, frunciendo la nariz.

―Tuvimos nuestro control de salud ―dijo Mingi comenzando a jugar con el cierre del abrigo de Yunho. El mayor asintió rápidamente―. Dijeron que todo estaba bien, sólo tenía que subir un par de kilos más para estar más saludable. Y tengo déficit de vitamina D. Me dieron unas ampollas para eso.

Yunho abrió los ojos con sorpresa.

Si después de todas esas dietas, la empresa le estaba pidiendo que subiera de peso, entonces Mingi debía estar en problemas. Un peso demasiado bajo sería muy preocupante.

I'm a little (stressed) -yungiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora