VUELTA A LA NORMALIDAD

19 1 0
                                    

Después de eliminar de mi vida a Marcos y a Elena decidí que tenía que seguir con mi vida con normalidad pero sin ignorar lo ocurrido.

A causa de lo ocurrido el grupo está más dividido que nunca, primero con lo de Jorge y Jesús y ahora con lo de Elena y yo.

 y no se porque me siento yo la culpable de lo que pasó, ¡definitivamente cada día estoy más gilipollas!

Hoy he quedado con Jesús, Amaya, Marina y su hermana. Ellos quieren hablar del tema, yo no, así que acabamos hablando del tema.

- No me creo que Elena haya hecho eso. Ayer hablé con ella y me dijo que todo lo que te contó ese tipo era mentira. Vamos Aurora.. tú la conoces...- dice Marina

- ¿Estás insinuando que Aurora es tonta? - dice Amaya de mal tono.

- ¡A ver! - digo yo. - La conozco por eso se que lo que me dijo ese gilipollas es verdad. Y no quiero hablar del tema, ¿no lo entendéis? 

En este momento no estoy muy cómoda con los chicos, es una cosa que nunca me había pasado pero que me presionen con un tema que me incomoda no es algo muy agradable. Por suerte al ver mi incomodidad dejan el tema. 

Para buenas noticias tenemos el regreso de Jesús de sus colónias y la nueva relación de Amaya que aunque sea a distancia será algo muy bonito, estoy segura.


Pasa todo el mes de julio y llega agosto, y la verdad es que mi verano no está siendo muy divertido. Mi madre y yo decidimos irnos a pasar dos semanas al campo a casa de una amiga de ella. A mi la idea no me desagrada ya que aunque el campo no me guste mucho la compañía sé que es buena. 

Llegamos allí el día dos de agosto y ya el primer día Judith, la amiga de mi madre, nos lleva a comer a restaurante con una estrella michelin. Me extraña no ver a Adam, el hijo de Judith, pero tampoco le voy a dar mucha importancia ya que es un chaval bastante arrogante.

Cuando volvemos a la casa de Judith encontramos a su hijo viciado al play y yo sin poderlo evitar pongo los ojos en blanco. Cuando se levanta a saludarme y me quedo impresionada como siempre) de lo bueno que está.

- Hola Aurora, ¿como estás? - me pregunta.

- Hola Adam. Yo estoy muy bien, gracias ¿Y tu?

- Yo bien también. Me alegra mucho que estés aqui, mis noches serán más divertidas - revela una mirada pícara con sus preciosos ojos verdes. - Si quieres esta misma noche te puedes pasar por mi habitación, o bueno mejor nos encontramos en el baño...

En ese momento reparo en la presencia de otro chico más o menos como Adam pero moreno y estoy seguro que es por él que no quiere que vya a su habitación.

- Adam no creo que sea buena idea... - le digo.- Mi madre estara esta noche y ya sabes como es.

- Sí, tienes razón pero no te librarás de que pasemos un buen rato juntos - se gira y vuelve a jugar al COD.

 Me voy a la que será mi habitación y me quedo pensando en la propuesta de Adam, sé lo que él quiero y sé lo que yo quiero pero no sería tan mala idea divertirme un rato.

Sigo deseando másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora