basket and sex

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🍒Lenguaje vulgar y explícito
🍒Contenido +18
🍒No romance
🍒 Capitulo basado en Hank
(imagen multimedia)

Desde hace días eh querido tener a Hank como algo serio, un chico 3 años mayor que yo, deportista, alto, cabello negro y tatuajes, conduce una Ducati. Últimamente me eh ofrecido a ayudarle con sus tareas para pasar más tiempo con él. Es inteligente pero demasiado enérgico.
Su actitud es bastante perruzca a decir verdad.
Es un maldito perro doberman.
Es muy serio, incluso a mí me tomo meses formar una especie de relación para que me saludara con una sonrisa. Demasiado cretino algunas veces.
Demasiado agresivo si lo encontrabas.
Era muy conocido por pelearse en los vestidores con algunos chicos.
Se me hacía demasiado cobarde que en un grupo de 7 o 5 alumnos lo fueran a molestar e intentar intimidar cuando el estaba solo en lo suyo.
Esa actitud tan perruzca lo llevó a cosas buenas, pues, al romper la quijada de dos de ellos parecía haber ganado algo de respeto pero a la vez más agresividad.
Jamás juzgue su defensa en contra de quienes intentaban joderlo, a mi parecer, era una persona paciente pero con sus límites claros y bien marcados.
Era un toro calmado.

Mi relación con Hank hasta ahora es más que nada de índole sexual. No me desagrada, no estoy inconforme pero quiero más de él. Algo más serio.
Es mi amigo, un amigo que me conoce desnuda y me a visto dormir.

Estábamos en el baile de graduación ese día. Demasiado cariñosos, al ser de baja estatura se le facilitaba cargarme y ese día estaba muy caballeroso y atento.
Alzó mi cabello al ver qué se atoro en una silla, abrochó mi vestido y acariciaba mis piernas.
Todos estaban en lo suyo, con sus parejas, con sus familiares.
No desaprovechamos que la escuela estuviera con salones vacíos para meternos en el auditorio. No pensé que algo fuera a pasar.

Atrancamos la puerta con el seguro normal y con sillas y bancas para estar más seguros.
Me lance a besarlo, tenía una confianza enorme ese día.
Estábamos en el escritorio. Demasiado amplio al menos para mí que soy algo pequeña.
Se veía tan caliente de traje, oliendo a un perfume demasiado masculino, me sentía como una gatita en celo.
Subió mi vestido hasta quedar a la altura de mi cintura.
Estaba a mis espaldas. Subió mis piernas al escritorio cuando lo escuché decir.
-En cuatro, ponte en cuatro- Escuché el cierre de su pantalón y como escupió saliva en su mano.
Sentí algo caliente entre mi entrepierna y después en mi entrada.
Me tomó de las caderas y bajo mi espalda a la altura del escritorio, mi cabeza y manos tocaban lo frío del escritorio.
Sentí sus manos tomar mi cintura y jalarla hacia atrás.
Sentí algo duro y grueso abriéndome.
-Ufff, que mojada estás-
Empezó a moverse lento
-Despacio si? Quiero que sientas como te entra-
Puso mis manos en mi espalda y me tomó de ellas, acariciaba mis manos para relajarme.
Alce mi cabeza un poco y enfrente de nosotros estaba la ventana, se miraba un reflejo oscuro por las persianas pero pude ver cómo se movía y sus gestos.
Cada vez que estaba totalmente dentro cerraba sus ojos y suspiraba.
Lo hacía lento.
Me solté de sus manos y lo tomé de sus caderas, lo empujé hacia adelante para penetrarme y el río un poco.
Así que empuje mis caderas hacia atrás más rápido. Podía escuchar lo mojada que estaba, mis fluidos y los suyos chocando.
Moví mis caderas más rápido.
-Que rico ver cómo te la metes solita- Se quedó quieto a ver cómo movía mis caderas, tomo mi cabello entre sus manos y formó una coleta.
-A ver perrita, métetela más duro, muevete en mi verga-
Empecé a mover mis caderas más rápido, cerré mis ojos al concentrarme en esa sensación.
Sentía mis mejillas calientes y un líquido escurriendo en mis piernas
-Ya estás goteando bebé- Dejo de penetrarme y me cargo para quedar en frente de él.
Abrió mis piernas y me dió un beso en el abdomen para empezar a penetrarme con su lengua. Me miraba fijamente y movía su lengua en mi clítoris, succionaba y lamía.
Sentí una presión en mi abdomen y unos toquecitos, lo tome del cabello y hundí su cabeza entre mis piernas, escuché como su lengua mojada se movía.
Sus labios y barbilla estaban empapados.
Me besó
-Pruebate para que veas que rico sabes- Metió su lengua en mi boca.
Esa fue la primera vez que lo hicimos, al ser la primera vez hubo una segunda, una tercera, cuarta, quinta, hasta que perdí el conteo.

Hoy tendría que ir a ver a Hank a los vestidores para entregarle algunas cosas que se quedaron en mi casa, después de la escuela se quedaban a jugar algunos equipos, Hank al ser de fútbol americano y basketball se quedaría casi todo el día ahí.
-Se puede?- Pregunté al guardia de la cancha.
No me quería dejar pasar porque no pertenezco a algún equipo y al hablarle de Hank se hizo el desentendido.
Hasta que apareció Hank.
-Por dios, es una chica Josías, deja de ser tan pesado- Hank me ayudó a cargar las cosas y lo miró mal
-Por qué se comporta así?-Pregunte
-Pues nunca a Sido amable, ni con nosotros que llevamos años de conocerlo, solo ignora al gordito-
Entramos a los vestidores y empezó a cambiarse.
-Qué jugaras hoy?-
-Basket- Comenzó a quitarse la playera y el pantalón.
-Crei que sería americano hoy, es martes...-
-Esque, no supiste pero muchos del equipo se salieron, están desconformes con la falta de organización y compromiso de algunos-
Dobló su ropa y la botó en el casillero.
Me senté en las bancas de madera hasta que note que miraba mucho detrás mío, estaba algo distraído.
-Amor, trajiste mi agua ?- Preguntó
Cosa que me extrañó, me solía decir amor pero no en momentos normales o cotidianos.
-Emm, si- Aquí está, me agache para tomarla y al subir mi mirada estaba viendo fijamente hacia atrás con el ceño fruncido.

-Gracias- La tomó y bebió un poco, aún mirando detrás mío.
No quería voltear porque sentí que sería demasiado obvio, podría ser alguno de los chicos que amenazaban a Hank o varios de ellos.
Hank me miraba rápido y después dirigía su mirada detrás mío. Lo que sea que fuera lo estaba distrayendo muchísimo.
Escuché que cerraron la puerta y se agachó para quedar más a mi altura.
Me miró fijamente y sonrió.
-Qué pasa?- Pregunté en tono bajo.
-Nada, por qué?- Colocó un mechón de cabello detrás de mi oreja y me besó antes de que pudiera contestar.
Su beso era profundo y lento, acaricié su cabello y cuello. Paso sus manos detrás de mi espalda y me cargó. Enredé mis manos a su cuello y mis piernas a sus caderas.
Acariciaba mis muslos y piernas.
Podía sentir el metal de los lockers en mi espalda y su peso contra mí.
Puso su cabeza en mi cuello y note que seguía mirando detrás mío.
Escuché la puerta y unos pasos, sentí como sonrió en mi cuello.
Me miró fijamente.
-Te la puedo meter un poquito?- Más sonrió.
Giré mi cabeza hacia atrás y no había nadie, al menos no por ahora.
Asentí y me llevo aún más adentro de los vestidores.
Bajó su short y su bóxer.
-Agarrate de mi cuello amor- Me aferré a su cuello con ambos brazos, desabotono mi short e hizo aún lado mi ropa interior, sin quitarmela por completo.
Puso su miembro en mi entrada y comenzó a moverse.
Escondió su cabeza en mi cuello y comenzó a dejarme chupetones pequeños.
Se alzó un poco la playera dejando ver si abdomen.
-Mira hacia abajo- Susurró
Mire hacia abajo y pude ver cómo estaba completamente mojada su erección y parte de su abdomen.
El miró hacia abajo igual que yo.
Ambos logramos ver cómo cada vez que la metía con fuerza salpicaban pequeñas gotas transparentes.

-Mira que rico se ve cuando te cojo-
Me aferré más a él y sentí su respiración agitada contra mí cuello.
Sentí tensión con placer en mi abdomen.
Se podía escuchar como entraba y salía.
-Que rico, me voy a venir amor- Me miró fijamente
Asentí y lo besé, acarició mi lengua con la suya y sentí un líquido caliente escurrir por mis muslos.
Era algo tarde ya, nos limpiamos un poco y nos vestimos rápido.
Al salir pude ver en el campo a Julián.
Un chico que en 4to grado me pretendía mucho, me mandaba flores, pero finalmente lo rechacé por su actitud tan amigable con otras chicas, era demasiado pick me boy, necesitaba la validación de no una, sino diez niñas a la vez. No era el tipo de chico que quería para mí, dejé de hablarle por completo y después de eso comenzó a empujarme y mirarme feo. Hank no sabía que hacía eso, solo que me pretendía y que si, estaba algo disgustado de que rompí contacto con él pero no que me llegó a molestar, si Hank lo supiera sabía que Hank armaría un problema. Iría a enfrentarlo y demás, no quería meter en problemas a Hank.
Hank sonrió y me tomó de la mano, los ojos de Julián se abrieron por completo y Hank besó mi frente.
-Adivina quién era el que entraba y salía a los vestidores a vernos- Me susurró Hank y río
-No sabía que practicaba-
-Ahh, juega como la mierda, quería entrar a basket y lo rechazaron, igual en Americano, solo viene a perder el tiempo la basura esa-
-Y por qué entraba a los vestidores?- Pregunté
-Por curiosidad de verme contigo supongo, porque no tiene nada que hacer ahí, yo creo que le daría un paro cardíaco si supiera que tienes mi leche escurriendo dentro- Me tomo de la quijada y me besó-Es bueno que sepan que tienes novio-
Con Hank me sentía protegida y segura, sus manos y brazos me rodearon completamente y besó mi frente.
-Suerte en tu partido-
-Te veo en la noche si? Paso por ti a las siete para ir al cine o algo-
Besó mis labios y pude ver cómo corrió hacia el campo y sus amigos corrieron hacia él.







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⏰ Última actualización: Jul 27 ⏰

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